La directora de la Maestría en Comunicación Estratégica de la Universidad Nacional de Rosario, Sandra Massoni, compartió conceptos en el evento propuesto por la UNVM
“Ya no puede pensarse a la comunicación como un saber instrumental”, sino como “una disciplina científica reconocida”, expresó la directora de la Maestría en Comunicación Estratégica de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), Sandra Massoni, que participó días atrás en el Precongreso de Comunicación de la Universidad Nacional de Villa María (UNVM).
Massoni, que durante el evento presentó un libro de su autoría, llamó a “ampliar la mirada sobre la tarea del comunicador”.
En el marco de la producción bibliográfica “Avatares del Comunicador”, Massoni sostuvo que la comunicación es “un fenómeno complejo y fluido porque está todo el tiempo modificándose” e implica una mirada que “no se reduce a la interacción entre personas, mucho menos a los mensajes, los códigos, su circulación; sino que se despliega en un registro micro-macro-social”.
Según registraron desde la Secretaría de Comunicación de la UNVM, la especialista en comunicación estratégica indicó que “es imprescindible” modificar las miradas que centran al comunicador como “productor” o como un “crítico” de medios y mensajes.
“Todo esto sigue existiendo en la mirada compleja y fluida de la comunicación, pero se reubica lo que el comunicador puede aportar a organizaciones, empresas y proyectos. Hay una mirada más madura, porque no desconsidera las otras dimensiones que se pueden abordar desde esas miradas más reduccionistas”, enfatizó la especialista.
Para la referente de la UNR, los comunicadores y comunicólogos continúan siendo productores de mensajes, pero “con una mirada estratégica” y se convierten en “una especie de propiciadores de tipo de vínculo social en diferentes ámbitos”.
Lo digital es explosivo
“Recién en el siglo XXI la comunicación tiene una mirada específicamente comunicacional y es reconocida como una disciplina que aporta algo distinto de lo que otras hicieron y tiene que ver con la idea del comunicador como propiciador de tipos de encuentros en la diversidad”, afirmó la directora de la Maestría en Comunicación Estratégica.
“La comunicación digital hizo estallar la idea de comunicación en direcciones lineales y, a partir del dispositivo, hay una demanda respecto de un abordaje de la comunicación que excede la comunicación en línea y pone en valor y hace visible la multidimensionalidad de lo comunicacional”, dijo la invitada por la UNVM.
En ese contexto, el comunicador tiene que “aprender a operar recursos comunicacionales en todas las dimensiones”, ya que cada problema tiene una racionalidad comunicacional que lo hace funcionar con una determinada dirección. “El comunicador –agregó- tiene que ser capaz de diagnosticar cuál es la dimensión que organiza la comunicación, el encuentro, en lo que él está trabajando; y luego saber poner en juego recursos en otras dimensiones para hacer propiciar este encuentro en la diversidad que es la comunicación en el siglo XXI, esta idea de una reconfiguración intersubjetiva que transforma la situación, que cambia”.
Además del reconocimiento del componente estratégico de la comunicación, Massoni propuso un tipo de “investigación enactiva en comunicación” como una manera de incorporar metodologías, técnicas y herramientas que “son especialmente comunicacionales” a las matrices de datos de la investigación. “En esas matrices se incorporan técnicas de otras disciplinas, pero aportando a la investigación comunicacional con el objetivo de propiciar reconfiguraciones micro-macro-sociales diferente al de otras disciplinas”, concluyó.