La pareja de Lucas Ariel Otín, recluso de Villa María que murió asesinado en el penal de Cruz del Eje alrededor de la medianoche del viernes pasado, pidió “a la gente que deje de hablar y decir mentiras” sobre el hombre de 31 años y “respete el dolor de la familia” ante el violento deceso a puñaladas ocurrido dentro de la cárcel.
Selene Moreno se acercó a la Redacción de EL DIARIO durante la víspera y pidió hablar “para aclarar muchas cosas que no son verdad “como, por ejemplo, cuando lo vinculan “con el caso del “trapito”.
En este sentido, dijo que su pareja se llamaba Lucas Ariel Otín “y no como dijeron algunos medios” (entre los que no está EL DIARIO) “donde publicaron otra identidad”.
“En estos días se han dicho muchas cosas de Lucas, muchas de ellas muy ofensivas, que causan dolor porque no son ciertas”, dijo la mujer, quien aseguró que el crimen se produjo “dentro de un pabellón”, por lo que descartó que se hubiera registrado en una celda de castigo.
“A Lucas lo tuvieron de aquí para allá y, cuando pregunté por qué lo hacían, solo me dijeron que eran órdenes que debían cumplir”, aseguró la mujer, madre de un niño de un año, cuyo padre es el hombre fallecido.
Moreno puntualizó que el miércoles 17 de mayo “lo llevaron desde la cárcel de Villa María a Bouwer, y el viernes lo trasladaron a Cruz del Eje”.
A las 19 de ese día, según lo expresado por la mujer, “lo habían puesto en un pabellón (de la cárcel de Cruz del Eje)”, es decir pocas horas antes de ser acuchillado.
Previamente, el martes 16, antes de ser trasladado a la cárcel de Bouwer, Otín “pasó la noche encadenado”, según relató su pareja, quien dijo que lo sabe porque se lo contó su pareja por teléfono.
En otro momento de su exposición, Moreno dijo que se sentía “impotente” frente a lo sucedido, “porque nadie me atendió” ni dio respuestas ante los pedidos y reclamos, al tiempo que acusó a los directivos de los establecimientos penitenciarios porque siempre le pusieron trabas para verlo y no entendieron los motivos que les expuso, sobre todo cuando pidió una y otra vez que no lo trasladaran y lo dejaran en Villa María.
Al respecto, la mujer dijo que “si a él lo hubieran dejado en Villa María no hubiese pasado lo que ocurrió”.
“En ningún lado me dieron ayuda -manifestó la mujer y agregó-, fui a Tribunales, a los organismos de derechos humanos en Córdoba, pero en ningún lado me dieron solución”.
Al tiempo que aseguró que iniciará una demanda frente a lo ocurrido, “porque no quiero que esto le pase a otro”. Su pareja fue asesinada de varias puñaladas y “no puede quedar solo en eso”.
“Dijeron que tenía problemas con otros presos, pero ¿cómo puede ser, si la cárcel de Cruz del Eje es de máxima seguridad?”, se preguntó Selene.