Rechazo al editorial del lunes del diario La Nación
La Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH) expresa el profundo rechazo a las expresiones del editorial del diario La Nación del día de la fecha, titulado “No más venganza”.
El editorial llama “venganza” a la Justicia. Esa Justicia es el derecho de las víctimas y familiares a la mínima reparación luego de décadas de impunidad y es reconocida en el mundo como ejemplo de respuesta civilizada a los crímenes más atroces.
Las pintadas en el excentro clandestino de detención “Mansión Seré» y en la Universidad de Rosario, las reiteradas amenazas de bomba en la ex-ESMA y los pedidos de impunidad por parte del editorial mencionado, a escasos días del balotaje presidencial, señalan la intención de impedir la garantía del efectivo cumplimiento de los derechos humanos.
La APDH reafirma su inveterado compromiso con las banderas de Memoria, Verdad y Justicia, la restitución de los niños/as apropiados por los genocidas, como su irrenunciable lucha por el Juicio y Castigo a todos los responsables de la dictadura cívico-militar.
Los que hemos caminado este largo trayecto de la historia de Villa María, en oportunidades nos hemos preguntado cómo darle continuidad a este proceso de la Memoria, de la Verdad y la Justicia y quién o quiénes iban a poder continuar recordando la tragedia de la última dictadura con el compromiso de construir este presente mirando hacia al futuro
Lo hacíamos sin mirar a nuestro rededor y no podíamos descubrir que allí estaba la esperanza, los jóvenes, militantes de la vida que participan en distintos escenarios y expresan el compromiso de seguir con la Memoria, hasta que definitivamente se puedan conocer los porqués del Terrorismo de Estado y los porqués de aquellos civiles que fueron cómplices de la tragedia, para dejar de ser prisioneros del pasado
Cada uno de nosotros elige un lugar donde estar, en el Olvido o en el Recuerdo con absoluta libertad, sin presiones de ninguna naturaleza, a conciencia, pero con la certeza de saber dónde uno ha elegido quedarse, comprometerse y buscar nuestra identidad individual y social, que, en síntesis, representa lo que queremos ser y dónde queremos estar, no es una paradoja, es la realidad, es la vida y la vida se hace todos los días, con aciertos y con errores, pero con la firme convicción de ser y no de no ser
Lo singular de esta tragedia es querer saber qué nos pasó, no ocultar nuestra historia, no ocultar a nuestros familiares, amigos y compañeros detenidos, otros secuestrados y asesinados y ello implica intentar construir un país que no olvida su pasado, que no lo entierra, que no niega sus raíces y su identidad.
Esta actitud representa bucear la historia, interrogarla y provocarla, para encontrar la Verdad de lo que ocurrió en el Siglo XX con las dictaduras y con el Estado Genocida de 1976-1983, pero no con el fin simple solamente de recordar o de venganza, no, sino para comprometernos a construir un Estado democrático y plural en el marco de la libertad y la diversidad.
Ese es nuestro objetivo primario, nuestro desafío, al que, creemos, nadie puede quedar ajeno, más allá de su ideología o principios políticos.
Nuestra Memoria, además, de escrita, es una Memoria viva permanente, que se fortalece, se renueva y se vivifica en el tiempo, en la mezcla de los jóvenes y de los adultos.
La libertad, la democracia, la verdad, la igualdad y la justicia son nuestro camino y estamos dispuestos a no renunciar a la Memoria por los derechos humanos y en homenaje a los desaparecidos de la última dictadura militar 1976-1983.
No renunciamos al “Nunca Más”.
Asamblea Permanente por los Derechos Humanos
Delegación Villa María
Lic. Elvio Omar Toscano
“Nefasto”
La Nación publicó un editorial titulado “No más venganza” sosteniendo falacias que ya han sido desmontadas a partir de datos históricos debidamente documentados, a la vez que plantea un regreso en el camino del juzgamiento de los delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura cívico-militar.
El nefasto editorial intenta reflotar la teoría de los dos demonios, señalando que el terrorismo de Estado estuvo enfrentado a otro encarnado por las organizaciones de izquierda, igualando a estas últimas con quienes provocaron el horror del viernes 13 en París.
Quizás envalentonado con frases emitidas en el frenesí de la campaña política que recién concluye, La Nación creyó que puede regresar el reloj de la historia y volver a los años 90. Pero resulta ser que ese regreso no es posible porque esta sociedad es distinta. Es decir, que más allá de los deseos de pequeñísimas minorías que sueñan regresar a los indultos del peronismo menemista, la sociedad ha desarrollado un camino que no tiene retorno y no existe posibilidad de abandonar el mismo.
La Nación no sufre confusión al pretender igualar a las organizaciones de los 70 con el terrorismo, en realidad, sabe que necesita demonizar a las mismas para poder justificar su propia posición mediante la cual defiende a quienes sí usaron el terror como repudiable técnica de gestión social. Sabe que esto último no puede ser negado, que todo lo horroroso cometido por quienes ejercieron el poder durante la dictadura ya no puede soslayarse pues está debidamente probado. Es por ello que intenta mentir acerca de todo lo que tuvo que ver con la izquierda en los 70. Pero no han comprendido que la sociedad, con marcha y contramarcha, continuó con el camino de verdad iniciado con la Conadep y los juicios a las Juntas.
Ya no puede volverse atrás, eso mismo quedó expresado en la posición de los trabajadores de prensa de La Nación que salieron a repudiar con energía lo planteado en la editorial. A ellos se han sumado numerosas voces, pues los encarcelados lo están por haber cometido crímenes de lesa humanidad y eso es justicia, nada tiene que ver con la supuesta venganza que ve La Nación.
Esos ancianos que actualmente están presos o siendo juzgados no siempre fueron ancianos y ejercieron el poder del Estado cometiendo crímenes y creyendo que luego nadie les pediría que rindieran cuentas por los mismos.
Jesús Chirino
Llaman a cuidar logros tras el balotaje
La derecha ha ganado con el apoyo de todos los poderes fácticos, pero queremos dejar en claro que no nos van a robar la alegría de los 118 nietos recuperados, de los juicios y condenas a los genocidas (que hoy festejan este triunfo electoral), de la Asignación Universal por Hijo (AUH) que perciben más de tres millones de pibes pertenecientes a las familias más necesitadas, de los más de tres millones de jubilados que no tienen que mendigar un sustento, del nivel salarial de la clase trabajadora (lo que motivó que el dueño de Techint manifestara que los salarios de la Argentina eran los más altos de la región y que ello atentaba contra la competitividad y que Macri dijera que el salario era un costo y que los costos hay que bajarlos para hacer competitiva la producción), de las 800 mil viviendas construidas con el plan Procrear, de la recuperación de los fondos previsionales posibilitando el incremento sustancial de las jubilaciones y el crecimiento de un casi extinguido ANSES (a tal punto que sus trabajadores hoy pelean en contra del importe que se les descuenta en concepto de Impuesto a las Ganancias), de la nacionalización de YPF y de Aerolíneas Argentinas, de la reactivación de los ferrocarriles, de la creación de las universidades y de las 19 vacunas con su reducción de mortalidad infantil.
Sentimos vergüenza por la Córdoba del Navarrazo que destituyó al legítimo gobierno de Obregón Cano y Atilio López y de la Córdoba del “Navarrazo en las urnas” que posibilitó la Presidencia de Macri.
En ambos hechos fue protagonista De la Sota y en el último de los hechos en coincidencia con el amigo del genocida Menéndez y dirigente opositor, Oscar Aguad. Un Menéndez que tampoco fue ajeno al primer hecho.
Todo tiene que ver con todo. Estamos seguros de que más tarde o más temprano la política que expresa Macri y su equipo nos llevará de nuevo a un derrumbe como el de 2001, por eso llamamos al pueblo trabajador, a sus obreros, a los pequeños empresarios, a los estudiantes, a las amas de casa, a estar atentos para defender todas y cada una de las conquistas de la década ganada.
Armando Roberto Battaglia
José Luis Bernabé
Richard Bertoglio