Rubén Quevedo adelantó a EL DIARIO que analiza seriamente la posibilidad de no postularse otra vez como candidato a secretario general del gremio. “Estaré en la comisión, pero no al frente”, planteó
Las amenazas recibidas y la falta de respuesta de la Justicia hicieron que Rubén Quevedo, actual secretario general del SUOEM, analice la posibilidad de no postularse para la reelección. “Te diría que hay un 90% de posibilidades de no presentarme. Seguro estaré en la lista, acompañando a los que me sucedan, pero no quiero ir al frente”, planteó ante la consulta de EL DIARIO.
Informó que después de haber sufrido ataques en el estacionamiento de su auto y amenazas hacia su persona, quiere priorizar “la salud y la familia”.
“Es muy difícil todo. Yo fui a la Justicia, denuncié todo lo que me había pasado, presenté pruebas, di nombres y todavía no pasó nada”, dijo.
“Hasta hace pocos días vivíamos con un policía en la puerta de casa y esa es una situación injusta para mi familia”, agregó.
Es por eso que analiza la posibilidad de no encabezar nuevamente la lista oficialista del SUOEM, para las elecciones que se celebrarán en diciembre.
“Yo creo en la Justicia, espero que investiguen. Pero desde que hice la denuncia hasta ahora no me llamaron nunca, creo que tampoco llamaron a los funcionarios que nombré y estoy seguro que no convocaron a mi compañero de la comisión, a quien le cruzaron el auto para increparlo pidiendo que no me presente de nuevo”, señaló.
Las amenazas
En julio de este año el dirigente sindical dijo a este medio que “altos funcionarios” lo intimidaron telefónicamente.
Ante el fiscal Daniel Del Vö fue más explícito, indicando que la persona que lo trató de “traidor” y lo increpó telefónicamente fue la diputada nacional Nora Bedano.
En cuatro fojas, la empleada judicial transcribió las declaraciones del dirigente del SUOEM, las que caratuló como “amenazas calificadas”. Allí está sentado el “aviso” que le hicieron en octubre del año pasado, cuando un empleado municipal le informó que “(Jesús) Chirino había contratado un sicario santafesino por 30 mil pesos y me ofrecía que por el doble de esa plata podía agredirlo a él”.
“Cuando me preguntaron, dije lo mismo que les informé a ustedes: jamás creí en la acusación contra Chirino, quien, además, expresó su solidaridad conmigo”, agregó.
El otro hecho fue indirecto: un grupo de personas que él no conoce le cruzaron el auto a un miembro de la Comisión Directiva del SUOEM para decirle que si no querían problemas, que Quevedo no se postulara como candidato a conducir el gremio para las elecciones de noviembre.
“Seguro van a citar a mi compañero de la comisión para que él cuente lo que le pasó”, dijo Quevedo en esa oportunidad. Pero todavía no lo citaron.
Pero los hechos más graves sucedieron el mismo día de los comicios provinciales. “El 5 de julio balearon el lugar donde yo guardaba el auto y después hicieron lo mismo contra mi casa”, relató.
“Cuando en la Policía me preguntaron qué político me había amenazado, yo dije la verdad. La única persona que por teléfono me dijo de todo fue Nora Bedano. Ella estaba enojada porque con el gremio pedimos Aportes del Tesoro Provincial (ATP) para la fiesta de los municipales. Me dijo traidor porque le estaba pidiendo al Gobierno provincial. También me dijo que no me iba a perdonar nunca. Fue una conversación muy fea cuya grabación presenté en la Fiscalía”, denunció en la nota publicada en julio de este año.
“También les dije que el intendente (Eduardo) Accastello sabía lo que me había pasado en octubre y que incluso puso gente para que me custodiara”, agregó.
Críticas
Ayer, un trabajador de la Municipalidad de Villa Nueva, Samuel Omar Rosa, adelantó que se postulará como candidato para competir en los comicios sindicales. Además, denunció irregularidades en el tiempo de la convocatoria.
Al ser consultado sobre el particular, Quevedo señaló que actualmente está en licencia médica, pronto a ser intervenido quirúrgicamente, por lo que no está al tanto de los cuestionamientos.