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“Seguimos trabajando juntas para conquistar los derechos que nos faltan”

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“Seguimos trabajando juntas para  conquistar los derechos que nos faltan”
Gabriela Juárez habló con EL DIARIO destacando que en Villa María hay 800 trabajadoras del sector blanqueadas

UPACP – Gabriela Juárez, referente gremial de las empleadas domésticas

Celebraron el martes último el Día de la Trabajadora de Casas Particulares. La titular del gremio en Villa María analizó la situación del sector

En esta ciudad son unas 800 trabajadoras domésticas que están en blanco, con derecho a vacaciones, aguinaldo y acceso a una obra social y al aporte jubilatorio, como cualquier otro empleado.

“El 3 de abril de 2013 se aprobó la ley que protege a nuestras compañeras y por eso cada 3 de abril celebramos el Día de las Trabajadoras de Casas Particulares”, dijo Gabriela Juárez, referente en Villa María de la Unión de Personal Auxiliar de Casas Particulares (UPACP).

El largo recorrido que iniciaron en esta ciudad comenzó tras la aprobación de la ley, de la mano del gremio que las representa a nivel provincial, el Sinpecaf. “Después, decidimos incorporarnos a este gremio nacional, porque tiene una obra social propia y nos permite dar más beneficios a las trabajadoras”, puntualizó.

“Desde 2013 a 2017 fuimos afiliando compañeras y llegamos a 800. Ahora, ya se pasaron a éste nuevo gremio unas 150 y siguen viniendo todos los días, porque tenemos cobertura en dos clínicas, una red de farmacias, un centro odontológico y uno de diagnóstico por imagen. Además, en cualquier lugar del país que estés tiene asistencia, porque es nacional la obra social y el gremio”, señaló.

“Por otra parte, como somos de la CGT tenemos descuentos en distintos comercios”, agregó.

Al trabajo cotidiano de manejar la obra social y sumar afiliaciones se agrega el otro, el que conlleva también un cambio cultural para conquistar efectivamente los derechos que aún les faltan a las empleadas domésticas. “La ley está y logramos muchas cosas, pero nos faltan muchas otras”, planteó Juárez.

Una de las dificultades se presenta justo en su día. “Así como hay gente que lo reconoce y le da el día de descanso a su empleada o lo paga doble, hay otras que se niegan. Lo que más nos duele es cuando esa negativa viene de otros trabajadores, empleados igual que nosotros, como, por ejemplo, algunas docentes. Les digo que no dar el 3 de abril es como si la sociedad les quitara el 11 de septiembre, pero no todos lo entienden”, señaló.

Ayer, en el predio del SMATA pudieron celebrar su día con música y mateada. “Espero que el año próximo ya estén todos los empleadores acostumbrados a que es nuestro día y no tengamos que renegar para acceder a ese derecho”, concluyó Juárez.