CARTAS – OPINIONES – DEBATES
El dirigente de ATE da cuenta del incidente que se registró en Buenos Aires durante la manifestación realizada por los trabajadores cesanteados de la Fábrica Militar
Escribe Gustavo Vílchez (*)
El jueves pasado, cuando estábamos por abordar los colectivos en la Plaza del Congreso, en Buenos Aires, pasó por el lugar Darío Capitani junto con el intendente de Oliva. Pasaron por el costado de los micros mirando hacia adentro y sonriendo, sabiendo que estábamos nosotros ahí adentro. Entonces bajamos para frenarlo y pedirle una explicación de lo que había dicho en la Legislatura de la Provincia de Córdoba, cuando nos trató a los trabajadores de Fabricaciones Militares de “bobos” (esa palabra usó).
En ese momento se acercaron también algunos compañeros despedidos de la Fábrica Militar de Villa María que estaban arriba de los colectivos y cuando le dije que a su alrededor estaban ellos, él se sonrío nuevamente y me dijo: “Podrían haber sido más”, como burlándose de la situación que estamos viviendo, lo cual generó una gran impotencia y bronca.
En ese momento se acercan otros compañeros como para tranquilizar la situación y el intendente de Oliva dijo: “Bueno, no es para tanto lo que están reclamando” y fue ahí donde me vuelve a despertar la bronca, y las ganas de decirle tanto al intendente de Oliva como a Capitani la situación que estamos viviendo los trabajadores y trabajadoras de Fabricaciones Militares. Con más razón lo que es en la parte de Villa María, de donde él es parte y que ni siquiera se pone a disposición de la Fábrica nuestra.
Cuando algunos compañeros comienzan a registrar todo en el video, puede verse que Capitani todavía se está riendo. Y mi bronca ya era tremenda porque sentí no solamente que se reía de lo que yo estaba planteando, sino que se reía de la situación que está viviendo cada uno de los compañeros despedidos y de su familia. Sentí como que es una bajada de línea del Gobierno de Cambiemos hacia todos sus representantes que deben hacer lo mismo como para demostrar que no les importa la clase trabajadora y solo les importan los negocios que están detrás de cada uno de los despidos o cada uno de los cierres de las entidades nacionales, como es el negocio inmobiliario que hay detrás de Fabricaciones Militares, como también el del Hospital Vidal Abal, de Oliva.
Me puse en la piel de cada uno de mis compañeros y como siempre decimos, al frente de ellos para que ellos salgan lo menos perjudicados posible. Soy yo el que en ese momento pensé que tenía que defenderlos uno por uno y no exponerlos a esta situación. En el comunicado de la juventud del PRO se nos tilda de pseudodirigentes y de que no son trabajadores: a los de la juventud el PRO y a cualquier ciudadano que quiera los invito a que hagan una consulta en la Fábrica Militar por nuestros legajos. Cuando no tenemos que estar en la defensa de Fabricaciones por culpa de su propio Gobierno, que vayan a golpear la puerta y van a ver que estamos trabajando como corresponde. Además, en el sindicato estamos totalmente ad honorem.
Lo hacemos con la convicción de pelear por nuestros derechos y los de nuestros compañeros. ¿Por qué viajaron a Buenos Aires? Viajamos porque se había programado una marcha nacional y un acto en la sede central de Fabricaciones y para ello desde Villa María salimos en cuatro micros con compañeros y compañeras de Fabricaciones Militares, compañeros de la CGT, de distintas organizaciones sociales, barriales, que concentramos en Capital Federal, donde esperamos el arribo de los compañeros de las distintas plantas. En sede central se tuvo una reunión con representantes de la intervención. Ahí se anunció que va a haber nuevos despidos en la sede central de Fabricaciones y que nuestros reclamos de reincorporación, reapertura y reactivación de Fabricaciones Militares iba a ser transmitido al interventor, el ingeniero Luis Riva, y al ministro de Defensa, Oscar Aguad.
¿Cuáles son los planes del Gobierno de Cambiemos para la industria para la defensa? Claramente, como lo venimos denunciando, vienen por el cierre definitivo de Fabricaciones Militares porque no les interesan los productos de Fabricaciones Militares para las fuerzas de seguridad ni para las mineras ni las canteras de la provincia de Córdoba, sino que quieren seguir comprando afuera sin licitación, haciendo negociados, y vender las propiedades.
Por todo esto es que no les creemos más a ningún político de Cambiemos, porque cuando Darío Capitani nos dijo a comienzos de su gestión que iba a estar a la par nuestra y que iba a golpear el bombo las veces que sea necesario en defensa de Fabricaciones, nos mintió; cuando la vicepresidenta Gabriela Michetti dijo que en Villa María no iba a haber despidos, nos mintió; cuando el ministro de Defensa, Oscar Aguad, dijo que no iba a haber despidos, que se iban a reactivar todas las unidades productivas y que se iban a hacer nuevos convenios para que no solamente no haya despido, sino que se generan más puestos de trabajos, nos mintió. Y encima de todo esto, cerró una de las fábricas más importantes, que es la de Azul. Así que no le creemos a ningún dirigente de Cambiemos, no le vamos a creer en nada de lo que nos vengan a decir o plantear, no creemos en sus dichos, en sus versos, en sus acciones ni en su acercamiento.
(*) Trabajador, miembro de ATE y secretario general de CTA Autónoma de Villa María
