Juicios abreviados – Condenas de cumplimiento efectivo y de ejecución condicional

Se trata de Rolando Sánchez y Franco Verón, quienes fueron juzgados por delitos contra la propiedad y violencia de género, respectivamente. El primero tendrá que cumplir casi toda la pena, mientras que el segundo pudo recuperar la libertad

Un vecino de La Playosa y un camionero villamariense fueron condenados ayer en la Cámara del Crimen local, en sendos juicios abreviados que terminaron con la misma pena: tres años de prisión.

La diferencia entre uno y otro procesos fue que la sanción impuesta al primero fue de cumplimiento efectivo, mientras que el transportista recibió una condena de ejecución condicional (es decir, en suspenso) y recuperó la libertad ni bien concluyó el debate.

Los convictos en cuestión son Rolando Germán Sánchez (28) y Franco David Verón (29), quienes comparecieron en calidad de detenidos en dos procesos orales y públicos presididos por los jueces René Gandarillas y Eve Flores de Aiuto, respectivamente.

En la primera audiencia, Sánchez fue hallado culpable de “robo calificado por uso de arma de fuego cuya operatividad no se pudo acreditar”, “daño reiterado” (dos hechos), “robo simple”, “resistencia a la autoridad” y “desobediencia a la autoridad”.

Además de la pena de tres años efectivos, fue declarado reincidente ya que registra una condena anterior, también por delitos contra la propiedad.

El joven playosense se encuentra entre rejas desde hace un año, pero el más graves de los ilícitos cometidos se produjo en julio de 2016, cuando junto a otro delincuente (que no fue individualizado) ingreso armado a una vivienda de avenida Universidad y bajo amenazas a los dueños de casa se apoderó 15 mil pesos en efectivo, una notebook y tres teléfonos celulares.

Los otros hechos se produjeron entre ese audaz atraco y el día en que Sánchez fue arrestado: primero rompió la ventanilla de un automóvil con fines de robo, posteriormente violentó la puerta de otro rodado y sustrajo el estéreo y un matafuegos, mientras que en un boliche bailable de Villa Nueva mantuvo un altercado con un efectivo policial, incidente que terminó a los golpes y con su detención.

Además del juez Gandarillas, intervinieron en las deliberaciones el fiscal Francisco Márquez y la defensora oficial Silvina Muñoz, quienes previamente habían acordado solicitar la misma pena.

Como Sánchez fue declarado reincidente, no tendrá acceso al beneficio de la “libertad condicional”, instituto legal que permite la excarcelación cuando se cumplen las dos terceras partes de la sanción impuesta.

En cambio, con buena conducta y una pericia psicológica favorable, el vecino de La Playosa podrá solicitar la “libertad asistida”, que posibilita salir de prisión seis meses antes del cumplimiento total de la pena.

En ese caso, Sánchez saldría en noviembre de 2019

Condena y libertad

En el segundo juicio de la jornada, Franco Verón admitió haber amenazado y agredido a su expareja y recibió una pena en suspenso que le permitió recuperar la libertad luego de poco más de ocho meses.

En efecto, el joven camionero, quien al momento de ser detenido trabajaba como chofer de la Cooperativa El Sol, fue arrestado en los primeros días de septiembre pasado, luego de protagonizar un hecho de violencia de género en perjuicio de quien había sido su concubina, Marisol Alejandra Aguirre.

El 30 de agosto, alrededor de las 21, Verón llegó a la vivienda ubicada en Aconcagua 1378, donde Aguirre estaba con sus tres hijos, y por motivos que no trascendieron, mantuvieron una fuerte discusión. En esas circunstancias, el irascible transportista insultó groseramente a su expareja, la amenazó de muerte y le dio varios golpes de puño en el rostro y otras partes del cuerpo, además de tomarla violentamente de los cabellos y arrojarla al suelo.

Producto de la agresión física, la joven resultó con escoriaciones y hematomas que le demandaron 15 días de curación.

Curiosamente, un par de días después del hecho Verón se presentó en sede policial, donde confesó haber golpeado a su exconcubina, por lo que quedó detenido por disposición judicial, imputados por los delitos de “amenazas” y “lesiones leves”.

Además de la jueza Flores, participaron de la audiencia de la víspera el fiscal Correccional, Horacio Vázquez, y los abogados Daniel Volpe y Paola Cariddi (oriunda de Córdoba capital, pero radicada en Villa María desde hace algunos años), quienes intervinieron como codefensores.

Por la entidad de los delitos cometidos y la actitud adoptada tanto al entregarse a la Policía como al declararse culpable, a lo que se suma que carecía de antecedentes, Verón recibió una pena de ejecución condicional y se ordenó su libertad, aunque la magistrada le impuso también una serie de reglas de conducta (no podrá mantener ningún tipo de contacto o acercamiento con la víctima) que deberá cumplir a rajatabla si no quiere volver a la cárcel.