Preocupa la falta de actividad física. Del total de las personas que se sometieron a la espirometría, el 60% tenía obesidad o sobrepeso
En solo cuatro días, y en el marco de una campaña de detección de la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), profesionales del Hospital Pasteur detectaron que 38 personas tenían este diagnóstico, pero no lo sabían.
“Con esto confirmamos que generalmente el paciente no sabe que tiene la enfermedad”, comentó Iris Vigil, médica neumonóloga del nosocomio local.
En total se realizaron 161 espirometrías, de las cuales 39 arrojaron que el paciente tenía EPOC, lo que significa el 22% del total de los analizados.
“De esos 39, solo una tenía un diagnóstico previo, el resto no sabía que tenía la enfermedad”, agregó la profesional.
Otro de los datos que surgió de la campaña -que se realizó en el mismo Pasteur y en la plaza Centenario- es que el 100% de las personas a las que se le diagnosticó la enfermedad eran tabaquistas.
“Todos fumaban o habían fumado alguna vez en su vida”, indicó la doctora Vigil en diálogo con EL DIARIO.
“Otra cosa que nos llamó la atención es que todos tenían disnea, es decir falta de aire. Después de eso viene la tos y tos con catarro. A esto, la gente lo toma como normal, pero no es normal tener catarro”, advirtió la neumonóloga.
También se mostró preocupada por la falta de actividad física que declaraban las personas que se acercaron a la campaña de detección de la EPOC: “Más del 60% del total tenía sobrepeso u obesidad, eso nos llamó mucho la atención”.
La instancia fue simplemente de diagnóstico, por lo que los pacientes deberán consultar ahora a su médico de cabecera para iniciar un tratamiento.
“Es una enfermedad crónica que no se cura, como la diabetes y la hipertensión”, recordó Iris Vigil.
No obstante, aclaró que “existen tratamientos físicos para mejorar la calidad de vida”.
“Después se inician los broncodilatadores, que son dispositivos que ahora vienen en polvo seco, para que pueda aspirarlo de una mejor manera”, señaló.
La EPOC es una enfermedad progresiva y muy discapacitante, que según la Organización Mundial de la Salud (OMS), es causante de la muerte de 2,7 millones de personas por año en todo el mundo y para 2030 prevé que esta dolencia se habrá erigido en la tercera causa más importante de mortalidad a nivel mundial.
En un inicio la persona puede no tener síntomas relevantes, por eso la ausencia de síntomas no es un indicador de no padecer esta enfermedad. Con el paso de los años aparecen sus manifestaciones clínicas más comunes que son: sensación de falta de aire, fatiga o dificultad respiratoria, tos con producción de secreciones bronquiales y a veces silbidos en el pecho.c