El fiscal y representante de la Superintendencia de Tribunales Francisco Márquez, se refirió la salida de la jueza de Menores y el puesto momentáneo que quedó en manos de quien se desempeñó como su suplente
Ante la renuncia de la jueza Cecilia Fernández, quien estaba al frente del Juzgado de Niñez, Juventud, Violencia Familia y Penal Juvenil, crece la incertidumbre sobre cómo será el escenario hacia adelante, teniendo en cuenta la importancia que tiene esta área de la Justicia y que ahora tendrá otra responsable.
En diálogo con EL DIARIO el fiscal y representante de la Superintendencia de Tribunales, Francisco Márquez, sostuvo que “la designación de un nuevo nombre para ocupar el cargo dependerá de lo que proponga el Consejo de la Magistratura, del gobernador y de lograr un acuerdo en la Legislatura. Hasta tanto haya una orden de méritos, momentáneamente fue designada la jueza de Control y Garantías Edith Lezama de Pereyra, quien venía desempeñándose en funciones de suplente en el último tramo”.
Sobre los tiempos que puede manejar la política y la Justicia para determinar al remplazante, destacó: “Es un cargo muy importante y complicado, fundamentalmente por la sensibilidad de manejar relaciones y situaciones sociales. Es un procedimiento que tiene sus etapas hasta llegar al nombramiento. Yo calculo que los tiempos para la designación del remplazo rondarán los tres meses aproximadamente”.
También agregó: “es posible que surja un llamado a concurso a través del Consejo de la Magistratura, que no tiene nada que no tiene nada que ver con el Poder Judicial y que está integrado por el presidente del Tribunal Superior y el Fiscal General. Esto en función de que pueda estar en curso una línea de personas que estén rindiendo. De esta manera los tiempos podrían acortarse”.
Ante la consulta de cómo quedará la Secretaría con este recambio dijo: “Seguirá funcionando de la misma manera, con el mismo personal que la integraba, sólo que en su lugar estará Edith Lezama de Pereyra, que como subrogante ya la había remplazado durante las licencias que Fernández había solicitado en diferentes momentos”.
Cecilia Fernández dijo a este medio que se cansó de pelear “todos los días”, que ya había solicitado la licencia porque “iba a trabajar con mucha angustia”, y que se iba medianamente tranquila, porque podría haberse quedado un tiempo más pero se encontraba ante un techo y con la imposibilidad de hacer.
Márquez resaltó también que: “Espero que quien gane el concurso o sea designado, tenga la actitud suficiente para ocupar el cargo que deja Fernández. Se necesita de alguien capacitado, dueño o dueña de una juventud proactiva, con la fortaleza de asumir la responsabilidad que se le ha encomendado. Debe ser buena persona, con la sabiduría que implica tener que pelear todos los días con la magnitud que implican los dramas sociales. Es un área que requiere mucha voluntad y capacidad. Un Juzgado de Menores, donde a diario se presentan episodios de violencia es un cargo de mucho peso. Hay que tener la preparación necesaria”.
Finalmente puntualizó: “Hay que tener ganas de solucionar problemas, y por supuesto no es una tarea sencilla. Es un área muy sensible, como así también debe ser la persona que esté al frente. Es una cuestión de actitud”.
