De los doce concejales, la mitad avaló su nombre pero no hizo falta el doble voto del presidente del cuerpo porque la mayoría de los ediles de la oposición no estuvo
Con los votos de seis de los siete concejales del oficialismo, quedaron ayer ratificadas las autoridades que eligió el intendente Martín Gill para el Directorio de la Terminal de Omnibus Sociedad de Economía Mixta.
Como presidente seguirá Julio Fernando Ferro, mientras que en el cargo de vicepresidente ahora estará Miguel Sponer, de forma ad honórem.
Ferro ocupa ese lugar desde hace muchos años. Sponer, colaborador de Gill y con un cargo en el Ejecutivo, es un nombre nuevo en esta sociedad.
Las autoridades tuvieron el visto bueno del bloque oficialista Villa María para la Victoria – Partido Justicialista, a excepción de la edil Verónica Navarro, que votó negativamente la continuidad de Ferro en la Presidencia, pero sí dio aval para los demás miembros de la conducción (ver recuadro con la lista). También aprobó las designaciones la legisladora oficialista de la bancada escindida, Mónica Lazos.
En tanto, el bloque opositor Juntos por Villa María no acompañó el decreto del Ejecutivo, aunque solo contó con la presencia de dos de los cinco ediles (ver aparte).
Fundamentaciones
Fue Carlos De Falco quien fundamentó la opinión positiva a la propuesta de Gill de gran parte de la bancada. Dijo que Ferro “viene desempeñándose en el cargo desde hace muchos años” y que Sponer “está desde 1999 en este proyecto político, siendo uno de los colaboradores más estrechos del intendente”, a la par de mencionar que ejercerá el rol ad honórem.
Además de Ferro y Sponer, se prestó ayer el acuerdo para que Germán Brun y Natalia Clausen sean síndicos titulares, y Andrés Herrera y Lourdes Pajón síndicos suplentes. Salvo Pajón, que es abogada, los demás son contadores.
Agregó que el bloque “no tiene objeciones” para hacer ya que “no se materializaron manifestaciones en sentido contrario” en la asamblea, que “ya tuvo lugar”.
Por su parte, Navarro fue abordada por la prensa al terminar la sesión. “El ingeniero Ferro hace bastante que está en la Terminal y considero que es una etapa superada en el sentido de que ha tenido la posibilidad de hacer, de iniciar ese camino en el que se trabajó desde el municipio con los privados en lo que es el desarrollo de la misma y la potenciación de los comercios de la zona y demás”, argumentó sobre su rechazo.
“Personalmente creo que necesitábamos una renovación en la presidencia para darle un mayor impulso a ese área, que es muy importante dentro de lo que es el proyecto de ciudad, tanto en el presente como en lo que se estima que quiere ser Villa María, con todo lo que tiene que ver desde el desarrollo de turismo, comercial y de prestación de servicios”, recalcó.
Navarro estimó que “hacía falta un cambio en este sentido”.
Respecto a su aval a Sponer, explicó que hasta ahora el odontólogo “no estuvo ahí y todos tienen las posibilidades de desarrollar y de demostrar sus capacidades y potencialidades”. “El intendente lo pensó para ese rol y lo considera capaz, creo que todos necesitamos o nos merecemos la posibilidad”, añadió.
La oposición estuvo en desacuerdo, pero solo votaron dos de los cinco concejales
En la sesión legislativa semanal, desarrollada ayer al mediodía, se produjo una situación singular. Según indicaron los concejales Gisele Machicado (Frente Cívico) y Gustavo Bustamante (Unión Cívica Radical), toda la bancada Juntos por Villa María estuvo en desacuerdo con la designación de Julio Ferro al frente de la Terminal, sin embargo solo ellos dos estuvieron presentes y, por lo tanto en una votación que es uninominal, solo valieron sus votos.
De haber estado todo el bloque, se hubiese dado un empate, ya que el oficialismo no votó de manera unánime por la decisión de Verónica Navarro (ver nota principal). En ese caso hubiese existido el doble voto del presidente del Concejo, José Carignano.
La radical Nora Landart estuvo ausente en la sesión, que sí contó con los legisladores del PRO, Karina Bruno y Omar Coutsiers, quienes en un momento dejaron el recinto por “motivos personales” (según dijo Machicado) y entonces no estuvieron cuando se trató y votó el tema.
Bustamante argumentó que era “bastante difícil” prestar acuerdo a la continuidad de Ferro y en principio se basó en una nota de EL DIARIO de septiembre de 2015 que dio cuenta de irregularidades, deterioro y abandono en la Terminal. Agregó que desde la bancada se solicitaron informes en enero y junio de 2016, sin respuestas por parte del Ejecutivo “como sucede en el 90% de los casos”. En ese marco, advirtió que no interpreta el porqué hay un bingo en la estación y qué tiene que ver con el servicio que debe prestarse. También se preguntó sobre el gimnasio del lugar.