Soledad Díaz (Abogada, miembro de la organización de Mujeres del Partido Obrero)
Este 3 de junio, las mujeres de Córdoba y todo el país volverán a ganar las calles en Córdoba y en el país, al grito de «Ni Una Menos, el Estado es responsable.” Desde 2015 las marchas hay roto todas las expectativas porque las políticas desarrolladas durante estos años por el Gobierno provincial y nacional han sido estériles para dar salida al flagelo de la violencia. La creación del Polo Integral de la Mujer desnudo una política cosmética y demagógica en la materia, mientras se producen decenas de despidos en áreas esenciales para contener a mujeres vulnerables, afianzando la precarización, y el vaciamiento en estas áreas.
Del mismo modo la adhesión a la Ley de Violencia de Género Nacional sin contar con el presupuesto adecuado para garantizar las condiciones materiales que den una salida real, no configura más que una excusa para fortalecer el sistema punitivo y el reforzamiento del aparato represivo estatal “en nombre de las mujeres” en un momento de masivas movilizaciones contra el ajuste y la carestía.
La resolución adoptada en los últimos días por el bloque mayoritario de la Comisión de Equidad y Género de la Legislatura de rechazar los proyectos que solicitan la declaración de la emergencia en violencia de género, ratifica una posición de larga data. Desde la creación de esta Comisión en 2015 el oficialismo mantiene cajoneadas decenas de proyectos presentados por numerosas organizaciones de mujeres. El reclamo que miles levantamos en las calles por la declaración de la Emergencia en Violencia de Género, solo obtuvo como respuesta el vaciamiento de áreas centrales en la materia. Pero la denuncia de la responsabilidad estatal no solo radica en los desfinanciados programas de asistencia y prevención sino también en los crecientes índices de desocupación, los tarifazos del gobierno de Schiaretti, que hunden a las familias trabajadoras en la miseria, agravando la descomposición social y con ello la violencia hacia las mujeres.
En el país de #NiUnaMenos mas de 500 mujeres al año mueren por abortos clandestinos, mientras no se garantiza la educación sexual laica en las escuelas, y el sistema de salud devastado resulta incapaz de crear políticas de prevención. En Córdoba con el agravante de que no se respeta el aborto no punible y el Fallo FAL de la Corte Suprema de justicia de la Nación desde el año 2012.
La ley de Trata Nacional hasta el momento no ha desmantelado una sola red de trata, por el contrario proliferan los casos que vinculan a funcionarios, jueces y a las fuerzas policiales con este negocio rentable a costa de la explotación laboral y sexual de cientos de mujeres. El único caso caratulado como trata de personas en Córdoba, el de Yamila Cuello pretende ser archivado por la Justicia Federal y remitido al orden provincial como homicidio.
Ante esta política deliberada de ataque a las condiciones de las mujeres trabajadoras pergeñada por los propios gobiernos, en necesario hacer concreto el #NiUnaMenos. Por eso, una vez más, presentamos ante la Legislatura provincial, la necesidad de que se trate el proyecto de ley por la inmediata declaración de Emergencia en Violencia, que cree un programa de asistencia integral a las víctimas y sus familias, que permita la disposición de los recursos económicos y humanos necesarios para atender la situación. Necesitamos un protocolo para que obligue a actuar al Estado de forma rápida y eficaz en la búsqueda de las personas desaparecidas que crecen en la provincia, como el reciente caso de Ana Rosa Barrera.
Por último toda esta situación que enfrentamos las mujeres se desarrolla ante la parálisis del Consejo de la Mujer Provincial que no representa al conjunto de las mujeres de la provincia en la medida en que su creación y composición es determinada por el gobierno de turno, y en la que abundan trabajadoras en situación precaria, llamase contratos, monotributo o becas. El cuestionamiento a estos organismos salta a la vista en la medida en que la violencia no para de crecer, alcanzando cifras record día a día.
Para que concretar el reclamo de #NiUnaMenos es necesario una verdadera herramienta para la defensa de nuestros intereses, que no sea una institución de propaganda política del Gobierno, con un presupuesto acorde a la necesidades que la cuestión de género tan vulnerada demanda, electa por las mujeres de la provincia, con cargos revocables y que rinda cuenta públicamente de su accionar. Con estos reclamos y con este programa de salida este 3 de junio ganaremos las calles nuevamente.