Tras la votación de los miembros del Consejo Superior de la UNVM
El rector de la Universidad Nacional de Villa María fue uno de los tres votos en contra, frente a 12 que le dijeron “sí” a este pronunciamiento
La Universidad Nacional de Villa María (UNVM) se expidió a favor de la aprobación del proyecto de despenalización y legalización del aborto.
El miércoles por la noche, el Consejo Superior de la Universidad Nacional de Villa María se reunió en la sede del Rectorado, donde se votó sobre la posición de la Universidad frente al proyecto de ley de interrupción voluntaria del embarazo, que se debatirá el miércoles en la Cámara de Diputados de la Nación.
El voto a favor fue mayoría
Los miembros del Consejo -que está formado por representantes de los claustros estudiantiles, graduados, docentes y no docentes- iniciaron un debate con argumentos a favor y en contra, tras lo cual votaron, ganando el pronunciamiento a favor por 12 votos contra 3.
De esos tres votos por la negativa, uno fue el del rector de la UNVM, Luis Negretti.
Tras el resultado, la Federación Universitaria de Villa María (Fuvima) manifestó su apoyo a esta votación a través de las redes sociales: “Tenemos la felicidad de comunicarles que nuestra Universidad Nacional de Villa María, a través del Consejo Superior, se expidió a favor de la aprobación del proyecto de despenalización y legalización del aborto. Estamos muy contentes (*sic) de haber dado un paso más en la construcción de una Universidad Feminista. ¡Ni una muerte más por aborto clandestino!”.
Voces en contra del pronunciamiento
En las últimas horas, tras el pronunciamiento de la UNVM a favor de la legalización del aborto, se sumó una voz dentro de la casa de altos estudios en contra de esta determinación.
Así lo hizo saber a través de sus redes sociales el titular del Instituto de Extensión de la UNVM, Omar Barberis: “El día miércoles 6 de junio el Consejo Superior de la UNVM perdió una muy buena oportunidad para demostrar cuál es el camino más adecuado en la construcción de una democracia inclusiva, participativa y madura. Los miembros del Consejo Superior, según mi humilde criterio, se equivocaron al considerar como urgente un tema complejo, rico en matices, ideal para debatir profundamente desde lo académico y desde lo vivencial, aprovechando la diversidad de carreras que constituyen la UNVM”, comienza diciendo.
“Aprovechando que en el Consejo Superior confluyen múltiples miradas, diversos enfoques por parte de estudiantes, no docentes, docentes y egresados provenientes de comunidades diversas, era oportuno que la riqueza académica aflorara en toda su dimensión, demostrando que la universidad, a 100 años de la Reforma Universitaria, tiene mucho más que brindar que una mera disputa por ‘sí’ o por ‘no’, comprensible quizás en las cuestiones territoriales, pero que entiendo estériles en el ámbito de la universidad. Era un tema para tratar y demostrar, al margen del resultado, que lo prioritario es poder avanzar en la comprensión de los argumentos, fundamentos y razones de las distintas posturas, buscando criterios en común, alternativas matizadas por los distintos miembros para que se comprenda que la realidad no es blanca o negra. Que tiene diversos colores e infinidad de matices. Esto es ser una universidad plural. Y la UNVM nació siendo plural, fruto de la diversidad política, educativa, cultural, social y religiosa. Fruto de una comunidad que identificó un interés común y, contra toda oposición, consiguió su objetivo. En este tema no estuvimos a la altura de las circunstancias”, finaliza.
