Maximiliano Vargas, el chico de 12 años que fue arrollado el miércoles a la madrugada en La Playosa, fue intervenido quirúrgicamente ayer por la tarde en el Hospital de Río Cuarto “para descomprimir el edema cerebral” que padece a consecuencia del accidente, explicó una fuente médica del San Antonio de Padua, donde el niño permanece internado en la Unidad de Terapia Intensiva Pediátrica (UTIP) desde la antevíspera.
“El estado del paciente sigue siendo muy grave y el pronóstico reservado. Continúa con asistencia respiratoria mecánica y es necesario evaluar su evolución permanentemente porque su estado puede cambiar de un momento a otro”, señaló la fuente médica consultada.
Al cierre de esta edición, Maximiliano se encontraba “estable”, pero su vida todavía corría peligro y era necesario esperar 48 horas más, que serán claves.
Cabe recordar que Maximiliano fue arrollado por un automóvil en circunstancias en que salvó a su hermanita menor, quien iba a cruzar la calle para ir a su encuentro y así quedar ella expuesta a la marcha del coche.