Fue una obra licitada en 2014, pero que estuvo frenada porque desde Nación se cortó el envío de fondos. Ayer se retomaron las tareas y el municipio tendrá que poner la diferencia que implique la actualización del presupuesto
Seguramente fueron muchos los vecinos del barrio Florida que se habrán entusiasmado al observar ayer maquinas y camiones trabajando entre el barro que se generó, como es costumbre, en algunas de las calles.
Es que a más de dos años después de haberse licitado, en 2014, la pavimentación de las arterias se reinició. Concretamente, en la esquina de Mitre e Independencia, el intendente Natalio Graglia, que recorrió la obra, contó orgullosamente que se vuelve a encarar un trabajo que estuvo frenado por la falta de envíos de fondos del Gobierno nacional, que era quien se había comprometido a financiar la obra, allá por el 2011 cuando el exintendente Guillermo Cavagnero encaró el proyecto, pero que luego se dividió en dos etapas.
“Fue bastante lo que pasó, costó, pero se logró a través de la insistencia y de la buena predisposición de la gente de Vivienda de Nación que nos dieron una mano para que saliera esto adelante a pesar del tiempo que había pasado”, remarcó el intendente.
En varias ocasiones, meses atrás, Graglia había asegurado que la obra se iba a retomar, ya que venía realizando gestiones en Buenos Aires. “En un principio estaba planteado en dos etapas, es decir, eran como dos obras distintas más allá de ser el mismo barrio”, aclaró y comentó: “Esta es una licitación de 2014, que se debía empezar en 2015, y no se hizo porque no llegaron los fondos. Empezamos a tramitar de nuevo, tuvimos que hacer un nuevo expediente de pago que hizo el recorrido hasta que pudimos sacarlo. Pero todo eso nos llevó muchos viajes, muchas gestiones y afortunadamente se logró, por lo que la satisfacción es grande”.
Serán unas 35 cuadras las que se pavimentarán, con cordón cuneta y badenes, por lo que se llegará al ciento por ciento del barrio.
Fondos
En cuanto a los fondos, el presupuesto inicial era de unos 20 millones, pero es sabido que requiere de una actualización ya que ese monto es el que se manejó en 2014.
En ese sentido, Graglia explicó que la diferencia será aportada por el municipio. “Si bien la mayor parte viene del Gobierno nacional, va a haber un importe que lo va a tener que poner la Municipalidad porque al ser una obra de 2014 la diferencia de precio no fue reconocida por Nación, pero buscamos la forma de financiar eso para que se haga igual. El presupuesto inicial era de 20 millones de pesos y hoy están haciendo un recálculo de esos costos, que va a implicar un 30%, más por lo menos. Eso es lo que va a poner el municipio”, insistió.
Cabe reconocer que en noviembre del año pasado el jefe del Ejecutivo le había dicho a este medio que iba a hacer gestiones en el Gobierno de la provincia para conseguir que pusieran esa diferencia, cuestión que, por lo visto, no se concretó.
También contó que “hemos peleado un poco con la empresa constructora, Arrow, pidiendo que se pongan una mano en el corazón ya que se demoró más de lo previsto, para que nos den una mano cuando hagamos la readecuación del monto final”.
“Lo importante es que podamos arrancar y que ya estemos generando las certificaciones para seguir. Esto se divide en cinco etapas, cinco certificaciones.
En un principio el plazo es de 5 meses, pero cuando hablamos de plazos siempre es en la teoría, en la práctica muchas veces no se da porque para que te den otro anticipo tenés que presentar la certificación y para que la presentes pasa un mes, porque hay 15 ó 20 días de análisis de lo que presentás hasta generarse un nuevo certificado de pago”, detalló Graglia.
Para este reinicio de obra el municipio cuenta con el primer aporte de $4,5 millones.