Homenaje del radicalismo al exgobernador de la provincia, al cumplirse 58 años de su fallecimiento

Los comité de circuito y departamental de la Unión Cívica Radical hicieron la convocatoria, que contó con la presencia de dirigentes y referentes partidarios, además de concejales de Villa María y Villa Nueva.

También participaron del homenaje los intendentes de esta ciudad y de Bell Ville, quienes estuvieron entre los oradores

Escribe: Sergio Vaudagnotto

DE NUESTRA REDACCION

El panteón que guarda los restos de quien fue gobernador de la Provincia de Córdoba entre 1936 y 1940 no se encuentra en ninguno de los pasillos principales del cementerio La Piedad de esta ciudad. Tampoco tiene mármol en sus paredes ni  ornamentos en mampostería que lo distingan de los demás. El sepulcro, es uno más entre los demás. La tumba, en definitiva, muestra qué clase de gente era quien propuso llevar (y llevó) “agua al norte, caminos al sur y escuelas a todas partes”.

En realidad, la muerte de Amadeo Tomás Sabattini ocurrió el 29 de febrero de 1960; sí, bisiesto. Pero la conmemoración que le brindan sus correligionarios es ininterrumpida; tiene lugar allí, en ese lugar del cementerio, cada año.

“Yo era muy pequeña cuando él murió, pero en el recuerdo familiar quedó el esfuerzo que tuvimos que hacer en medio de aquella multitud, entre gente llegada desde distintos puntos del país, correligionarios y no correligionarios, en una jornada agobiante, para rendirle nuestro tributo”, expresó la exjueza Cecilia Fernández ante quienes se dieron cita en la necrópolis.

Además del intendente local Martín Gill y el de Bell Ville, Carlos Briner, el periodista de EL DIARIO pudo reconocer a la nieta del exgobernador honrado, Virginia Sabattini; al presidente del comité de circuito Villa María de la UCR, Marcelo Barotto -quien ofició de anfitrión-; a su par en el Departamento General San Martín y concejal en Villa Nueva, Ignacio Tagni; al edil villamariense Gustavo Bustamante; a la titular de la Juventud Radical, Agustina Salgado; el director de Museo Amadeo Sabattini, Germán Bicego; y los exconcejales y referentes Carlos Gagliano, Felipe Botta (nieto), Gustavo Lazzuri, Luis Tagni, Alberto Marcotegui, Romeo Benzo, Alberto Yáñez y Adrián Cetra, entre muchos otros afiliados y simpatizantes.

Barotto expresó el “honor” que representaba para él y para todos los radicales reunirse para homenajear a un político que trascendió las fronteras del partido, “que dejó de ser de la UCR para ser referente de todos”.

La causa de los desposeídos

Enseguida cedió la palabra a Botta, quien citó el texto de Gabriel García Márquez No vengo a decir un discurso, para referir que no quería hablar de los logros de quien “para los radicales fue el mejor gobernador que tuvo la provincia, porque sería fácil destacar sus realizaciones y sus virtudes como mandatario”, sino que deseaba evocar “al militante, al que se identificó y luchó por la Reforma Universitaria de la cual este año celebramos los 100 años, al que siempre en la vida y la gestión le dio lugar a los desposeídos de todo derecho”.

Fernández recordó el momento del fallecimiento de Sabattini, a quien definió como “un gobernador excepcional, que privilegió el bienestar de los ciudadanos, sembró de escuelas la provincia, entre las especialmente agrotécnicas, al tiempo que elevó la consideración sobre la docencia”.

“Se rodeó de los más capaces y así en cuatro años consiguió lo que otros no pudieron en mucho más tiempo… Y sumó a las mujeres, aún cuando no podían votar, como militante, algo que la querida Olga Fernández Núñez reflejó muy bien en uno de sus escritos”, añadió la exjueza.

El intendente bellvillense Briner elogió la figura de Sabattini a la luz de la “enseñanza” que recibió en sus charlas con el fallecido exgobernador Eduardo Angeloz: “El me explicó que hay que tener ambición (para alcanzar las metas que uno se propone), pasión (para sostenerse  cuando está allí) y vocación (porque si a la pasión se la consolida por un buen tiempo, es porque se tiene pasión). Y don Amadeo demostró que tenía esa pasión para mantenerse siempre ayudando desde el puesto que tuviera”.

El intendente villamariense Gill -el último orador-, afirmó que “hay personas que no pasan en vano por la vida, que no solamente dejan una huella grande para seguir, sino que, además, se convierten en faro para alumbrar el camino” a la sociedad.

“Cuando el tiempo le da a uno mayor perspectiva, cobra más importancia la obra y el ejemplo de Amadeo Sabattini; un faro que nos alumbra a todos más allá de un espacio político. Soy un agradecido de que la UCR nos haya dado hombres como él, como Yrigoyen, quienes, al igual que Perón, siempre tuvieron presente en primer lugar a los que menos tienen, a los trabajadores”, añadió.

Caía la tarde cuando se sucedieron los apretones de mano de despedida. Villa María había rendido homenaje al gobernador, al médico, a la persona que honró a la ciudad allá donde sea que haya ido.