Federal C – Región Centro – Zona 6 – Ultima fecha
Alem empató 1 a 1 con Alberdi en Río Cuarto y logró la clasificación, con su arquero como gran figura y atajando un penal
Escribe: Federico Gazzoli
Fotos: Víctor Alvez
Con la clásica garra que lo caracteriza, sin brillar desde lo futbolístico pero dando grandes muestras de carácter en los momentos más complicados, Alem de Villa Nueva rescató un empate en su visita a Alberdi de Río Cuarto y consiguió la tan ansiada clasificación a los octavos de final del Torneo Federal C.
El elenco de Cristian Agosto llegó al Imperio del Sur sabiendo que con un punto se metía en la siguiente instancia, pero sin embargo desde el comienzo salió a buscar una victoria que le permitiera asegurar su objetivo sin sufrir sobresaltos.
En ese afán, el Tricolor avisó con tres ocasiones claras de gol antes de los primeros diez minutos de juego, pero falló a la hora de definir y así dejó pasar la gran chance de ponerse rápidamente en ventaja para ganar en tranquilidad. En dos de esas situaciones, Tadeo Albiero definió defectuosamente tras quedar cara a cara con el arquero y en la restante un remate de Brian Verón terminó en saque de esquina luego de una asistencia de Jorge Molinari, tras una buena maniobra personal de Albiero por el sector izquierdo de la cancha.
Luego de esa ráfaga inicial, Alem perdió la pelota y el juego se tornó disputado en la mitad de la cancha, donde los dos equipos jugaron cada pelota dividida “a muerte”, generando que el trámite pasara a ser impreciso y por momentos por demás friccionado.
Fue así como, sobre la media hora de juego, Nicolás Delsole cayó desplomado ante un manotazo de Matías Dutto en el rostro, pero el árbitro dejó seguir el juego, aunque luego debió interrumpirlo por el pedido de todo Alem. Es que, increíblemente, el Sapito había perdido dos piezas dentarias superiores producto del golpe que le aplicó el jugador local. Hubo mucha preocupación, pero el delantero se recuperó inmediatamente e incluso pidió volver a ingresar. El referí permitió su ingreso (con un gran trozo del algodón en la boca), pero el atacante solo resistió algunos minutos más y debió dejar el campo de juego muy dolorido. En su lugar ingresó Maximiliano Le Roux.
Alem quedó desconcertado por la forma en la que perdió a Delsole, pareció que al golpe lo sintió todo el equipo y así quedó demostrado a los 38’, cuando una distracción en el fondo le terminó costando muy cara al León. La defensa villanovense se durmió ante un innecesario pase atrás de Verón y el balón le quedó servido a Dutto, quien desde la medialuna metió un derechazo contra el palo izquierdo de Fabián Omar Montiel para decretar el 1 a 0 a favor de Alberdi.
Un mazazo para las intenciones de Alem, que a esa altura de la tarde ya comenzaba a depender de lo que sucedía en Almafuerte para saber si podía meterse en los octavos de final.
Sin embargo, el León reaccionó de inmediato y fue rápidamente a buscar el empate, aunque volvió a sufrir la imprecisión de Albiero, quien tuvo la pelota servida en el punto penal para conseguir la igualdad en el tanteador, luego de un contragolpe encabezado por Molinari, pero cuando quiso acomodar el esférico se le fue largo y terminó pasando a escasos centímetros del poste derecho.
Así se fue la primera parte. Sería clave para Alem enfriar la cabeza y calentar el corazón en el vestuario, para esgrimir un cambio en la segunda mitad y salir a dar vuelta una historia que se le comenzaba a complicar con la derrota parcial, más allá de que el empate en Almafuerte lo seguía manteniendo como clasificado.
Rugió el León
En el comienzo del complemento se vio a un Alem decidido a ir en busca del empate y los caminos se le allanaron rápidamente. El reloj marcaba 5’ cuando Le Roux impulsó un córner desde la derecha, Berterame punteó el balón cerca del primer palo y el defensor Rodríguez lo detuvo con su mano izquierda ante la atenta mirada del referí, quien no dudó en cobrar penal para la visita. Jorge Molinari puso el 1 a 1 rematando rasante de derecha contra el palo izquierdo de un Cometo que voló hacia el otro costado.
Al León le volvió el alma al cuerpo, pero quizás se relajó demasiado ante el empate y se retrasó notablemente en campo de juego, para permitirle a Alberdi salir a buscar estar nuevamente en ventaja.
En ese momento de la tarde comenzó a surgir más que nunca la figura de Montiel, quien, para iniciar su serie de atajadas importantes, a los 19’ contuvo de gran manera un remate de Diego Azcurra.
Un par de minutos después, tras un centro que llovió desde la derecha, Azcurra remató de bolea y en el área chica Artico salvó milagrosamente con gran esfuerzo para mandar la pelota al córner.
Alem no encontraba los caminos para salir del asedio local y promediando el complemento volvió a sufrir más de la cuenta ante un rival que llegó a esta última fecha sin chances de clasificar. Montiel se volvió a lucir para tapar con el pecho un zurdazo de Dutto, pero en el rebote Artico se llevó puesto al delantero riocuartense y Mariano Peñaflor cobró el segundo penal de la tarde, esta vez para el local. Desde los doce pasos fue a rematar el propio Dutto, que definió suave al medio para que Montiel contuviera el disparo tras taparlo con sus pies.
Una nueva señal que el destino, y el instinto de su arquero, le daban a Alem la posibilidad de acariciar la clasificación más allá del sufrimiento que tuvo que atravesar.
Luego los minutos corrieron y el León fue ganando en tranquilidad, ordenándose en los metros finales de la cancha y evitando complicarse en la zona defensiva, ante un Alberdi que nunca más volvió a inquietarlo.
Sobre los 41’ llegó a Río Cuarto la noticia del empate entre Sportivo Belgrano y Toro, resultado con el que Alem confirmó su clasificación, los jugadores se hicieron eco de ello y afrontaron los minutos finales con absoluta tranquilidad, hasta el árbitro pitó el final y el festejo fue total.
Con sufrimiento, sangre, sudor y lágrimas, el Tricolor consiguió el empate que fue a buscar a territorio riocuartense para meterse entre los 16 mejores del Federal C. Sufrió más de la cuenta, pero encontró en Montiel la respuesta y el envión anímico que necesitó para sobrevivir y salir airoso del Imperio del Sur. El primer objetivo estaba cumplido para Alem y el gran festejo de toda la delegación villanovense así lo evidenció.