El entrenador de Yrigoyen Germán Vicario (foto) se mostró muy desencantado con la producción del equipo. Lejos de mostrar “calentura”, analizó el partido: “Cuando no se juega bien, generalmente perdés. A lo mejor no era la manera de perder, pero cuando no estás a la altura de la final, es posible que esto suceda. Entiendo que nos desordenamos varias veces en el partido, porque arrancamos mal, después pudimos ordenarnos pero nuevamente cometimos desinteligencias y finalmente en una jugada aislada perdemos el partido con un jugador menos. La característica de Unión Central es lo que vimos en la cancha, no resignarse nunca hasta la última pelota, por eso se llevan el triunfo”.
En cuanto a la autocrítica constructiva dijo: “No jugamos una final, por lo menos en el primer tiempo. Después titubeamos porque parecía que no estábamos entendiendo lo que nos jugábamos. De todos modos no es para morirse, porque en el fútbol estas cosas pasan. Si no jugas bien, es un riesgo. No hay ninguna crítica para los jugadores, sabemos lo que hemos hecho en casa, y es una buena noticia saber que en siete días podemos dar vuelta la página”.
Además el DT agrego: “Es difícil plantear un ritmo de juego cuando generas situaciones y no las convertís. Creo que ahí estuvo la clave del partido, porque al no meterla, tenés posibilidades de perder hasta en la última pelota del juego. Creo que fallamos en todo. Al no entrar a jugar una final, porque no la vibramos, no la sentimos y la dejamos pasar, perdimos porque hicimos menos goles, y el fútbol siempre se ganó con goles, por eso Unión se lleva un gran mérito de esta final: metió más y convirtió más”.
Finalmente agregó: “Insisto en que hay encontrarle el punto positivo. El próximo domingo arrancamos 1-0 arriba y el empate nos da un nuevo campeonato”.