p20La flores que nacen espontáneamente en caminos, banquinas y alambrados, resultaron ser de gran ayuda para la agricultura.
Se trata de especies de “flores espontáneas” que, según el INTA, “atraen insectos benéficos que controlan plagas y polinizan cultivos”.
Especialistas de ese organismo recomiendan conservar las especies con flor que se desarrollan cerca de las rutas y los alambrados, debido a su capacidad para albergar insectos benéficos que ayudan a controlar las plagas y a polinizar los cultivos.
“Las especies con flor ofrecen néctar y polen que es consumido por los insectos benéficos que, a su vez, se alimentan de las plagas que atacan a los cultivos”, explicó Julieta Merke, del INTA Rafaela.