LIGA VILLAMARIENSE – CLAUSURA – 1ª FECHA – Zona A
En un partido equilibrado, Silvio Pellico y Alem empataron 1 a 1. A ambos les costó llegar con contundencia al arco de enfrente
Escribe: Daniel Rodríguez
A las 15.55, diez minutos más tarde de lo acordado, Leones y Canarios volvían a pisar el verde césped con sus ilusiones intactas. Tanto en el banco local como en el visitante los técnicos eran los mismos. Ahora, sobraba ver de qué manera se plantaban rumbo a lo que se viene.
Ya desde el inicio del encuentro, Antón Borghi (el arquero tricolor debutó en el 11 titular) comenzaba a transformarse en un pilar para el elenco tricolor. Es que Silvio Pellico salía a buscarlo por medio de las subidas de su capitán Federico Ibáñez. Alem, por su parte, había elaborado un sistema de juego en dónde apostaba a la capacidad creadora de Pablo Fernández en el mediocampo y su manera de asociarse con Ricardo Juárez, Cristopher Contreras, que retornaba al elenco villanovense, y Nicolás Argañaraz.
Con un viento predominante, el partido se volvía trabado y ríspido. Aun así, ambos elencos intentaban ser protagonistas y poder romper la paridad que prácticamente invadió todo el primer tiempo. Pero el cotejo era áspero y las faltas no se hacían esperar en medio de todo esto. Para colmo de males, a los 13 minutos del primer tiempo, sobre el andarivel derecho, una pelota impactó de lleno en la zona del rostro de Juan Pablo Sotto (quien se había calzado la 9 de Alem). Por este motivo el trámite se retrasó al menos once minutos hasta que fue remplazado por Luis Demichelis, el cual rápidamente sobrevoló la zona ofensiva.
En los dueños de casa, Diego Gabetta se mostró siempre como una alternativa para cada búsqueda. En tanto, Rodrigo Brusa y Cristian Fernández también aportaban pero se les complicaba cuando se encontraban con un Martín Artico y un Yamill Elhall bien ubicados en la última línea.
Fin de la paridad
Finalmente a los 36 minutos, en uno de los tantos ataques de los dirigidos por Cristian Agosto, pudieron conseguir un tiro libre casi a metros del vértice del córner izquierdo. Y hasta allí fue Contreras, quien no dudó en no enviar el centro y probar directamente al arco. Con un derechazo efectivo, la pelota cruzó todo el frente de la valla defendida por Lionel “el Cumbia” Luciani y se le coló por su segundo poste. Así, de un balón parado, Alem generó su ventaja y lo celebraba.
El canario estaba herido y rápidamente salió a buscarlo. A los 40, el portero de los de Villa Nueva detenía un cabezazo con una volada fenomenal. Más tarde, lo mismo haría con un disparo ejecutado a media distancia por Gabetta.
Tiempo de urgencias
Ya en el segundo tiempo la historia se asemejaba a una fotografía del primer acto. Los visitantes triangulaban, pero sufrían en los últimos metros y los dirigidos por Silvio Morales ajustaban sus líneas, pero Borghi estaba inspirado.
Alem estaba apresurado por asegurar el partido. Asimismo, Silvio Pellico ansiaba por demostrar en el resultado lo que intentaba.
Morales dispuso, en el local, el ingreso de Rodrigo Premet por Valentín Daghero. El mismo Premet luego terminaría marcando el empate.
Antes de lo mencionado, Contreras tuvo dos tiros libres en zona ofensiva y casi repite festejo, pero esta vez Luciani se encontró bien ubicado.
Volcado más en el ataque, el equipo Canario finalmente se encontró con su tanto. Es que luego de un contrataque que encontró desacomodada a la defensa de la visita, Premet recibió una pelota filtrada que lo dejó completamente en soledad. Tras correr veinte metros, aproximadamente, sólo tenía que elegir de qué manera definirla. Y lo hizo bien: con un disparo rasante al medio del arco marcó el empate y las cosas estaban nuevamente como al principio; aunque ambos equipos ya habían hecho el desgaste físico. Iban 34’. Sí. El partido tenia creación… pero poco peligro.
Los restantes quince minutos se repartieron en faltas e imprecisiones. De igual manera, los locales estuvieron cerca del festejo: sobre el final, a los 44, tras un tiro libre de tres cuartos de cancha, Gabetta envió un centro que no fue bien conectado por el volante ofensivo Matías Sambrana. El dueño de casa se perdía la canche de ganarlo.
La paridad les sentó bien. Uno sumó. Quizás las amarillas acumuladas jueguen pronto una mala pasada. Ahora, sólo resta esperar sabiendo que siempre es bueno medir fuerzas.
El árbitro
Juan Ferreyra
Mal. No amonestó debidamente y favoreció el juego brusco; varios jugadores deberían haber sido expulsados por su comportamiento. No observó faltas claras y fue mal secundado por su primer línea, Marcelo Mallada, quien varías veces se apresuró al momento de levantar el banderín.
La figura
Antón Borghi
El arquero, con sus salidas, achiques y hasta sacando tres pelotas importantes, se destacó y ayudó para que su elenco finalmente no cayera de visitante. En tanto, en el local, se destacó la entrega del experimentado Diego Gabetta.
