Los ediles de Villa María para la Victoria aprobaron enviar un requerimiento a Vialidad Nacional instando a que se tomen las medidas necesarias en el lugar y para que se dé inicio a las obras. Hubo duros cruces entre concejales
En el marco de la disputa política y mediática que ha generado la inacción que existe en la intersección de ruta 9 y avenida Jauretche por las obras necesarias para prevenir más accidentes en el lugar, en la sesión del Concejo Deliberante de ayer se aprobó por mayoría el envío a la Dirección Nacional de Vialidad de un «requerimiento para que se tomen las medidas necesarias» y pedido para que se dé inicio a las obras requeridas.
El proyecto del bloque Villa María para la Victoria no fue acompañado por la oposición por lo que, terminada la sesión, que tuvo acalorados cruces, los protagonistas se manifestaron al respecto.
El presidente del bloque Villa María para la Victoria, Carlos De Falco, lamentó «profundamente» no haber tenido el acompañamiento de los ediles de Juntos por Villa María «porque esto no es más que pedir algo que es necesidad de los villamarienses, para que se intervenga y se hagan la obras».
A su vez, aclaró que «esto tampoco es un reproche, es una solicitud que es altamente necesario, y creemos que como expresión del pueblo que lo tenemos que volver a reiterar».
Luego de referirse a la carta documento que envió el intendente ayer (ver página 4) al ente nacional, dijo que «toda la comunidad está reclamando la obra y esta es una forma más de hacerles ver la importancia que tiene para el Concejo Deliberante».
Hay una polémica en relación a la colocación de un semáforo, ya que desde la oposición aseguran que el municipio está habilitado para hacerlo pero no lo hizo, mientras que De Falco insistió con que «no se puede poner porque la vieja traza de la ruta 9 es jurisdicción federal». «Para intervenir esa arteria no solamente tenés que tener la autorización sino también la visación y la fiscalización de lo que se hace por parte de Vialidad», subrayó.
«Por eso es que el intendente dijo en reiteradas oportunidades que estábamos dispuestos a poner el semáforo, pero necesitamos la autorización y la conformidad de Vialidad para que nos diga cómo lo quieren poner, para ponerlo», quiso dejar en claro el edil.
Finalmente, De Falco recordó, sobre las gestiones y pedidos: «Primero que hubo visitas de Vialidad con gente de la Municipalidad en 2016; después hubo una nota de junio de 2016 donde el ingeniero Ramírez pide la obra; también ha habido un intercambio epistolar por mail profuso que exhibí en sala y ha habido acta de constatación de escribanos demostrando el tránsito existente en el lugar, no sé qué más formalidad quieren».
Cabe aclarar que el edil reconoció que «esta es una obra que se ha pedido hace tres o cuatro años atrás, eso también es cierto, pero el pedido está».
«La Municipalidad no cumplió»
Por su parte, la presidenta del bloque Juntos por Villa María, Karina Bruno, consideró que «hasta 2016 que se hizo el cambio de gestión no se había hecho ningún proyecto, ningún pedido para ver qué se podía hacer ahí».
De todas formas, aseguró que «se formuló un proyecto, que fue recibido por Vialidad, y lo que planteó es que esa zona requiere una refuncionalización completa porque está prácticamente en zona urbana».
A partir de eso, afirmó, «desde vialidad se planteó hacer un proyecto más integral que contemple no solo lo que es el ingreso a la Universidad sino lo que es el barrio Ramón Carrillo, es Hospital y también el acceso a la Rural».
Esto «está en pleno desarrollo ejecutivo para ser adjudicada a quien corresponda; el proyecto se está haciendo, e implica todo el trayecto de ruta 9 que comprende el acceso».
De todas formas, aclaró que «como todo proceso de obra de gran envergadura requiere de todo un procedimiento y desarrollo no solo desde el punto de vista ejecutivo sino de procedimiento de adjudicación y demás».
De cualquier manera, Bruno dijo que «mientras tanto había que tomar medidas para prevenir». «Después de varias gestiones, y de que Vialidad haya venido varias veces a la ciudad, la última vez en noviembre del año pasado, con lo que se quedó de acuerdo en esa reunión es que Vialidad reponía y hacía toda la nueva cartelería y señalética nueva y el municipio implementaba todo lo que es luminaria, que se hacía a través del Corralón, y el semáforo que supuestamente ya estaba adquirido, eso fue el 3 de noviembre. Desde ese momento hasta acá no pasó nada, salvo que se hizo la renovación de cartelería vertical y horizontal, que se hizo el señalamiento sobre la ruta, pero la parte que correspondía al municipio en cuanto a semáforo y luminaria no se hizo nunca», apuntó.
Además, la concejala lanzó que «nunca hubo formalmente un pedido de autorización por parte del municipio a Vialidad para la instalación, siempre fueron este tipo de conversaciones y la última fue en el mismo lugar y donde se dijo `nosotros hacemos esto, ustedes hacen esta parte´, y el municipio no cumplió con su parte».