Tras la muerte de un hombre que alimentaba a 23 perros en su casa se realizó una enorme movida, con rescatistas y la participación del municipio. Hoy buscan ayudar a esos animalitos que necesitan un nuevo hogar
Una historia emotiva donde se ven involucrados 23 animales volvió a poner en acción a muchas proteccionistas, animalistas y más gente solidaria, mientras se busca un final feliz.
La historia comenzó a escribirse con un señor llamado Juan que enfermó gravemente y tuvo que ser internado en Villa Nueva.
El hombre vivía en calle Tucumán al 1160, de la vecina ciudad, y tenía 23 animalitos a los que les daba de comer siempre de buena voluntad, sin recibir donaciones. Lo hacía todo a pulmón, con la mejor predisposición.
Los animales estaban en perfecto estado, por ello cuando fue internado, la mayor preocupación de Juan era tener quién se ocupara de sus peludos.
Finalmente Juan no pudo superar su enfermedad, falleció en el hospital y todos los animales quedaron sin dueño ni casa.
Al enterarse de esta historia, un grupo de personas se preocupó mucho y empezó a comentar el hecho por la calle y por las redes sociales, buscando una solución.
Algunos empezaron a llevar comida, aunque nunca alcanza a veces para uno cuando se trata de más de 20 animales.
La veterinaria Laura Bozzini, quien trabaja mucho por los callejeros, comentó en las últimas horas que “se hizo una cadena de favores porque en eso se basa nuestra vida”.
De la cadena forman parte las mujeres luchadoras que siempre participan en este tipo de casos, como Natalia Videla, Cecilia Bessone y Analía Lisio, entre otras.
Por ayuda estatal
El panorama no pintaba fácil, por eso se debió llamar al intendente, Natalio Graglia, quien inmediatamente pasó el caso al subsecretario de Seguridad Ciudadana, Mauro Bizzarri, que se reunió con las mujeres.
Tras conocer la situación, todos acudieron a la casa para poder ayudar a esos animales y las personas que ingresaron se encontraron con un cuadro bastante triste porque muchos perritos habían muerto de hambre y otros por pelearse. Cuando entró una persona conocida de Juan, se juntaron todos los perros y comenzaron a repartir los animales para darles un destino.
Algunos se encuentran a disposición del municipio y otros fueron trasladados a una guardería canina.
Laura indicó que “se necesita ayuda urgente para poder encontrarles provisorios o un lugar permanente a esos animalitos, que han quedado a la buena de Dios”.
Ayudar no será únicamente por los perritos, sino también por Juan, quien alimentó a esos animales con un amor inclaudicable.
También será por quienes se movilizaron bastante por esos animales, como, por ejemplo, las mujeres antes mencionadas, los funcionarios y “la señora Luchi Tulián y su esposo Mario”, como lo remarcó Laura.
Los perritos siguen esperando un mejor destino.