LIGA VILLAMARIENSE – Apertura – 7ma. fecha – Zona B
Rivadavia y Unión Central igualaron 1 a 1 en Arroyo Cabral y para ambos el balance fue negativo. El Verde se alejó del puntero, Alumni, y el Aurinegro sigue ubicado en la última posición
Escribe: Federico Gazzoli
Fotos: Osvaldo Carballo
En un duelo en el que cada uno de los adversarios necesitaba, por distintos objetivos, hacerse con los tres puntos, Rivadavia de Arroyo Cabral y Unión Central terminaron empatando 1 a 1, con lo que ninguno de los dos cumplió la misión que tenía asignada en la tarde en la que al fin volvió a tener acción el fútbol de la Liga Villamariense.
Es que el Verde debía alzarse con el triunfo para no perderle pisada al puntero de la Zona B, Alumni (que encima ganó y aumentó su ventaja), y el Aurinegro imploraba por un buen resultado para alejarse del fondo de las posiciones, pero el empate no lo movió de esa ubicación y ahora comparte el último escalón con Española.
Comenzó mejor la tarde el elenco de calle Rucci, tratando de estar bien ordenado en el fondo e intentando lastimar mediante algún contragolpe. Fue así como, a los 9’, Jonathan Moyano habilitó a Maximiliano Bustos con un buen cambio de frente y el delantero, entrando al área por el centro e intentando eludir al arquero con una gambeta larga, fue derribado por Marcelo Berardo (lo taló abajo con un manotazo), por lo que el árbitro Roberto Cejas pitó penal para el dueño de casa. Todo Unión pidió expulsión para el portero, pero el referí hizo caso omiso.
Rodrigo Solís fue desde los doce pasos para rematar cruzado y rasante con su botín derecho, decretando el 1 a 0 y la sorpresa en la casa del último campeón.
Los dirigidos por Marcelo Santoni, a pesar de que sintieron el golpe por el gol sufrido, inmediatamente tomaron la decisión de tratar de revertir el mal comienzo, pero fueron poco gravitantes en materia ofensiva y, sumado a que se toparon con una defensa que rechazaba como podía todo lo que pasaba cerca de sus narices, poco hicieron para llegar al empate.
Unión aprovechó la desesperación de Rivadavia y volvió a inquietar en un contragolpe (20’); Bustos se escapó por la izquierda, hizo la diagonal hacia el medio y en la medialuna remató a ras del piso una pelota que encontró las seguras manos de Berardo.
A Rivadvia le costaba mucho poder inquietar sobre el arco de Dante Alaniz, pero a los 34’ Gayoso frotó la lámpara e hizo una gran maniobra que puso al Verde a tiro del empate. El Rayo ganó por la izquierda, pisó el área y cuando enganchó hacia el medio fue derribado por la marca de Juan Medel, razón por la que el juez cobró el segundo penal de la tarde, expulsando al defensor visitante por recibir la segunda amarilla (la primera, minutos antes por protestar).
El dueño de casa tenía la inmejorable chance de llegar a la igualdad, pero Gayoso esta vez no acertó y la dejó pasar; el delantero remató cruzado y a media altura, ante un Alaniz que adivinó con brillo sus intenciones y desvió el remate.
Los de Marcelo Zucotti estaban con uno menos y se aferraron aún más a tratar de estar bien parados en el fondo, generando así el tercer contragolpe de riesgo de la parte inicial; Gonzalo Cipollone habilitó a Bustos y el atacante, que volvió a quedar cara a cara con Berardo, definió de zurda una pelota que pasó muy cerca del palo derecho.
Para Unión hubiese sido la alegría de irse al descanso con dos goles de ventaja, a pesar de la inferioridad numérica, pero no acertó en la puntada final y antes del final, en tiempo de descuento, Rivadavia alcanzó la igualdad; Fabián Martínez metió un derechazo bombeado desde tres cuartos de cancha, Alaniz dio rebote, Maximiliano Páez definió de cabeza, el uno despejó sobre la línea y en ese nuevo rebote apareció Tadeo Albiero para definir de derecha y establecer el 1 a 1.
Quisieron, pero no pudieron
En la parte final del encuentro los dos equipos dispusieron de buenas chances para quebrar la paridad, pero, en mayor medida gracias a las buenas intervenciones de los porteros, no lo pudieron hacer y así paulatinamente se fueron encaminando hacia el empate que no le convenía a ninguno de los dos.
En el comienzo tuvo las suyas Unión. Primero, a los 3’, con Bustos ganando por el medio y abriendo hacia la derecha para la aparición de Moyano, quien metió un violento derechazo que Berardo tapó magistralmente. Después, a los 15’, probó Solís con un tiro libre que tenía destino de ángulo superior izquierdo, pero que se encontró con otra enorme intervención del uno local.
Fueron las mejores que tuvo el Aurinegro en el comienzo del complemento, para darle paso a los intentos de un elenco Verde que, aprovechando la superioridad numérica y la merma física que mostró su rival, desde allí y hasta el final fue quien hizo todo para quedarse con el triunfo.
En la primera más clara, a los 17’, Albiero quedó mano a mano con Alaniz, metió un doble amague y definió al cuerpo del portero. Un par de minutos después el guardameta tapó una bolea de derecha de Maximiliano Demarchi.
Cerca de la media hora el local tuvo otro par de oportunidades para pasar a ganarlo, pero a los 27’ Francisco Zucotti despejó la pelota sobre la línea, tras una arremetida de Javier Demarchi dentro del área y a los 33’ Alaniz mandó al córner un buen derechazo de José Luis Villagra.
Luego los minutos transcurrieron en un marco de constante disputa y pierna fuerte en la zona del mediocampo, momento en el que el referí no tuvo la rigurosidad necesaria para ponerle freno al juego brusco. Volaron un par de manotazos y alguna que otra patada, pero Cejas dijo “siga, siga” y de milagro el partido no se le fue de las manos.
Así fue todo hasta que llegó el final y los dos quedaron con la preocupación por no haber ganado para cumplir con sus objetivos. El empate sumó muy poco y ninguno hizo su negocio.
La figura
Dante Alaniz
En los peores momentos de Unión, cuando resistía con un hombre menos los embates del dueño de casa, el uno intervino con buenas atajadas para sostener el empate Aurinegro. La atajada más destacada fue el penal que le desvió a Gayoso para impedir el empate de Rivadavia.
El árbitro
Roberto Cejas
Mala labor. Dejó pasar varias infracciones y algunos golpes dignos de expulsión, no aplicó ley de ventaja en algunas maniobras y hasta se equivocó dos veces al amonestar a jugadores que no habían cometido la infracción que cobró. Para colmo, muchas veces se mostró desafiante y hasta contestó con muy malos términos ante algunos reproches que recibió.
Arrebato y punta
En un triunfo que lo convirtió en nuevo puntero de la Zona D, gracias a la derrota de Unión de Arroyo Algodón en manos de Playosa, Argentino venció a Unión Social 2-0 como visitante, con ambos tantos que llegaron a los pocos minutos de iniciado el cotejo.
Abrió la cuenta el experimentado Claudio Andrada (5’) y Agustín Moreno redondeó el marcador a los 15’ de la etapa inicial para el equipo dirigido por Christian Romero.