Con algo de retraso debido al complejo año electoral, Arroyo Cabral llevó a cabo la Fiesta Nacional del Producto Lácteo en su 28º edición, a la vez que festejó sus jóvenes 119 años de existencia
Los cabralenses celebraron en comunidad y compartieron su noche de gala.
Con una jornada sabatina que soportó con lo justo las inclemencias del tiempo, el numeroso público presente en el espectáculo gratuito desarrollado en la plaza San Clemente vio cómo una representante local fue coronada como nueva soberana de la fiesta que identifica a la localidad. Se trata de Valentina Rinero, de 16 años, quien sucede a Fátima Bruno, reina saliente.
El acto oficial de apertura se llevó a cabo un día antes, teniendo como epicentro el salón del Centro de Jubilados y Pensionados, que estrenó importantes mejoras edilicias en sus instalaciones. Allí se congregaron autoridades, alumnos, representantes de las fuerzas vivas y público en general, y se entregaron los ya tradicionales reconocimientos correspondientes a los vecinos que cumplen 80 años durante esta temporada.
Una de las noticias más importantes fue que el instituto San José, el colegio secundario de la localidad, ha recibido como donación un terreno lindante a su actual recinto, lo que permitirá que los alumnos ingresen y egresen por la calle Esteban Piacenza, evitando el continuo movimiento (que se da en la actualidad) por la ruta nacional 158. En ese sentido, el intendente Pablo Alcalino reconoció la labor del conocido empresario Elvio Lorenzati, a la hora de concretar esta cesión de la flamante superficie.
Aportes por su aporte
También se entregaron ayudas económicas a las escuelas cabralenses por parte de representantes de la Mutual de las Comunidades, cuyas autoridades resaltaron que el monto otorgado durante 2015 en concepto de ayuda a colegios alcanza en total los 230 mil pesos.
Por colaboración
Previo al corte de cintas en la flamante obra, el titular del Centro de Jubilados, Miguel Montenegro, también se dirigió al público y expresó su beneplácito y orgullo por poder ver cristalizada la obra que llevó un par de años de duro trabajo, y agradeció la colaboración permanente de toda la comunidad.
Por la noche, el municipio organizó una jornada musical en una de las esquinas de la plaza, en la que hubo grupos infantiles de danzas, la magia de Tuky (muy festejado por los niños) y la actuación del grupo folklórico joven Nuevo Rumbo y todo el cuarteto de Cristal. Además, la gente pudo disfrutar de un patio de comidas con un variado menú.