GRUPO D – Argentina
La selección tuvo un día agitado y Sampaoli estuvo cerca de renunciar. Un grupo de jugadores hasta pretende que ataje Guzmán y no Armani, quien asoma como titular
Escribe Gabriel Márquez
Especial para EL DIARIO
La selección argentina vivió ayer horas difíciles, con un amplio protagonismo mediático vinculado con una relación que parece definitivamente rota entre jugadores y cuerpo técnico. Desde las primeras horas del día se conocieron algunos detalles de una reunión entre las partes luego de la derrota ante Croacia en la noche de jueves, en la ciudad de Nizhni.
Se habló de un pacto, un juramento, para aprovechar la vida que dio Nigeria al superar a Islandia y dejar la clasificación en manos de la albiceleste.
La práctica se concretó por la mañana y tuvo los 15 minutos de rigor para que los medios registraran imágenes del grupo en pleno trabajo.
Las tareas y la división de jugadores en el campo de juego comenzaron a alimentar probables formaciones para el juego del martes, sin ningún tipo de confirmación oficial.
Parecía que todo culminaría en paz y que el objetivo estaba puesto en San Petersburgo, cuando en horas de la tarde argentina, noche en Rusia, volvieron a circular rumores de un pedido de los jugadores para hacerse cargo de la conducción del equipo, prescindiendo del cuerpo técnico. Esta vez las quejas, que ya se habían hecho sentir por el planteo táctico en los dos partidos iniciales, habrían estado vinculadas a la elección de Franco Armani como arquero titular, en contra de la preferencia de la «mesa chica», que quería a Nahuel Guzmán.
Casi en paralelo se viralizaron audios de los excampeones del Mundo, Ricardo Giusti y Sergio Batista, que aseguran que el mánager Jorge Burruchaga habría confirmado los rumores sobre la autogestión de los jugadores, con algunas sugerencias para que se pusiera al frente del equipo.
El clima se enrareció una vez más y corrió fuerte en Bronnitsy la versión de que el alejamiento del DT era cuestión de horas. Incluso se manejaron versiones de una conferencia de prensa oficial con la presencia del presidente de AFA para aclarar la situación. Sobre el filo de la medianoche en Rusia, los rumores se acallaron y llegó la confirmación de que Jorge Sampaoli será quien conduzca el entrenamiento de la selección en la jornada de hoy.
Los protagonistas principales por ahora han eludido el contacto directo con los medios. Solo Javier Mascherano y Cristian Pavón salieron con humor al cruce de las versiones que indicaban una pelea entre ellos. En off, el presidente Claudio Tapia asegura que las versiones son infundadas, aunque no ha expresado nada en forma pública.
En lo estrictamente futbolístico, el trabajo de ayer giró sobre un esquema de 4-4-2, con Armani como arquero, Pavón de titular y el probable regreso de Di María y Banega. Más allá de lo que se resuelva y del resultado que se obtenga en el encuentro del martes en la búsqueda de la clasificación, el papelón de estos días será difícil de disimular.