Un nuevo método que les permite a las personas con diabetes conocer sus niveles de glucosa evitando pincharse en cada medición -con un costo similar al de un paciente que todos los meses debe hacerse varios controles diarios- fue aprobado en Argentina y llegará durante este mes a las farmacias, confirmaron desde el laboratorio en el lanzamiento oficial del dispositivo.
«La persona que tiene esta enfermedad necesita realizar mediciones de sus niveles de glucemia (la frecuencia depende del tipo de diabetes) y con estos registros uno puede evaluar la eficacia del tratamiento. Conocer estos valores es clave porque se trata de una enfermedad silenciosa», indicó a Télam el médico endocrinólogo Adrián Proietti, presente en el encuentro.
Proietti, director del curso de tecnología aplicada al control y tratamiento de la diabetes de la Sociedad Argentina de Diabetes, señaló que «en pacientes con diabetes tipo 1, que son aquellos en los que el páncreas no produce insulina, los médicos pedimos que se realicen mediciones antes y después de comer y también alguna nocturna, es decir que quizás indicamos hasta siete mediciones por día».
Y continuó: «Para la persona que tiene que pincharse cada vez que necesita hacer una medición, esta indicación es difícil de seguir; en este contexto la posibilidad de hacerse controles con esta nueva técnica repercute en la calidad de vida del paciente y por ello este nuevo dispositivo, si bien pueden usarlo todos las personas con diabetes, es especialmente útil para quienes necesitan varios controles diarios».
El nuevo método consiste en un sensor pequeño, de aproximadamente el tamaño de una moneda de dos pesos, que se coloca en el brazo y que, minuto a minuto, mide la glucosa en líquido intersticial mediante un pequeño filamento que se encuentra colocado justo debajo de la piel y se mantiene en el lugar unido a un pequeño parche adhesivo.
El paciente mismo realiza la colocación, que es mínimamente invasiva y se aplica en forma subcutánea. Este sensor dura 14 días, allí debe retirarse y colocarse otro; durante ese lapso no debe retirarse en ningún momento.
Además, el kit viene con un lector, que es un dispositivo similar a un celular pequeño, y cada vez que la persona quiere conocer su nivel de glucemia acerca este lector al sensor que ‘escanea’ automáticamente el dato.
La diabetes es una enfermedad en la que el organismo no produce suficiente insulina o no puede utilizarla como debería, por lo que la glucosa no pasa a las células y circula por la sangre y lentamente va provocando daño en los vasos sanguíneos pequeños y grandes, pudiendo ocasionar a futuro severas complicaciones como insuficiencia renal, ceguera, amputación de miembros inferiores, infarto y accidente cerebrovascular.
«Me pincho el dedo entre cuatro y seis veces al día y hago las correcciones necesarias con alimentos, actividad física o medicación. Pero me genera ansiedad no saber ‘dónde estoy parada’ entre monitoreo y monitoreo», indicó por su parte Adriana Angelina, quien tiene diabetes hace 35 años y preside la Asociación Civil de Diabetes Argentina, y celebró la incorporación de este sistema al que definió como un «cambio de paradigma».
En tanto, Liliana Tieri, directora y fundadora de la Asociación para el Cuidado de la Diabetes en Argentina y cuya hija tiene diabetes, expresó que «el control de la glucosa es muy invasivo. Por eso, nos entusiasma que puedan existir dispositivos como este que ‘humanizan’ más la vida de quienes viven con diabetes».
Fuentes del laboratorio Abbot, que produce y comercializa el producto, informaron que el dispositivo estará disponible para los particulares durante agosto e indicaron que su costo es similar a un tratamiento promedio mensual de tiras reactivas: en la farmacia el precio de cada sensor será $1.120, así como también el del lector, que se compra una única vez.
En referencia a la cobertura por parte de la obras sociales y prepagas, señalaron que «ya hay algunas que lo han incorporado satisfactoriamente» y añadieron que «siguen en diálogo con otras».
A su vez, Argentina cuenta con una ley que garantiza los derechos de las personas con diabetes (la 26.914, modificatoria de la Ley 23.753) que garantiza el 100% de cobertura en el tratamiento y control de la enfermedad.
Según la Federación Internacional de la Diabetes, en el mundo hay unos 382 millones de personas que viven con diabetes y se estima que la cifra aumentará en más de 20% para fines de 2035.
En la Argentina, según la última encuesta nacional de factores de riesgo del Ministerio de Salud, presentada en 2015, la diabetes afecta a uno de cada 10 argentinos (9,8%) mayores de 18 años.