Con la presencia de Diego Hak, secretario de Seguridad de la Provincia, y del intendente Martín Gill se realizó ayer dentro de los cuatro bulevares el megaoperativo de control de tránsito

Los datos de 2018 son contundentes: siete muertos por siniestros viales en los primeros tres meses del año. Con esa estadística alarmante, Villa María inició con un “operativo de saturación”, como lo definió el intendente Martín Gill, la política de control de tránsito.

Fue ayer por la mañana, dentro de los cuatro bulevares, donde se realizaron los controles que contaron con el apoyo de policías provinciales y nacionales.

“Esto no es para salir a la caza de la gente”, dijo Gill. “Lo comunicamos previamente y sólo con saberlo mucha gente regularizó su situación, ya sea con el ITV, las compañías de seguros o con la licencia”, agregó.

“Precisamente, uno de los efectos de estos operativos de saturación es lograr que la gente se ponga en regla”, destacó.

“Estamos haciendo esto para cuidar la vida de la gente. No hay una sola disposición que tenga que ver con lo recaudatorio”, afirmó.

Por otra parte, aseguró que los controles con agentes municipales y de la Policía de la Provincia van a tener que continuar en el tiempo para lograr un cambio de conducta entre los conductores.

Mejoras en las calles

También aseguró que la Municipalidad trabajará para mejorar las condiciones de seguridad vial modificando la señalética, implementando estímulos para los que cumplen, sanciones complementarias a la multa, que serán con trabajos comunitarios, y “la puesta en marcha de una escuela de conductores, por la que deberán pasar todos aquellos a los que se les retire temporalmente su licencia”.

Hizo algunos anuncios sobre el tema: pintarán correctamente las calles que no están en condiciones en coordinación con Federación Mercantil, concesionaria del estacionamiento medido, e instalarán señales dinámicas con luces led en los bulevares España y Vélez Sarsfield, entre otras medidas.

Por otra parte, dijo que plantean “una reforma integral del sistema de estacionamiento medido”. “Será en todos los aspectos, desde lo tecnológico, con el desarrollo de aplicaciones como la de Córdoba capital, hasta la zonificación y aspectos administrativos”.

Aseguró que la seguridad vial no puede hacerla “sólo el Estado”, por lo que se están reuniendo con entidades para sumar iniciativas. “Hoy -por ayer- estuvimos en AERCA, quienes planifican un programa de responsabilidad social empresaria”, señaló.

Al ser consultado sobre la educación vial, Gill precisó que “más que educar”, en el sentido de dar a conocer las normas de tránsito, “hay que concientizar”.

“Si paramos en una esquina a 10 personas y les preguntamos si se puede pasar un semáforo en rojo, si se puede circular sin cinturón de seguridad o si se puede ir a 100 kilómetros por hora en un bulevar, las 10 personas te van a dar la respuesta correcta. Por eso, estamos convencidos de que las normas de tránsito se conocen, pero hay que concientizar”, afirmó. Para ello, van a sumar a familiares de víctimas fatales o personas que sufrieron choques que les dejaron secuelas para participar de esas campañas de señalización.

Por su parte, el secretario de Seguridad de la Provincia, Diego Hak, dijo que participan activamente con la Policía en las tareas preventivas “con una visión integral” y en el marco del nuevo paradigma que fomenta la prevención. “Todo eso, sin salir de la centralidad de funciones de cada fuerza”, aclaró.

Advertencia: pedirán que la Justicia investigue a los que difunden los lugares de control por las redes sociales

Diego Hak indicó que le pidió de manera contundente al jefe de la Departamental, comisario Walter Roldán, para que hable con la Fiscalía que corresponda a los fines de “profundizar el análisis y la investigación” contra las personas que difundan en las redes sociales los puntos de control con el fin de evitarlos.

Un ejemplo que dio fue el de las picadas que se realizaban en el Parque Sarmiento de Córdoba capital, donde la persona que alentaba la participación por Facebook está siendo investigada.

“Se puede tipificar dentro del Código Penal o bien dentro del Código de Convivencia”, expresó.

Incluso, habló también de que se investigaría a los creadores de la aplicación destinada a ir señalando los lugares de control. “Ya estamos trabajando con un ciberpatrullaje para detectar este tipo de modus operandi”, concluyó.