La directora y vice del Instituto del Rosario fueron escuchadas ayer por la jueza que analiza el pedido de Matías Malfante, quien fue despedido de la entidad
Karina Gabetta y Jimena Torres, directivas de las Rosarinas, se presentaron ayer en Tribunales en el marco de la causa iniciada por un docente despedido de la institución.
Lo hicieron en primer momento acompañadas por la representante legal de la institución educativa, la exconcejala Georgina Etchegaray y con el asesoramiento jurídico de Juan Cortez, un abogado cordobés del estudio Gentile.
La declaración fue en el marco de la causa iniciada tras el despido “incausado”, según indicaron en la institución, del profesor de Educación Física, Matías Malfante.
En cambio, el docente, junto al gremio de los trabajadores de la educación privada (SADOP), está convencido de que la cesantía se originó por discriminación, dado que ocurrió después de la afiliación sindical.
Por esa razón, con el acompañamiento gremial y el asesoramiento del letrado Juan Maximiliano Machuca, presentaron un amparo en la Justicia. Si bien en un primer momento ese pedido no fue aceptado, en una instancia superior lo habilitaron; por lo que es la jueza de Control, Edith Lezama, quien inició la investigación.
En ese marco, ayer fueron citadas a declarar las directivas de la institución. Al salir, se negaron a hablar con la prensa, pero Machuca, abogado de Malfante, quien estuvo presente en la declaración, dijo que en principio, las autoridades del Instituto “se mantuvieron en sus dichos asegurando que no hay causa” en el despido. “Además, aseguraron que como directivas no tienen potestad para despedir ni reincorporar, sino que son acciones que corresponden a la asesoría letrada”, indicó.
Mañana, será el turno de los testimonios de los referentes sindicales que apoyan al profesor Matías en esta demanda. Presente en el lugar, el docente dijo que lo único que quiere “es volver a trabajar”.