Concejo Deliberante – La dimisión fue presentada ayer a José Carignano
El edil del PRO tomó la decisión luego de vencerse la licencia de 30 días que había solicitado, ahora lo remplazaría Polack, quien ante EL DIARIO ya manifestó su intención de asumir la banca
Después de cumplir con el mes de licencia que había solicitado, Omar Coutsiers renunció ayer a la banca que ocupaba en el Concejo Deliberante en representación del PRO, dentro del bloque Juntos por Villa María.
En la nota de puño y letra que el exconcejal presentó para comunicar su decisión, señala que la renuncia es de carácter “indeclinable” y que lo que la motivó son “razones de estricta índole personal y de salud”, que le impiden “ejercer en plenitud” las responsabilidades de su función en el legislativo.
Dirigida al presidente del Concejo Deliberante, José Carignano, la nota da cuenta del “honor” que significó para Coutsiers haber sido elegido por los ciudadanos para ocupar el cargo, a la vez que aclara que lo hizo “con enorme responsabilidad”.
El ahora exconcejal del PRO hizo el pedido de licencia a fines de junio y le fue otorgada en los primeros días de julio, por lo que vencía el 5 de agosto. Ahora, la renuncia debe ser aceptada en la sesión mediante un proyecto de decreto que ingresará este jueves y que puede ser tratado sobre tablas o bien la semana que viene con un despacho de la Comisión de Acuerdos. La aceptación es por mayoría simple de todos los concejales.
Quien sigue en la lista para remplazar a Coutsiers es Delfin Polack, quien hace meses atrás fue designado por el intendente Martín Gill como presidente del Ente de Control de Servicios Públicos. Polack llegará a la banca en representación del Frente Cívico.
Según el procedimiento, el presidente del Concejo deberá convocar a una comisión cuya misión será evaluar si está en condiciones de asumir. Se estima que, entre otras cosas, deberá analizar la real situación procesal de Polack en la Justicia Federal, tras haber trascendido su imputación por los supuestos delitos de intermediación financiera y asociación ilícita.
Sorteado este paso, lo que restaría es saber si Polack puede continuar ocupando los dos cargos, es decir, al frente del Ente y como concejal, o por incompatibilidad tiene que optar por uno de los dos.
En el hipotético caso de que Polack no asumiera la banca que dejó vacante Coutsiers, la remplazante sería María del Carmen Ramírez, que es quien le sigue en orden en la lista electa, en representación de la UCR.
Adiós al Ente de Control de Servicios Públicos
“El lugar que sigue en la lista es el mío y voy a asumir la banca, en caso de que la comisión evaluadora entienda que estoy en condiciones de hacerlo”, asguró ayer Polack, en diálogo con EL DIARIO.
“Formalmente no tengo nada, por lo tanto no me puse a analizar qué voy a hacer, sólo escuché que Coutsiers renunció y dada esa situación, obviamente voy a asumir la banca”, reiteró.
“No tengo en claro si es incompatible seguir al frente del Ente de Control de Servicios Públicos, el cargo no es rentado, es ad honorem como el del resto de los integrantes, eso está establecido por Carta Orgánica Municipal”, aclaró.
“Mi intención es asumir la banca y, en el supuesto caso de que sea incompatible continuar en el Ente en paralelo al Concejo, obviamente le voy presentar la renuncia al intendente para que él vuelva a designar a otra persona para la Presidencia”, concluyó el dirigente del Frente Cívico.
Al asumir Polack, el Frente Cívico quedará con dos bancas dentro del bloque Juntos por Villa María, al igual que la UCR, mientras que el PRO queda con una sola, la de Karina Bruno. Si la que asumiese fuera Ramírez, la UCR se vería fortalecida con tres lugares, en tanto que el resto quedaría con un solo integrante.