Escribe: Por Sabrina Aguilera y Paula Belmonte CONICET
Un grupo de investigadores del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) pertenecientes al Laboratorio de Comunicaciones de la Facultad de Ingeniería de Mar del Plata desarrolló el primer audífono digital y programable que permite a las personas que conviven con discapacidades auditivas mejorar su calidad de vida.
Se trata de un dispositivo de asistencia auditiva de producción nacional y de bajo costo que integra las funcionalidades más importantes de este tipo de equipos. El proyecto es dirigido por Jorge Castiñeira Moreira, investigador adjunto de Conicet y fue realizado por Alejandro Uriz, doctor en Electrónica y Becario posdoctoral de Conicet, como parte de su trabajo de tesis. Uriz optó por realizar un trabajo que cubra una necesidad específica que tenga la población en el país.
A través de un estudio elaborado a partir de preguntas específicas incluidas en el Censo Nacional 2010 se pudo detectar que en Argentina, alrededor de 300.000 personas conviven con discapacidades auditivas y, en la mayoría de los casos, es imposible encontrar una solución económicamente accesible. Según Uriz, “los audífonos digitales tienen un costo muy alto y no son un artículo producido en nuestro país. Hoy estamos hablando de 3 mil a 5 mil dólares por un audífono digital y las obras sociales a veces no los cubren. Este equipo no sólo viene a resguardar lo básico si no que tiene las características de los mejores audífonos implementados, y además en una tecnología desarrollada en Mar del Plata”. En términos generales, la Organización Mundial de la Salud (OMS), estima que unos 1.100 millones de jóvenes de todo el mundo podrían sufrir pérdida de audición por una exposición sostenida a ruidos que forman parte de los hábitos cotidianos.
Para el desarrollo de este audífono se han estudiado en detalle las funciones de extensor de audibilidad y de tratamiento de acúfenos. “El extensor de audibilidad es lo que permite que una persona escuche lo que sin el audífono no escucharía. Es decir, toma toda la información que está en la zona donde el oído no le responde y la lleva a una zona que escuche mejor”, explica Uriz.
Por otra parte, el acúfeno es la percepción de ruidos en el oído que no corresponden con ninguna señal acústica en el entorno. Es descrito a menudo como un zumbido, un pitido, un ruido y puede ser percibido en un oído, en ambos y en la cabeza (con o sin percepción del sonido en los oídos). Varios pacientes asocian el comienzo del trastorno a un trauma sonoro por exposición a sonidos de muy alto nivel, que van desde sonidos del lugar de trabajo hasta el uso reiterado de dispositivos electrónicos como reproductores de música y celulares.
Este primer audífono digital programable ha sido desarrollado con el objetivo de ofrecer una alternativa nacional a los individuos que conviven con alguna discapacidad auditiva y requieren una ayuda tecnológica para mejorar su calidad de vida. “Es una técnica que enmascara el pitido que escucha la persona afectada y reduce su percepción, aunque no deja de oír las otras cosas” afirmó Uriz.
El audífono posee micro controladores comerciales para que, en el caso de producirse alguna falla pueda ser reparada, evitando su descarte. Además, “un aspecto interesante es que lo podés alimentar ya sea con la batería de audífono o con pilas, por lo tanto, si te quedas sin baterías un fin de semana y no conseguís, podes reemplazarlo por pilas, la idea es que el dispositivo contemple este tipo de situaciones” declaró Uriz.
También puede ser programado desde una computadora y reprogramarlo en función de las necesidades y cambios de la condición auditiva que la persona va experimentando a lo largo de su vida. A partir de esto, la ventaja de ser digital y programable es que “el especialista lo puede adecuar a la necesidad y condición de cada persona”, agregó Castiñeira.
Este proyecto fue uno de los ganadores del concurso Innavar en su edición 2013, realizado por el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva, en la categoría Investigación Aplicada. Además, el equipo recibió un subsidio de la Secretaría de Políticas Universitarias (SPU) del Ministerio de Educación de la Nación, “Con el financiamiento del SPU compramos maquinarias para construirlo a pequeña escala, pero estamos analizando hacer un convenio con alguna empresa para poder producirlo comercialmente”, afirmó Uriz.
Actualmente el audífono digital programable ha sido patentado y la oficina de Vinculación Tecnológica de Conicet Mar del Plata está trabajando en el proceso de transferencia, en búsqueda de interesados en producirlo o en adquirir la patente. Se estima que para mitad de 2016 se estarán realizando las pruebas clínicas para llevar adelante la parte final de este proyecto.