Entrevista al intendente Martín Gill – En su oficina con EL DIARIO, habló del impacto del dólar en la obra pública local, los servicios más cuestionados, su futuro político y sobre sus viajes al exterior

Señaló su preocupación por la macroeconomía y respondió sobre diversos temas

Escribe: Diego Bengoa
Fotos: Osvaldo Carballo
DE NUESTRA REDACCION

El intendente Martín Gill dijo que es preocupante la situación económica nacional, subrayó que gobierna la ciudad en un contexto totalmente diferente al de los períodos anteriores, señaló que no hay riesgo en el desarrollo de las obras públicas locales por la escalada del dólar y ratificó la idea de construir un estadio deportivo.

Además, quitó trascendencia a su futuro político después de 2019, evitó polemizar con su antecesor en el cargo y negó demoras en el desarrollo de los desagües pluviales.

Sus definiciones se dieron ayer en una entrevista con EL DIARIO, que se extendió dos horas y que se concretó en su despacho del Palacio municipal.

– ¿Su idea es continuar gobernando la localidad cuando finalice este mandato?

– Formo parte de un espacio político, tenemos una responsabilidad y muchos proyectos iniciados y a iniciar que nos gustaría poder culminar. No pongo la centralidad en la persona, sino en los equipos. Como equipo de gestión y como espacio tenemos la legítima aspiración de poder continuar llevando adelante el proyecto, con capacidad crítica.

– ¿En ese ámbito incluye a Eduardo Accastello?

– Forma parte del espacio del justicialismo, nadie lo reniega ni lo duda. Y existen además otros compañeros que tienen legítima aspiración.

– La lectura de muchos es que ambos quieren ser candidatos.

– Somos parte del mismo proyecto aunque tenemos diferencia de criterios y visiones, que si uno tiene una visión de pluralidad son elementos que enriquecen. No me parece que sea tiempo de plantear nombres o candidaturas recién pasados los dos años de gestión. Ojalá haya cientos de nombres porque eso mejora la calidad del equipo y hay mucha gente que tiene posibilidades de ocupar importantísimos puestos de conducción.

– En este contexto, ¿habría internas?

– No se ha analizado. En los últimos 25 años en el justicialismo se han dado diálogos y debates internos para llegar a los acuerdos necesarios.

– Se habla de que usted puede ser el próximo candidato a vicegobernador.

– No trabajo para cargos, no lo hice nunca, son responsabilidades que tocan. A veces se construyen folclores y otras se impulsan folclores que se quieren construir. Tengo una responsabilidad y la ejerzo plenamente y no realizo una sola acción especulando con otros espacios.

– ¿No pensó en su rol después de 2019?

– Bajo ningún punto de vista. Estoy absolutamente abocado a la gestión municipal y todo mi sueño, expectativa y propuestas están en la mejora de este proyecto en adelante y el de la comunidad en su conjunto, y preocupado porque nos tocó un contexto muy difícil. Veníamos de un ciclo de desarrollo económico, de no recesión y otras buenas variables en los últimos doce años, y con la misma sintonía política. De pronto iniciamos una gestión en un escenario completamente diverso, desde lo político y desde lo económico: inflación, estanflación, dificultades de desarrollo. Hemos tratado de tener la claridad de conducción para no ajustar y que se encaminaran proyectos estratégicos y trascendentales para la ciudad.

– ¿La situación macroeconómica y la escalada del dólar impacta en la obra pública local?

– Se encuentran garantizadas en su ejecución y financiamiento las obras más grandes que se están haciendo: los tres frentes en el Centro Cívico, el España, puente, desagües y Parque Pereira y Domínguez.

La idea es poder licitar rápidamente las que lanzaremos los próximos días para que el impacto inflacionario no nos desactualice los montos.

En el funcionamiento diario siempre estas situaciones traen mucha incertidumbre. Preocupa. Hay mucha fragilidad en la economía argentina, el sistema de endeudamiento para la cobertura fundamentalmente de intereses del sistema financiero es un recurso muy peligroso para la economía, a diferencia del financiamiento de la provincia que fue para cubrir obras públicas puntuales. La del puente, bulevar y desagües surgieron de financiamiento internacional, que no fue para pagar intereses de la deuda de otra deuda.

El país arrastraba una situación deficitaria crónica a fines de 2015, marcado por un tipo de cambio retrasado, la imposibilidad de inversiones extranjeras por el cierre de la economía, por la inversión pública en lo social y en obras y por el subsidio del cuadro tarifario de los servicios públicos. Hoy se salió del subsidio de una manera agresiva, se retrajo la obra pública, la inversión social si no se retrajo se congeló y el déficit es mayor en términos porcentuales que el que se tenía. Y el origen de ese déficit está en el pago de intereses de la deuda financiera internacional para ser parte de esa bicicleta financiera que históricamente hemos tenido. Ojalá podamos ayudar con mucha responsabilidad a que el equipo económico nacional tome las medidas que considera se deban tomar y tratar de no ser caranchos. Los que pagan los platos rotos en estas crisis son los sectores que menos tienen.

– ¿En qué cree que incide en este cuadro actual lo que llaman “la herencia recibida”?

– Las falencias que se están teniendo tienen que ver con situaciones generadas en escenarios actuales, con el grado de endeudamiento y el impacto de medidas internacionales. Una economía abierta al mundo en las condiciones en que se estableció esa apertura da mucha vulnerabilidad ante las medidas del ámbito internacional. Las principales potencias del mundo están cerrando su economía y generando medidas proteccionistas: Estados Unidos, Inglaterra. La mayor apertura la está teniendo China, está cambiando el escenario completamente.

Después de dos años y medio, el Gobierno no sólo está llamado a hacer diagnóstico de la historia que puede juzgar como recibida sino que habiendo recibido el crédito de la sociedad debe dar respuestas, asumiendo de manera activa la agenda que tiene.

– ¿Qué opinión le merece la postura de Schiaretti sobre las tarifas? Dijo que el peronismo no cogobierna la Argentina.

– El gobernador viene llevando adelante una visión centrada en que el responsable de las medidas económicas es el Estado nacional en lo macroeconómico.

Hoy se plantea la necesidad de reducir los impuestos. Villa María debe haber sido la única localidad del país que dos años atrás redujo las tasas. No vemos esfuerzos similares por parte del Estado nacional, que tiene una política de incremento salvaje fundamentalmente en alícuotas. No puede pagar el metro cúbico de gas más caro un vecino de barrio La Calera de Villa María que uno de Puerto Madero en la Capital Federal. Antes había un subsidio troncal para todos; bueno, si se sale de eso debe contemplar proporcionalidad y un sistema federal. Además, el gas en la Patagonia es un recurso central, en Bariloche es recurso económico, en las sierras de Córdoba impacta en lo turístico, no es un bien suntuoso.Con este cuadro tarifario se generaron inequidades.

– Hubo vecinos, sobre todo comerciantes, que se quejaron por cómo los afecta la obra de desagües, a la que juzgan lenta.

– No es lento, no lo es. Por supuesto que genera inconvenientes y es imposible que no suceda. Muchos no saben que va precedida de otra obra, la de la nueva red de desagües cloacales, porque la de desagüe pluvial ocupa físicamente el lugar de la red cloacal.

La parte ejecutada en las primeras cuadras de Mitre, que se inundaban recurrentemente, hoy muestran que el sistema funciona perfectamente.

Hemos tratado de dialogar con vecinos, planteando medidas de ordenamiento vial, escuchando a la gente, que seguramente tiene razón. En algunos casos intervenimos económicamente. En la San Luis hubo que desafectar un conjunto de redes de gas y otros servicios que provocaron una demora mucho mayor de lo previsto. Hubo intervención concreta a algunos comerciantes para compensar.

Creo que las situaciones de mayor complejidad están siendo superadas. En el Sarmiento estamos a dos cuadras de estar terminando la obra.

-¿Tomó alguna determinación respecto al otorgamiento de licencias de conducir, al estar próximo el final de la concesión de Vial Parking?

-No, vamos a evaluar el proyecto y analizaremos en base a las posibilidades de prórroga y el servicio. Se avanzó mucho en los últimos tiempos, fundamentalmente cuando decidimos homogeneizar con la Agencia nacional.

-¿Y respecto al estacionamiento medido? Hay mucha polémica por la nueva modalidad de cobro.

-El contrato de regulación no establece el nivel de fraccionamiento. La tarifaria establece el valor hora, antes la metodología era un cartón, después se fraccionó, cambiaron los sistemas.

Creemos que lo que hace falta es un sistema que contribuya a su objetivo de movilidad en las dársenas, para que impacte en algún sentido en la mejora vial. Estamos evaluando un conjunto de alternativas para avanzar con mucho mayor profundidad en el impacto del sistema.

-¿Se lo puede llegar a intervenir?

-No sé si esa es la figura. Hay que determinar el qué, para luego definir el cómo, analizado con todos los sectores.

No hay compromisos con nadie. Nos interesa que el sistema funcione, ha sido creado para generar  una movilidad que hoy en la ecuación precio – servicio no garantiza.

-¿Cómo marcha el proyecto que comprende al Salón de los Deportes?

-Hoy es un inmueble abandonado y derruido que deprime el sector, por lo que un proyecto de desarrollo dinamizaría y potenciaría esa zona.  Creemos en un sector comercial, pensando en recuperar el espíritu original de un mercado, y comprendiendo algún emprendimiento inmobiliario en un espacio que no afecte la estructura. A esos fondos se los destinará a crear un nuevo salón.

-¿Se venderá el inmueble?

-Estamos analizando. Si se entrega seguramente se recibirá otra propiedad. El punto de partida es tasarlo para que todo sea transparente.

Los viajes

Cuando se le preguntó cuál es el beneficio que tiene la ciudad con los viajes al exterior que realizó en los últimos tiempos, Gill indicó que “en todos los casos ha respondido a capacitación, a presentación de proyectos y la mayoría fue por el rol de Villa María como Ciudad de aprendizaje”. “No implicó erogación de fondos para el municipio y he tratado de hacerlo en los menores tiempos posibles”, aclaró.

Sostuvo que “sirvió para el posicionamiento de la localidad en lo internacional, además se aprenden muchas cosas para aplicar acá y se generan vinculaciones”.  “Hemos sido sede de un encuentro internacional de 40 ciudades, la Unesco nos tiene como referencia y nos apoya en programas que estamos presentando para su financiamiento por organismos internacionales”, añadió.

Agregó que se creó un área de cooperación internacional que busca potenciar el comercio exterior y el intercambio cultural y educativo.

Consideró que “los gobiernos locales vienen teniendo roles protagónicos en esto”.

Y dijo que el último convenio firmado fue en Vicuña, Chile.

Reiteró que el bosque nativo está “protegido”

Gill reiteró que no se pueden tocar las especies nativas del Montecito. Cuando se le consultó si el municipio ha pensado expropiar esas tierras, dijo que no. “Hemos dictado una ordenanza para la protección del recurso nativo existente en la ciudad. Nadie puede tomar medidas extractivas sobre un árbol nativo aun cuando esté en su propiedad. Cualquier proyecto que aspire a un desarrollo en el lugar deberá contemplar la preservación, por lo que la propiedad está limitada”, recordó.

En cuanto a la pregunta sobre la advertencia de Médicos de la Red de Ambiente que pidieron detener la puesta en marcha del programa previsto para Villa María y otras seis localidades para el control de mosquitos, ya que no está comprobada su eficiencia y utiliza un producto que afecta el crecimiento de niños, Gill leyó una carta del Ministerio de Ciencia que dio cuenta que el producto en cuestión no se encuentra disponible en el país y no será usado.