INVENTARIO/Ushuaia
MINI GUIA
Ubicación: Sur de Tierra del Fuego. / Distancias: 3.100 kilómetros al sur de Villa María. / Población: 60 mil de habitantes.
Escribe Pepo Garay
ESPECIAL PARA EL DIARIO
1) Estar en el fin del mundo: caminar por el centro de Ushuaia es caminar el fin del mundo. Esa es la impresión que atesora el viajero en sus andares por la capital de Tierra del Fuego, aun cuando en rigor el título sea un abstracto. La actividad se torna toda una proeza para los sentidos, con la mirada al sur que se pierde en la mar salvaje, en un contexto marcado por las últimas estribaciones de los nevados andes a las espaldas, y una arquitectura tan patagónica a diestra y siniestra.
Encantadora resulta la médula urbana, con turistas de los cinco continentes en campera (puede hacer bastante frío incluso en enero), muchos de los cuales llegan al puerto crucero mediante. Cafés, restaurantes, hoteles, tiendas varias e inmuebles de tejados se lucen en la recorrida.
2) Parque Nacional Tierra del Fuego: deambular por el centro bien paga el periplo, y sin embargo aquello es apenas el comienzo. Ushuaia convida con cantidad de rincones en el rededor inmediato, entre los que destaca el Parque Nacional Tierra del Fuego.
Ubicado a apenas 10 kilómetros del centro, la forma más sencilla de llegar a su seno es a través del mítico Tren del Fin del Mundo. Ya en el Parque, el visitante podrá disfrutar de caminatas (40 kilómetros de senderos señalizados, usualmente abiertos de octubre a abril), excursiones en canoa por los ríos Lapataia y Ovando y la Laguna Acigami, y paseos por la Laguna Negra, la Cascada del Río Pipo y la preciosa Bahía Lapataia.
3) Más citas con la naturaleza: continuando con la cita con la naturaleza, el viajero tiene la chance de subir a pie hasta el glaciar Martial (a 7 kilómetros del centro) y de paso obtener panorámicas de la ciudad y de la bahía de Ushuaia, alma del Canal de Beagle).
Más alejados, se presentan entre otras escapadas sobresalientes los lagos Escondido y Fagnano, laguna Esmeralda, Puerto Almanza (pueblito de pescadores), Paso Garibaldi (que hace las veces de cruce de la cordillera, con rumbo a Chile) y el cerro Castor con su centro de esquí.
4) Por el Canal de Beagle: ya en territorios dominados por el agua, las excursiones por el Canal de Beagle despliegan propuestas de a montones. Los catamaranes salen desde la zona del puerto y la bahía, y ofrecen inolvidables postales marítimas.
Entre los rincones más significativos a visitar hay que subrayar Isla de los Lobos Marinos (no hace falta explicar quiénes son los protagonistas del lugar), Isla de los Pájaros, Islas Bridges e Isla H (todas incluyen caminatas) y el célebre Faro Les Eclaireurs (enclavado en uno de los islotes homónimos, es otra de las marcas registradas de los paisajes fueguinos).
5) La cárcel más famosa y otros sitios icónicos: de regreso en el continente, Ushuaia propone conocer su interesante historia y cultura gracias a sitios icónicos como la Antigua Casa Beban y Museo de la Ciudad, el Espacio Pensar Malvinas (emprendimiento que rescata un capítulo muy caro a los sentimientos locales), la Plaza Malvinas, la Reserva Natural Urbana “Bahía Encerrada”, la Antigua Casa de Gobierno, el Museo del Fin del Mundo y el Museo Marítimo y del Presidio.
Este último rescata la apasionante línea de vida de la penitenciaría, una de las cárceles más famosas del continente (por la que pasaron presos emblemáticos de la historia nacional como “El Petiso Orejudo”, el anarquista Simón Radowitzky o Mateo “El Místico” Banks).