Pena unificada de cinco años y seis meses de prisión de cumplimiento efectivo

El convicto villamariense terminó confesando que participó en un asalto perpetrado hace siete meses en Villa Nueva. Anteriormente lo sentenciaron por un hecho de abuso sexual (1998), un asesinato (2000) y otro violento y audaz atraco (2007)

Un conocido delincuente local, con frondosos antecedentes, recibió ayer una condena de cinco años y tres meses de prisión efectiva luego que se declarara culpable de haber intervenido en un asalto a un supermercado villanovense, en enero pasado; pero como tenía pendiente parte de una sanción anterior, le impusieron una pena unificada de cinco años y medio de cárcel.

Se trata del multireincidente Daniel Gabriel Sarmiento (41), alias “Mulita”, quien luego de asegurar que era inocente y que le habían “armado la causa” para perjudicarlo, terminó confesando el hecho. Claro que, previo a eso, la víctima y principal testigo del asalto declaró en la sala y lo sindicó como uno de los dos sujetos que lo golpearon para robarle poco después del mediodía del 23 de enero del corriente año.

De esta manera, Sarmiento acumula cuatro sanciones penales en las dos últimas décadas, ya que la primera (seis meses en suspenso) le fue impuesta en noviembre de 1998, la segunda (12 años y tres meses) en junio de 2000 y la tercera (siete años y medio) en septiembre de 2007, todas dictadas por la Cámara del Crimen de Villa María.

A mano armada

El robo por el que “Mulita” fue sentado una vez más en el banquillo de los acusados se produjo en el Supermercado Rivadavia, ubicado en la esquina de Córdoba y Rivadavia, en la vecina ciudad.

Alrededor de las 12.20 ingresaron al local comercial dos sujetos armados y uno de ellos le exigió al propietario del negocio que le entregara el dinero que había en la caja registradora.

El comerciante asaltado es el conocido periodista local Diego Pellegrini, colaborador de EL DIARIO en deportes mecánicos, quien a pesar de ser amenazado de muerte, se trenzó en lucha con los delincuentes.

En la despareja pelea, Diego se llevó la peor parte, ya que le asestaron un golpe en la cabeza con la culata del revólver (sufrió un corte en el cuero cabelludo) y un puñetazo en el rostro, y en medio del forcejeo, se le enganchó la pierna derecha en una heladera y sufrió una fractura en el peroné, lesión considerada grave porque le demandó 60 días de curación.

Los ladrones se apoderaron de 1.100 pesos en billetes de baja denominación y huyeron a pie, pero uno de ellos (Sarmiento) fue detenido por la Policía pocos minutos después en las inmediaciones del puente Juan Bautista Alberdi.

El asaltante tenía en su poder el dinero sustraído en el supermercado, mientras que el otro sujeto, quien logró escapar y nunca fue identificado, se llevó el arma de fuego.

Por ese hecho, Sarmiento fue acusado como presunto coautor de “robo doblemente agravado”, porque usó el revólver como arma impropia y por las “lesiones graves” que le ocasionó a la víctima.

En el juicio también se ventilaron otros dos hechos delictivos cometidos por “Mulita”, en este caso en perjuicio de su sobrina Jésica Cingolani. Entre mediados de julio y el 23 de agosto de 2017 la amenazó de muerte en reiteradas ocasiones y el último día le dio un golpe de puño en la nuca.

Condenas anteriores

El 11 de noviembre de 1998 le impusieron una condena de seis meses de prisión en suspenso por un hecho de “abuso deshonesto”, antigua figura penal que definía los tocamientos y manoseos impúdicos.

El 5 de junio de 2000 fue condenado a 12 años de prisión como coautor de “homicidio simple” por el crimen del gestor Ciro Antonio Cavallo (48), quien fue ultimado de dos balazos -uno en el pecho y otro en la cabeza- el 3 de octubre de 1998, como producto de lo que en el mundo del hampa se conoce como “ajuste de cuentas”. Sin embargo, el ya tristemente célebre “Mulita” recibió una pena unificada de 12 años y tres meses, porque tenía pendiente parte de aquella sanción del 98.

Sarmiento obtuvo la “libertad condicional” a principios de noviembre de 2006 y volvió a las andadas apenas tres meses después, ya que el 10 de febrero del año siguiente y acompañado por otro sujeto, perpetró un violento asalto a mano armada en la distribuidora “Distriaye”, ubicada en Buenos Aires 2250, en barrio San Martín.

El 13 de septiembre de 2007 fue sentenciado a siete años y medio de prisión tras ser declarado coautor de “robo calificado por uso de arma de fuego”, aunque dicha sanción debió unificarse con lo que le quedaba pendiente de la condena por el homicidio de Cavallo.

En definitiva, desde 1998 hasta la actualidad, Sarmiento estuvo poco más de 18 años tras las rejas y ahora deberá cumplir íntegramente la pena impuesta en la víspera.

Con suerte, podrá salir de la cárcel en enero de 2023

Por su condición de reincidente, Daniel Sarmiento no podrá acceder al beneficio de la “libertad condicional” y tendrá que completar la condena dictada ayer por la jueza Eve Flores. A lo sumo, con buena conducta y una pericia psicológica favorable, podrá solicitar la “libertad asistida”, instituto legal que permite la excarcelación seis meses antes del cumplimiento total de la pena, con lo cual estaría saliendo del penal de barrio Belgrano a fines de enero de 2023. Por otra parte cabe señalar que, además de la magistrada, intervinieron en la audiencia de debate el fiscal Francisco Márquez y el abogado defensor Daniel Volpe (en la foto, junto al “Mulita”).