La docente reclamó justicia y que se cumplan sus derechos. Hace 15 meses ganó por concurso el cargo de preceptora en la Escuela del Trabajo, pero no se lo permiten ocupar. La directora explicó la razón por la que su hermano es el que se está desempeñando en dicho puesto
El 14 de agosto de 2014 le dijeron a Adriana Gigena que no la iban a dejar desempeñarse en el puesto de preceptora que había ganado por concurso en la Escuela del Trabajo (IPET Nº 49) porque “era para hombres”.
Ayer, tras 15 meses luchando para que la dejen trabajar, decidió encadenarse en la entrada de la institución educativa, medida que tomó luego de enterarse de que su puesto lo estaba ocupando un hermano de la directora, Myriam Saura.
“Lamentablemente tuve que llegar a esto”, dijo resignada Adriana, quien con 60 años se desempeña en el cargo de preceptora en la escuela Abraham Juárez y algunas horas cátedra como docente de Artes Plásticas.
“Esta situación me genera un estrés increíble, no es nada lindo estar acá, pero si no hago algo no voy a solucionar lo mío”, remarcó, acompañada por representantes del Frente de Izquierda, los únicos presentes en el lugar, pese a las tantas organizaciones por el derecho de la mujer que existen.
“Hace un año y tres meses que no resuelven mi problema, pero lo peor es que han puesto un suplente en lugar mío, que es hermano de la directora y él está trabajando como corresponde mientras a mí me dejaron a un lado”, se quejó.
Bien temprano, Adriana tuvo posibilidad de dialogar con Saura, quien viajó hasta Oncativo a una reunión con la Inspección y “me dijo que iban a ver qué podían resolver”. (Ver «Tribuna Docente»)
“Siempre he tratado de comunicarme con la directora, pero la vicedirectora, Monica Scarafía, me maltrató siempre, hasta me trató de mentirosa, que ella dudaba de lo que yo decía”, agregó la mujer, aferrada a una reposera con enormes cadenas.
“Con esto quiero que la gente tome conciencia de lo que está pasado, hace un año y tres meses que la estoy luchando para que me den lo que me gané, estuve trabajando casi una semana, y los compañeros de la UEPC me impugnaron el cargo por ser mujer”, recordó, y agregó que “está mal lo que están haciendo, pero porque querían ubicar a unos compañeros de ellos, entonces quiero una solución a esto”.
Adriana recalcó que necesita trabajar y planteó: “El suplente de acá a tres meses va a cobrar, y yo reclamo lo mío. Si hay derechos para uno, ¿por qué no para mí? Han hecho algo, han resuelto poner un suplente, pero se olvidaron de mí. Pero ellos como escuela a la solución la tienen”.
Finalmente, avisó: “Voy a quedarme acá hasta que solucionen esto”.
El suplente “podría haber sido cualquier persona”
“Lo único que puedo decir es que esta situación no es inherente ni a la directora de la escuela ni a la escuela porque está en el Departamento Legales del Ministerio y son ellos los que tienen que resolver. Mientras no tengan la resolución ni qué determinación se toma, nosotros no podemos hacer nada”, remarcó ayer la directora de la institución, Myriam Saura, quien estuvo por la mañana en Oncativo participando de una reunión junto con otros colegas de Villa María y Villa Nueva por una redistribución de sedes de Inspección.
Allí, dijo que puso al tanto a la nueva inspectora sobre la situación de Gigena, pero insistió en que “no sé ni cuando ni cómo se puede resolver, y la resolución que se tome seguramente la va a saber ella antes que nosotros, porque es al interesado a quien primero se le informa”.
Sobre el hecho de que un hermano suyo esté ocupando hoy, como suplente, el cargo que ganó por concurso Gigena, explicó: “Es un suplente, es un agente de la escuela y el cargo se cubrió porque la escuela necesita que se atienda al internado, sobre todo a esta altura del año donde los chicos necesitan una atención pormenorizada y nosotros hace 15 meses que tenemos ese cargo sin cubrirse de hace una semana. Cualquier docente de la escuela tiene prioridad para tomar un cargo suplente estando en la lista de mérito, clasificado y con puntaje, eso lo dice el procedimiento administrativo y se va por orden de mérito, podría haber sido cualquier persona”.
“Tribuna docente” – Convocan a reunión
Para el próximo viernes, el sector “Tribuna docente”, del Frente de Izquierda, convoca a una asamblea en el café Mar-Gut desde las 18 “para debatir el tema con la comunidad docente”.
Según informaron quienes acompañaban a Gigena ayer, es de carácter abierto, y si quieren estar los de la UEPC, mejor”.
“No a la discriminación de género”, era la leyenda que tenían grabados los folletos que repartían invitando a la reunión, haciendo referencia al caso de la docente. “Es una expresión más de las discriminaciones que hace el Estado provincial, incluso con sus empleados”, indicaron, y agregaron que la impugnación del cargo de Gigena fue impulsado por delegados de la UEPC Lista Celeste”.