Alem venció 1-0 a Argentino, que perdió el invicto. Con un golazo de Nicolás Pedernera, los dirigidos por Pablo Suárez ganaron los dos partidos que disputaron y llegan de la mejor manera al clásico con Alumni. Todos embarrados, con la pelota de testigo…
Escribe Beto Arce
Alem sacó a relucir su chapa de candidato en un partido donde aprovechó su mejor condición de batallador. En arenas complicadas, porque el campo de juego (presentaba mucho barro) generó dificultades para el traslado del balón, el “León” estaba listo para la cacería, o por lo menos el escenario era el ideal… Y así fue, porque Argentino no pudo explotar a sus mejores hombres, y porque Alem con una firme defensa poco a poco los fue “comiendo” hasta cerrarles el arco. No es que los de Pablo Suárez hayan sido más que los Mauricio Morales, ni mucho menos… Pero hay partidos y partidos… y partidos para algunos equipos. Este partido era para Alem.
En el primer cuarto de hora de Ariel Galíndez se descontroló y le aplicó una fuerte infracción desde atrás a Juárez que encaraba al área. Era una jugada de roja en un segundo tiempo, pero el árbitro más que nadie sabía que se jugaba el primero, y penó con amarilla. Esta jugada es para resaltarla porque luego Galíndez tuvo un buen desempeño en el encuentro por el costado izquierdo.
Argentino dispuso de la primera situación de riesgo a los 26’ cuando tras un córner de Díaz (dueño absoluto de todas las pelotas paradas) la ubicó en el segundo palo para Jacobi que entraba solo, pero “Carlitos” no la esperaba y se la llevó puesta sin generar peligro. Sobre los 31’ Franco Ñáñez probó con un desviado remate que no inquietó a Gómez.
La respuesta de Alem llegó a través de una penetración a fondo de Adrián Vega, conectando un pasado centro que no llegó a destino, mientras Artaza se “relamía”. A los 38’ el Unión Social de Alto Alegre Iván Moyano intentó con un disparo desde afuera que no llevó demasiada fuerza y el arquero pudo controlar. En el minuto 38’ una asistencia de Díaz ubicó a Ramiro Cortez en posición de gol, pero su remate se fue desviado. A los 40’ Pedernera metió un taco bárbaro dentro del área rival para Vega, que cuando remató violentamente al arco fue interceptado oportunamente por Ñáñez en un cierre perfecto. La última fue de Alem y la generaron en conjunto por la izquierda. Fernández combinó con Dichiara y el lateral lanzó un centro preciso al área que Artaza bajó, pero Le Roux no pudo capitalizar.
Profundidad, nada. Buen juego, menos. Claridad, poca. Algunas buenas intervenciones de “Lanita” Díaz, regaló destellos de buen fútbol en el barro. El resto: pura garra, ganas y corazón. No siempre no querer perder, significa no querer ganar, porque los dos buscaron el triunfo, lo que encontraron fue el modo.
El barro, el potrero, la pelota, todos sucios, jugando cada acción como la última, con dientes apretados y el corazón caliente y latente… eso nos mostraba el partido, y de a poco el trámite tomaba más calor.
Suárez mandó a la cancha a Chiosso (buen desempeño) y le dio lugar a Dichiara en la mitad de la cancha. Alem no tiene delanteros de peso en el área, pero dispone de muchos volantes creativos y a ese recurso apeló para tratar de aproximarse al arco de Morales.
La más clara del partido fue para el “tricolor”, cuando el ingresado Chiosso habilitó a “Ricky” Juárez y mano a mano con el “1” le definió al cuerpo, cuando todos gritaban gol. Un minuto después Ramiro Cortez corrió con la pelota dominada desde su campo y llegó al área exhausto, pero pudo rematar para obligar al esfuerzo de Gómez.
Alem dispuso de su segunda jugada peligrosa en el partido y la convirtió en golazo. Nicolás Pedernera capturó un despeje en la puerta del área, la “mató”, no se puso nervioso y con mucha categoría la puso por encima de Morales para decretar el resultado de un partido que iba abrirse con un error o una genialidad: 1-0. “Chupita” es habitualmente marcador central, pero jugó un gran partido como volante y además marcó un gol que recordará siempre…
Argentino empujó y pese que el campo no favoreció al desarrollo de juego, tuvo oportunidades. Hablar de merecimientos en fútbol es casi en vano, pero el “Albiazul” no fue menos que Alem. A los 34’ el “Lana” Díaz perforó el intento defensivo de Chiosso, ingresó al área y remató, pero el primer palo le ahogó el grito.
Quedó tiempo para que el ingresado Julio Gastaldi se fuera expulsado a los 48’ en una jugada “caliente”. El juez le mostró la roja directa.
Ganó Alem porque conoce el patio de su casa, y porque Argentino no facturó cuando pudo. Ganó Alem porque aprovechó su momento y lo transformó en gol. En el barro de Villa Nueva, el “León” se comió al “Lobo”.
La figura
Claudio Díaz Fue el que se acordó del fútbol (en realidad, nunca lo olvidó). Tiró gambetas, un par de caños, habilitó y profundizó. Dueño de todas las pelotas paradas, siempre fue protagonista de su equipo y tuvo el gol del empate pero el palo le dijo no. El “10” cada vez juega mejor.
El árbitro
Yoel Yudica Fue permisivo en algunas jugadas y pasivo en otras. Penó con amarilla una jugada de roja en el primer tiempo (Galíndez a Juárez) y luego amonestó porque el partido ya estaba picado. Expulsó directamente a Gastaldi en el cierre del juego y tras el pitazo final recibió la recriminación de todo el equipo de Argentino. Su actuación fue discreta.