El entrenador de Alumni destacó que la victoria “significa mucho desde lo anímico”. Sobre el plantel, expresó: “Tenemos poca gente, ojalá que lleguen más jugadores”

La victoria de Alumni dejó contento a Hugo Mattea, sin embargo, el propio entrenador afirmó que “no cambia el pensamiento” con respecto al partido anterior y expresó: “Ni antes éramos un desastre ni ahora unos fenómenos”.

El 2-1 contra Las Palmas fue el saldo del primer partido de Mattea como DT en Plaza Ocampo, donde otras tantas veces vino como entrenador del equipo rival, pero también la conoció desde joven, cuando fue futbolista del Fortinero.

El entrenador sabe entonces lo que significa el mítico escenario del fútbol villamariense.

“Hablamos con los jugadores de tratar de hacernos fuertes en la Plaza, tratar de sumar y no como sea; hay que tratar de jugar bien, dentro de lo que se pueda”, indicó.

“Lo importante que esto nos dará tranquilidad para seguir trabajando”, admitió.

En ese sentido, insistió que “el trabajo es en el día a día y por eso no cambio el pensamiento del partido anterior, cuando nos comimos cuatro, porque ni somos fenómenos en la victoria ni tan desastrosos en la derrota”.

“Esta vez, por ejemplo, entraron las que no pudieron entrar en Río Cuarto… El otro día le quedó una a Delsole y la pelota pasó rozando”, amplió.

No obstante, en cuanto a la relevancia de la victoria, el exfutbolista sostuvo: “Tiene mucho significado desde lo anímico porque este es un plantel en formación”.

“Lo nuestro hoy es prueba y error; el otro día me quedé con lo de Depetris y Francucci, estábamos en duda y me incliné por uno; esta vez probamos con otro. Son pruebas que se hacen en amistosos que nos faltaron, entonces estamos haciéndolas en los partidos oficiales. Iremos subsanando errores en el día a día”, añadió.

“Semana normal”

Alumni podría jugar el viernes con Racing de Córdoba, en condición de visitante, según pidieron los dirigentes de la Academia. Sin embargo, Mattea no está dispuesto al adelanto del partido y espera jugar el domingo.

“Nos gustaría tener una semana normal de trabajo. En la semana tuvimos un trabajo con cargas intensas, altas. Pochettino tuvo una molestia y Bardín también tenía cargado el aductor. Igual no vamos a bajar la intensidad”, argumentó.

Al mismo tiempo, explicó: “Nos convenían semanas normales para bajar las cargas viernes y sábado. Además, cada vez que se lesionó uno, cruzo los dedos”.

¿Quién viene?

Con un plantel ajustado, el entrenador no dudó en presionar a la dirigencia para que se concrete el arribo de otros que figuran en la lista de buena fe, entre ellos el volante Juan Aimar.

“Estamos necesitando a dos o tres jugadores más”, dijo Mattea, y agregó: “Ojalá que la dirigencia pueda conseguir a los jugadores porque tenemos muy poca gente”.

Por otra parte, manifestó que “Alumni está donde está y no es casualidad. Tenemos que tratar de ordenarnos desde adentro hacia fuera, en todo sentido”.

“Esto debe ser un trabajo en el día, tratando de ordenar a la institución hasta la salida al campo de juego”, agregó.

Por último, Mattea se mostró feliz por la actuación de Delsole y con ello reflejó que los jóvenes del club tendrán sus chances, siempre y cuando demuestren que pueden estar a la altura de las circunstancias.

“Los chicos ya saben que va a jugar el que esté mejor, más allá de los nombres”, avisó.