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Siguen luchando contra las adicciones desde las escuelas

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Siguen luchando contra las adicciones desde las escuelas
Cientos de niños y adolescentes del IPEM 322 escucharon a los profesionales de la Fazenda de la Esperanza

Alumnos del IPEM 322 recibieron a integrantes de la Fazenda de la Esperanza, un espacio que comenzará a funcionar en los próximos días y que sumará opciones para el tratamiento de este flagelo

Cientos de niños y adolescentes del IPEM 322 escucharon a los profesionales de la Fazenda de la Esperanza

La Dirección de Adicciones de Villa Nueva lleva adelante permanentes visitas a instituciones educativas con el objetivo de implementar programas y proyectos que le permitan luchar contra las adicciones, ya sea con tratamientos o, sobre todo, desde la prevención.

En ese sentido, la del viernes pasado no fue una jornada más para los alumnos del IPEM 322, quienes no solo recibieron la visita de los profesionales de esa área municipal, sino que también pudieron escuchar el testimonio de dos jóvenes que están en tratamiento.

La charla se dio en el marco de la presentación de las diferentes modalidades de abordajes y de pensar a las adicciones como problemática, teniendo en cuenta las particularidades de cada sujeto que sufre, que demanda y adhiere a distintas formas y/u opciones de tratamiento.

En ese contexto, se acompañó a los jóvenes y adultos de la institución Fazenda de la Esperanza, quienes realizaron una breve presentación del funcionamiento de la misma.

Cabe recordar que tiempo atrás se anunció que la Diócesis de Villa María contará con un nuevo lugar para la recuperación de personas con adicciones y están en plena difusión de su trabajo, que se realizará en el Hogar Agrícola de la zona rural de Morrison desde el próximo sábado.

Uno de los momentos de más emoción para los cientos de alumnos que se dieron cita en el auditorio fue cuando dos jóvenes que permanecen en tratamiento dieron su testimonio de vida y su experiencia. «El proceso de recuperación es natural y sin medicamentos, la única ayuda es el amor a Dios y la oración y es por eso que una de las cosas que se enseñan no es cómo hacer para dejar las drogas, sino amar al prójimo como a sí mismo, también el descubrimiento de ser amado por Dios y la posibilidad de reiniciar sus vidas», destacaron los jóvenes.

“Desde la Dirección de Adicciones acompañamos este y cada uno de los espacios que se brinden en abordajes de esta temática, ya que consideramos que la problemática no representa a ninguna cuestión de género, edades, credo o clases sociales, por lo que el trabajo y el acercamiento a cada una de estas instituciones permite un trabajo articulado para dar respuesta a las distintas demandas que surgen en nuestra población”, plantearon desde el grupo de trabajo que encabeza el doctor Guillermo Gauna.