Matías Bendazzi cerró, de manera magistral, su retornó exitoso al fútbol villamariense. Con 37 años, el atacante vivió una temporada inolvidable en todo sentido, familiar y futbolístico, por eso se lo vio muy feliz el domingo, celebrando el bicampeonato con sus compañeros.
“Más cosas lindas no me pueden haber pasado en este año”, apuntó en el inicio de la charla con EL DIARIO y destacó que “el nacimiento de mi hijo me llenó de vida. El bicampeonato con Yrigoyen fue muy bueno y la invitación para jugar el partido a beneficio en Plaza Ocampo es un halago importante”.
“Se vivió un lindo partido, muy vibrante. Creo que Yrigoyen es un digno campeón y es muy importante para este grupo, que tanto esfuerzo hizo, alcanzar el bicampeonato. Ese es el fruto de haber trabajado todo el año, de ser un grupo unido y formado por compañeros”, explicó, y añadió que “salimos a jugar la tercera final como tendríamos que haber jugado la revancha. Dejamos vivir a un gran equipo, pero demostramos que fuimos el mejor equipo del año”.
Por su parte, sobre su papel preponderante que mostró en el Clausura, el oriundo de Hernando comentó que de aquel Bendazzi que no era titular el campeonato pasado a éste, que terminó siendo protagonista, cambió la actitud y el trabajo diario de todos los días. A veces no podía entrenar todos los días por razones de trabajo”.
“La meta que nos pusimos de ser bicampeones me llevaron a realizar un esfuerzo mayor para poder llegar a jugar buenos partidos. Así se me dio y pude demostrar lo que soy”, redondeó.
“El fútbol es lo más lindo que hay. Hace más de 30 años que estoy corriendo atrás de una pelota y me llenó de vida. Espero que nunca se acabe este deporte y que la gente lo siga apoyando”, cerró, a pura emoción.