ATE Nacional convocó hoy a un paro y movilización. Representantes locales viajarán a Córdoba para la concentración. El interventor de Fabricaciones Militares, Luis Riva confirmó el cierre definitivo en Azul
Paro y movilización es la medida que decidió implementar hoy ATE a nivel nacional, en respuesta a los despidos masivos en distintas dependencias del Estado en las últimas semanas.
Fernando Mercado, secretario general de la dependencia local del sindicato, adelantó ayer a EL DIARIO que hoy se trasladarán a la ciudad de Córdoba, saliendo a las 7.30 desde la sede, para participar de la movilización en conjunto con delegaciones provinciales: “Los compañeros de la Fábrica van a estar en estado de asamblea. Hay que recordar que el 90% de las fábricas están de vacaciones. Solamente han quedado compañeros que hacen mantenimiento, entonces para que se difundiera mejor el conflicto nos vamos para Córdoba. Vamos a llevar un par de micros para allá y también van a ir compañeros de Río Tercero. Vamos a movilizarnos en conjunto con el Consejo Provincial y los distintos sectores como Senasa, ANSES y PAMI para hacer visible la situación de todos los trabajadores del Estado hoy en día”.
Además del paro y movilización se hará un “ruidazo” en dependencias donde hubo despidos.
Reunión cancelada
El interventor de Fabricaciones, Luis Riva, convocó a los delegados de ATE a una reunión en Buenos Aires que se iba a realizar ayer. Pero cuando los representantes, entre ellos el mismo Mercado, estaban entrando a la ciudad capital fueron notificados de la cancelación de la reunión: “Se nos comunicó ayer de parte del Consejo Directivo Nacional que teníamos una reunión con el interventor. Veníamos uno por cada fábrica a plantear la situación, principalmente la de Azul”.
“Lo más grave de todo esto es que nos avisan ahora, en este momento, que la reunión no se hace. Es un despropósito. Argumentan que ‘desde arriba’ le han prohibido la reunión. Riva dice que desde el Ministerio de Modernización le han prohibido reunirse con el sindicato y así me parece que no vamos a poder avanzar nunca y no podemos resolver el problema de los trabajadores. La única solución que nos dejan es cortar las rutas, como están haciendo los compañeros de Azul.
Vemos que vienen por el vaciamiento, hoy de Azul, mañana de Beltrán y pasado por Villa María y así con todos. Nosotros estamos a 600 kilómetros de Villa María y estábamos llegando, pero hay compañeros que viajaban más de mil kilómetros. Es una locura”, manifestó ofuscado, al ser comunicado minutos antes del diálogo con este medio de la cancelación de la reunión, al parecer, por orden del ministro de Defensa, el cordobés Oscar Aguad.
Dolor en Azul
Horas después de la reunión frustrada, Riva reconoció que la fábrica de explosivos Fanazul, ubicada a 30 kilómetros de la ciudad de Azul, cerró definitivamente sus puertas.
El funcionario señaló que la decisión se tomó luego de evaluar la necesidad de darle «viabilidad y fortaleza a la empresa», como para sostener el ajuste que, desde hace tiempo, el Gobierno nacional viene negando.
Durante una entrevista que concedió a la radio LU32 de Olavarría, el interventor de la DGFM reconoció que la planta no volverá a abrir sus puertas y sobre la suerte de los 268 trabajadores a los que no se le renovaron el contrato dijo que «eso le corresponde a la sociedad azuleña. Entiendo los problemas y dramas personales y familiares pero nosotros debemos cumplir la responsabilidad como empresa».
Los trabajadores de Azul, en medio de la angustia, seguirán cortando hoy las calles y prometen endurecer la protesta. También pidieron por redes sociales que se viralice la noticia, atendiendo que los medios afines al Gobierno todavía no expusieron el problema. De hecho, anoche fueron muy pocos los que informaron sobre el cierre de la Fábrica, ni siquiera la agencia estatal Télam.
En tanto, a último momento se supo que la producción de Fanazul, que paró el 28 de diciembre, podría ser absorbida por otra plantas del país, como, por ejemplo, la de Villa María, donde todavía se espera la reincorporación de 28 de 30 contratos caídos, ya que solo dos de los despedidos volvieron a trabajar.
“Quieren vaciar Fabricaciones”
Antes de semejante panorama, Mercado anticipó que el cierre de la Fábrica de Azul es “para importar y para que la Sociedad Rural se quede con esas tierras”.
“En Beltrán el puerto necesita quedarse con las tierras, hay negocios inmobiliarios para unos pocos. Con la importación se benefician algunos pocos también”, destacó.
“Nosotros pedimos que nos devuelvan el trabajo, hace dos años que estamos sin fabricar. Esto empezó con Martínez y sigue con Aguad y Riva y el único propósito es que no fabriquemos nosotros. No les interesa que fabriquemos chalecos, ni balas. El tiempo nos va a dar la razón, como cuando decíamos hace dos años que esto iba a cerrar con trabajadores en la calle”, indicó Mercado.