El nuevo secretario de Salud propone un relevamiento sanitario en los tres primeros meses de trabajo. Dijo, además, que hay vecinos que no acceden a los servicios de salud por cuestiones de pobreza y disfunción familiar
El pasado viernes, Humberto Jure asumió como secretario de Salud de la nueva gestión de gobierno que encabeza Martín Gill. Un día antes, el nuevo intendente, durante su discurso de asunción había enumerado, área por área, cuáles serían los principales lineamientos de trabajo. En salud, hizo especial hincapié en las adicciones, a las cuales definió como un «flagelo» que son «el germen de la inseguridad y la violencia», pero también son un factor que «amenaza a la vida».
Jure, en diálogo con EL DIARIO, enfatizó el trabajo en esta problemática, la cual dijo que es un flagelo pero no sólo para Villa María, sino para toda la región de influencia de la ciudad. «Por esto hay que desarrollar y fortalecer un trabajo interinstitucional e intersectorial que incluye a toda la comunidad, desde el sector público como los gobiernos de la Provincia y de la Nación, como también instituciones religiosas, escuelas, centros vecinales, dependencias policiales, clubes deportivos y el sector productivo», explicó el funcionario. «Es importante que, hacia adentro del municipio, esto no sea sólo un trabajo desde el área de salud, sino en conjunto con otras áreas como hábitat sustentable, educación, inclusión social y ambiente», remarcó.
El desafío: trabajar en el territorio, llegar a los vecinos
«Una de las más completas del interior de la provincia», así definió Jure a la infraestructura destinada a la salud con la que cuenta la ciudad. Asimismo, comentó que «en salud los recursos siempre son finitos, pero las demandas y necesidades son crecientes, por lo cual es necesario incorporar de forma constante nuevas tecnologías, nuevos medicamentos, para el abordaje de enfermedades».
El secretario destacó que Villa María cuenta, en la actualidad, con 13 Centros de Atención Primaria de la Salud (CAP), diseminados por los diferentes barrios, con un CAP móvil y con el Hospital Pasteur del cual Jure resalta la capacidad de internación: 114 camas con 40 de ellas destinadas a la Unidad de Terapia Intensiva.
«Capacidad hay mucha, el desafío es poder desarrollar un abordaje mucho más cercano a la familia», explicó el funcionario. En este sentido, Jure dijo: «hay que trabajar antes de que la enfermedad o la muerte se produzca, porque en estos casos el centro de contención es el hospital. Pero tenemos que llegar antes y esto representa una responsabilidad que necesita de un trabajo sobre el territorio».
Para esto, el secretario comentó que «se debe trabajar desde los centros de atención primaria que están en los barrios y desde donde se puede identificar a la población. Hay que nominalizar a cada vecino y que esa persona esté bajo la responsabilidad del CAP». Jure remarcó: «Tenemos que considerar a la familia como unidad de seguimiento y de cuidado. En Villa María, contamos con agentes sanitarios que ya están trabajando en el relevamiento. A esto hay que hacerlo con herramientas estandarizadas para lograr un seguimiento, monitoreo y evaluación de forma correcta».
En su plan para llegar hacia los vecinos de forma más cercana, explicó que el abordaje debe ser «biopsicosocial, es decir, un abordaje integral».
La brecha en el acceso a los servicios de salud
Aún ante el flagelo de las adicciones u otras problemáticas, como el embarazo adolescente, Jure enfatizó que «el problema sanitario más grave es la brecha de inequidad entre diferentes sectores de la población, por los cuales algunos no acceden a los servicios de salud. La asistencia y demanda se ejecuta cuando existe ya una enfermedad. Eso está cubierto, como decía, por los centros de atención primaria y el hospital, pero nosotros tenemos que enfocarnos en la prevención, sobre todo en familias vulnerables».
En el caso de embarazos adolescentes dijo que esta llegada al vecino es fundamental, ya que así se puede garantizar el control durante el embarazo, que muchas veces no está cubierto en familias vulnerables y «esto conlleva complicaciones, sobre todo en el último trimestre de embarazo».
Jure también comentó que las causas por las cuales ciertos sectores de la población no llegan hasta los servicios de salud son múltiples, y entre ellos se encuentran «la pobreza, familiares con algún tipo de discapacidad o la disfunción familiar».
“Tenemos que darles una propuesta de contención a los jóvenes”
Ante el énfasis de Jure en temáticas de salud como las adicciones y el embarazo adolescente, surge la cuestión de la información. Diferentes organizaciones, tanto gubernamentales como del sector civil, realizan campañas y difunden información sobre métodos anticonceptivos o vías de ayuda en el caso de las adicciones. ¿Es esta información insuficiente? Jure explicó: «Estas problemáticas surgen durante la adolescencia, una etapa en la cual los chicos y chicas atraviesan por una serie de factores propios de la edad que son para ellos estresantes. A esto, se le suma en muchos casos una falta de adecuada red de contención, que no es sólo la familia, sino también la escuela, el municipio, el club, las parroquias. Ante estos cambios y la falta de contención, inicia el camino de la adicción que, en general, comienza con el alcoholismo. En esa instancia, ya es más difícil que el mensaje llegue al joven. Por esto, la búsqueda para el abordaje tiene que comenzar desde cuando son niños. Y lo que propone Martín Gill en cuanto a deserción escolar 0 me parece muy importante. Al estar todos escolarizados, es mejor llevar una propuesta de contención a los chicos, un espacio al cual recurrir».
Además, Jure resaltó que «el proceso de atención debe ser centrado en la persona y no en la adicción o enfermedad».
Así, el flamante nuevo secretario enumeró las premisas de trabajo para los primeros meses al frente del área de Salud: “Trabajo en el territorio, enfoque intersectorial e identificación de aquellos grupos de la población a los que no llegan los servicios básicos de salud”.
El 50% de los niños sufre de obesidad
Consultado acerca de cuáles son las patologías que afectan a mayor parte de la población, Humberto Jure señaló tres grupos principales: las enfermedades respiratorias, las relacionadas con la salud reproductiva y las enfermedades crónicas.
En cuanto a las respiratorias, Jure destacó que son más “populares” durante el invierno, con predominancia de la neumonía y el síndrome bronquial obstructivo. En salud reproductiva, enfatizó sobre la necesidad de prevención del embarazo adolescente y embarazos no deseados.
Por último, en relación a las enfermedades crónicas, enumeró a la hipertensión, la obesidad y la diabetes. “El 50% de los niños de Villa María tiene obesidad, en muchos casos con un nivel grave o severo”, resaltó el funcionario.
En este sentido, dijo que es necesario implementar, en trabajo conjunto con el área de Educación los “quioscos saludables” en las escuelas de la ciudad, para promover una alimentación más sana, que remplace el consumo frecuente de hidratos de carbono y de harinas. “Esto es esencial hacerlo durante la infancia, después es más difícil”, explicó Jure, quien también aseguró que la falta de tiempo y el ritmo de vida afectan la alimentación, no sólo de adultos, sino también de los niños. “Tenemos que promover el consumo de frutas y verduras”, subrayó.
“Por la cuestión de la mala alimentación después tenemos a jóvenes y adultos con serios problemas de colesterol, hipertensión, diabetes, y es lógico, si la dieta diaria se compone de gaseosas, hamburguesas y pizzas, es inevitable que después lleguen los problemas”, enfatizó.