Tras la presentación de su libro,el exintendente Eduardo Accastello dialogó con EL DIARIO y dijo que nunca vio tanto fervor en la sede del Partido Justicialista como el jueves

El exmandatario dijo que hubo miedo entre militantes para asistir a su evento, pero excluyó a Martín Gill de esa conducta

Escribe: Diego Bengoa
DE NUESTRA REDACCION

“Nunca vi en 15 años que debe tener esa casa, tanta gente, tanto fervor, tanta pasión para cantar la marcha peronista”.

La frase encierra la exultación del exintendente Eduardo Accastello en las horas posteriores a la presentación de su libro “Gobiernos locales hacia la común humanidad. La experiencia Villa María”, que marcó su reingreso a la arena política.

Y si bien buscó dejar en claro que no se ve candidato (tal cual lo planteó en una entrevista con EL DIARIO hace una semana), lo cierto es que desde su entorno y tras la presentación del jueves a la noche ya empezaron a viralizar su imagen con la leyenda “Accastello 2019”.

El hombre que gobernó la ciudad durante tres períodos y que encabezó el movimiento que administró la localidad durante cuatro períodos reapareció llenando la sede del Partido Justicialista con la excusa de la difusión de su libro. El acto, masivo desde lo partidario, fue un temblor dentro del peronismo.

-Usted pidió que “los compañeros” no tuvieran miedo de participar de sus reuniones. ¿Hay temor? ¿Por qué?

-Totalmente. Sí sí. Estuve hasta las 4 de la mañana del jueves contestando mensajes de personas que me decían que no podían asistir por estas razones. Yo separo de esto al intendente, por el que tengo un afecto especial y un acompañamiento total desde el momento en que lo propuse. Esto viene de algunas segundas y terceras líneas, funcionarios que nadie eligió por el voto popular, y que en lugar de ocuparse de resolver los problemas cotidianos de la comunidad creen que tienen que utilizar la extorsión para… pero lo salvo a Martín (Gill) de esto. A él lo invité personalmente, me agradeció y me dijo que no iba a estar. Tengo una excelente relación con él a pesar de que la gente o algunos hacen referencia a otras cosas. En todo lo que pueda colaborar con la ciudad estaré, porque tenemos que garantizar la transformación, estar al lado del intendente, acompañarlo. Y veo que también la provincia está haciendo cosas. Tuve profundas diferencias con (Juan) Schiaretti, pero hoy valoro que está haciendo obras estructurales en la provincia y que en Villa María lleva adelante cuatro o cinco obras interesantes.

Pero volviendo a tu pregunta, lo dije porque la gente me lo dijo, algunos me contaron que les dijeron cosas para que no asistieran a la presentación y sin embargo fueron. Son cosas secundarias, lo importante es que una presentación de un libro se transformó en una fiesta, en alegría.

-La semana pasada dijo a este diario que no pensaba en las candidaturas, sin embargo el acto del jueves fue leído por muchos como la antesala de su vuelta. ¿Cómo vivió esa noche?

-Con mucho cariño, con mucho afecto, había mucha mística, la gente empezó a cantar, a corear. Uno iba con la idea del libro pero resultó esto… Había mucha gente grande, de los barrios, jóvenes, que me ayudaron muchísimo, son los anónimos que ayudan a los dirigentes y que la gente no sabe que son quienes realmente transforman las cosas. Para mí fue una sorpresa. Me sorprendí porque nunca vi en los 15 años que debe tener esa casa, tanta gente, tanto fervor, tanta pasión para cantar la marcha peronista, con miembros de todos los sectores, de Unidad Ciudadana, de los gremios, muchos vecinos de los barrios y de tres juventudes, universitarios, barriales. Me siento muy entusiasmado y estimulado.

En este momento tenemos que apoyar y dejar gobernar a quien hoy es intendente. El peronismo, y en este caso un frente amplio que seguro vamos a armar en el departamento, en Córdoba, en Argentina, tiene que pensar la Argentina de nuevo, corregir los errores del pasado, no tiene que dedicarse a criticar al presidente. No estoy de acuerdo con quienes critican a Macri. Si el ganó hay que saber que lo hizo porque seguramente el peronismo no planteó una alternativa, cometimos errores y hay que corregirlos. La democracia ofrece alternativas cada 4 años. Como dirigente voy a contribuir a que a través de este banco de ideas que hemos armado con jóvenes y no tan jóvenes aportemos al país, la provincia y la ciudad, como por ejemplo con el banco de ahorro regional, con una libreta de ahorro infantil forestal, que aportó la gente de Uocra, que es de mucha sustentabilidad ambiental, con el trabajo con los animales. Queremos incluso plantearlo al intendente actual, no es que la vamos a plantear si nosotros somos intendente, gobernador o presidente. La idea es ofrecérsela a quien esté. Y también tenemos que ofrecérsela a quien gobierna con otro pensamiento, tenemos que decirle al presidente que tenemos que sostener la Fábrica Militar. Así como el gobernador de Mendoza le explicó que no podía cargar más impositivamente una tarea que daba mucho trabajo y Macri lo entendió, tendrá que entender que la FM es esencial para la ciudad, que la circunvalación es necesaria. Cometí muchos errores en distintos momentos de la vida política por estas diferencias que se plantean. Yo les decía a los compañeros en la noche del jueves: está bien que existan las diferencias, pero no pueden dividir familias, sociedades. Estamos perdiendo un concepto identitario. Tenemos que saber que puede haber un Boca y River pero que somos todos un mismo país.

-En el evento esbozó que la Capital Federal tenía que estar en el interior del país. ¿Cómo lo vislumbra?

-Alfonsín lo planteó en su momento y también Sarmiento en un libro, después revirtió su propio concepto.

Fue una de las cosas que sugerí. Pienso que hay que priorizar la unidad de los argentinos. Se ha perdido una oportunidad, Macri había planteado que era el eje central, es necesario volver a ese eje.

Desde mi modo de ver hay que reestructurar el país sobre cuatro o cinco ejes muy fuertes, como el de la descentralización y concentración de la institucionalidad y volver a pensar la idea de que la Capital Federal pueda estar en un lugar del interior.

Otro asunto es la reforma impositiva y lo que no puede esperar es la reforma educativa, estamos enseñando a niños con conceptos de la primera Revolución Industrial y estamos en la cuarta, casi quinta Revolución, esto no puede esperar. La demoraron los distintos gobiernos anteriores, hay que hacerla ya, haciendo participar a todos los sectores. Es el eje del cambio que se necesita.

-¿Cree que hay líderes que propicien el encuentro argentino o bien todo lo contrario?

-Considero que hay mucha gente que lo quiere, no sé si hay o no líderes, pero me parece que lo tenemos que propiciar. No hablo del encuentro de los dirigentes que se encuentran para la foto, para viajar a Europa porque le dieron apoyo para una ley, no, hablo de la unidad nacional como concepto y desafío, en que uno tiene que admitir que el otro puede tener parte de la verdad y que nosotros también.

Cuando algunos dirigentes hablan de la unidad del peronismo, eso es secundario, terciario, es la unidad de los argentinos lo que permitirá la discusión de los grandes temas.

-Si bien dijo que no le gusta que se critique a Macri, ¿qué análisis hace de su gestión?

-Tengo diferencias importantes con el Gobierno nacional, pero mis diferencias de concepto sobre lo que es la visión de la argentina lo tengo que plantear a la sociedad, sino cada uno tiene posicionamientos a partir de si gobierna o no gobierna. No es que me decepcionó, pero yo veía que él tenía una gran oportunidad porque planteaba la unidad nacional y sin embargo hoy se ve que por ahí fomenta la división. Tiene una oportunidad, ya, ahora. Todos tenemos la oportunidad de abrazarnos al concepto de unidad y desde ahí marcar las diferencias.

Tengo diferencias en su política económica, social, pero creo que eso no tiene que ser factor de debate público, sino de un encuentro público serio, con agenda de trabajo, donde digamos cómo lo vamos a llevar adelante.

Cuando dispuso un impuesto al vino y luego el gobernador de Mendoza le explicó que eso significaría un deterioro económico y perdidas de fuente de trabajo, Macri lo entendió. A veces cuando uno está en el gobierno no está siempre bien asesorado ni en contacto con toda la realidad. Es función del gobernador, del intendente, de los legisladores,  explicarlo. Decir, mirá la Fábrica Militar está hace 70 años, puede servir para esto, tenemos esta idea, las mujeres están trabajando y tienen ideas. Gabriela Estévez estuvo trabajando en unas ideas, Martín en otras, hay que juntarse y decir. La dirigencia política no se está enfocando en esto, me incluyo.

– ¿Qué reflexión le merece hoy la figura de Cristina?

-El hecho de que se están juntando los actores de Buenos Aires es muy importante. Es muy importante que vuelvan a hablar porque hacía tiempo que no lo hacían. Los mismos dirigentes fueron responsables de la derrota de Capital Federal, de Buenos Aires. Tienen más responsabilidades que nosotros porque nosotros continuamos un proyecto de transformación en Villa María. Me da la sensación que se están juntando, empezando a debatir. Ella es una dirigente que sacó una cantidad de votos importante a nivel nacional. Tengo la sensación de que Cristina no será candidata a presidente, está planteando la posibilidad de sumarse a debatir una idea de país y eso me parece muy inteligente, sería una tontera no sumar a una persona que fue presidenta, que estuvo en distintos cargos, institucionalmente no podemos no sumarla a este debate. Cristina tiene mucho que aportar en ese sentido, como otros dirigentes.

“No atinada”: lo que dijo de la caída del puente

“El puente estaba inhabilitado, solamente se encontraba habilitado para paso peatonal. Estaba en condiciones de no transitabilidad desde hace muchos años”, remarcó Accastello cuando se le preguntó sobre el puente Vélez Sarsfield, que cayó en pleno desarrollo del Festival Internacional de Peñas.

“A mí y a Guillermo (Cavagnero, por entonces intendente de Villa Nueva) nos criticaron mucho cuando lo tuvimos tres meses clausurado. Es un puente que se cayó tres veces, ésta es la cuarta. Se cayó cuando lo trajeron, ya tenía 150 años, es el regalito que nos hizo Sarmiento para reparar que nos vetó que no fuéramos capital y entonces mandó a Vélez Sarsfield a traernos el puente, que iba a ser ubicado donde hoy está el Alberdi. Deiver lo levantó después de 14 años”, repasó.

Recordó que cuando se hizo la prueba de carga del puente colgante Juan Domingo Perón “pusimos cinco camiones de 40 toneladas durante una hora, porque los puentes receptan cargas dinámicas, no estáticas”. “Esto lo dice cualquier profesional, para eso son puentes, para establecer el paso de cargas dinámicas. Después la valoración de ponerle 300, 500 o 600 motos, son valoraciones que hace cada funcionario, que no fue atinada, porque el paso estaba clausurado, solo permitido para el paso peatonal”, manifestó.

“Si el puente se cae dos días antes nos encuentra con motos y personas en sus inmediaciones. No lo planteo como crítica. Uno ha cometido errores, yo he cometido otros errores. Y esto no pasa por el intendente, que no decide estas cuestiones, sino por el funcionario responsable del área. Hay que tener cuidado, qué pasaba si se caía cuando los chicos estaban acomodando…”,  declaró.

Además dijo que ya no cabía el mantenimiento, porque “ya no servía para el tránsito, se lo dejó allí solo por su valor histórico patrimonial importantísimo. Todos sabíamos que era de estricto uso peatonal”.

“Nada” para expresar sobre las causas judiciales

Accastello respondió que no dirá “nada” sobre los procesos judiciales y la decisión del fiscal René Bosio de designar una persona exclusivamente para investigar cuatro causas en particular, dos de ellas vinculadas al exintendente.

Como se conoce, el exmandatario es investigado en esa dependencia por presunto enriquecimiento ilícito, mientras que también se analizan supuestas conciliaciones bancarias irregulares durante su mandato.

En tanto, en un mensaje que envió ayer a militantes, Accastello señaló que como  servidor público, “siempre  tenemos que estar a disposición de la sociedad, de lo que ella desea saber de los actos de gobierno y por supuesto que la Justicia debe investigar todo lo que corresponda facilitando todo lo que requiera”.

Luego, el dirigente dedicó muchas líneas a profundizar la afirmación de que encabezó una “transformación que fue contundente”.

“Algunos quieren mancillar el honor de este equipo y de mi persona, pero les pido tranquilidad. Hicimos la mayor transformación de la historia con el apoyo reiterado de los ciudadanos y con la honestidad que demostraron tantos años de autosustentabilidad de nuestra administración pública. Todo lo que deseen investigar demostrará en igual sentido lo que hicimos. Que a nadie, la energía negativa que genera el odio, el rencor, la impotencia, el miedo o los bajos instintos de los pocos que quieren bajar la vara de la transformación, para que así ellos puedan saltarla, vulnere nuestra inteligencia, paciencia y nuestra vocación de seguir aportando nuestros mejores esfuerzos”, expresó.