“No es un cuadrito”, indicaron desde el Gobierno. Ya adecúan procedimientos y características con este fin, que redundará en beneficios para usuarios. Daniela Lucarelli destacó que una próxima gestión ya no podrá volver hacia atrás

Desde la Biblioteca y Medioteca Municipal y Popular Mariano Moreno comenzaron una instancia de capacitación desarrollada por auditores del Instituto Argentino de Normalización y Certificación (IRAM) para avanzar con un enfoque de mejora continua y alcanzar la certificación de Normas de Calidad ISO 9001.

De lograrlo, se convertirá en la primera biblioteca popular en el país en acreditar dichas normas.

¿Para qué el Gobierno busca certificar estas normas en la Medioteca?

“El impacto es doble, interno y externo: afecta al personal involucrado del área y a los públicos de interés. En el caso de la administración, favorece al vecino que se va a presentar como contribuyente, proveedor o como ciudadano común realizando un trámite y en el caso de la biblioteca, al usuario”, precisó ayer la secretaria de Economía y Finanzas de la Municipalidad, Daniela Lucarelli.

Para esto trabajan en “aggiornarse y cumplir esos estándares reconocidos de calidad”. Se les exigen “procedimientos mundialmente reconocidos y que garantizan desde la correcta selección del material bibliográfico por tema o eje temático, hasta la ampliación a los distintos instrumentos de lectura”. “Ya hoy, con la tecnología, no es solamente el material en papel, sino que además se tenga disponible para cada temática toda la bibliografía existente y posibilitando el acceso en papel y en digital”, graficó.

Este proceso también aspira a alcanzar “todas las normas relacionadas a la promoción y hábito de la lectura desde la primera infancia al adulto mayor, la accesibilidad para personas que tienen distinto tipo de discapacidad, en especial la visual, entre otros aspectos”.

La funcionaria también dijo que se les demandará “una conducta de actualización constante de materiales para tenerlo renovado adecuándose a esos estándares de calidad”.

De acuerdo a sus palabras, desde IRAM “se interesaron especialmente en inscribir a la biblioteca porque solo la de la Universidad Tecnológica Nacional ha logrado validar Normas ISO, pero no lo ha hecho ninguna biblioteca popular”.

Por esto, “quieren hacer la primera experiencia de una biblioteca popular que está al alcance de todos”.

Ratificó que ninguna biblioteca popular en la Argentina tiene “certificado ni iniciado un proceso de certificación”.

Ante las preguntas de EL DIARIO, explicó que “cumplir los aspectos de la norma no es lo más dificultoso, sino sostenerlo en el tiempo”.

Dicho proceso se inició este año y la validación podría darse en el transcurso de 2018: “Creemos que así será, porque todo lo que se nos está planteando son requisitos alcanzables, aunque por supuesto que requieren mucho trabajo y adaptaciones de circuitos administrativos, ya que no hay ningún circuito adaptado actualmente a lo que es Normas ISO, hasta lo que creemos que estamos haciendo bien es perfectible a esas normas de calidad”.

La contadora señaló que no ven “grandes obstáculos, pero lo más difícil es mantenerlo en el tiempo”.

Destacó que una vez que se valide, “esos estándares van a ir subiendo de exigencia para una nueva certificación”. En principio, el requisito esencial es alcanzar las ISO 9001 para después aspirar a las 37001, que tienen que ver con instrumentar procesos antisoborno y anticorrupción.

Lucarelli resaltó este marco al comentar que “como es una norma, trasciende a la actual gestión municipal”. Por lo tanto, “quien venga luego, no importa quién sea, tiene que seguir en esa sintonía y solo va a poder mejorar, nunca ir hacia atrás”.

“No es un cuadrito, estamos adhiriendo a una norma internacional y a un organismo que luego nos controla y nos exige. El beneficio queda para todos los ciudadanos”, finalizó.