Mako Yonamine y Rosa Lina Cyrenius participan de un intercambio estudiantil y actualmente cursan sexto año de la especialidad Economía y Gestión en la institución trinitaria. Ambas rescatan lo sociables que son los jóvenes villamarienses y definen a la experiencia que protagonizan como “enriquecedora”
Villa María es una de las ciudades del interior del país donde el intercambio estudiantil se erige como una actividad con buen nivel de participación.
Son muchos los jóvenes villamarienses que optan por este tipo de actividad que implica viaje y estadía en el exterior. En el marco de la propuesta, también llegan un importante número de jóvenes que se insertan en familias y comparten el quehacer cotidiano
Entre las visitantes, Mako Yonamine y Rosa Lina Cyrenius, coincidieron como estudiantes extranjeras en el Instituto La Santísima Trinidad. Lo notable del caso es que una proviene de Japón y la otra es oriunda de Alemania.
En la institución trinitaria, Mako, de Okinawa, y Rosa Lina, que nació en Berlín, cursan el sexto año de la especialidad Economía y Gestión Administrativa.
“Me gusta la gente, podés hablar con todos, son más abiertos”, comenta con su casi perfecto castellano, aunque para ella la conjugación de verbos sigue siendo una materia pendiente.
Según expresó la joven, en una nota concedida al área de prensa de la institución educativa, lo que extraña de su país es la familia y los amigos, y aunque considera que la experiencia que está viviendo es muy enriquecedora, asegura que su lugar está en Alemania.
“No quiero vivir en otro país”, aseguró, antes de añadir: “Acá hay mucha joda, salen bastante y es más inseguro”.
De volver a la Argentina, lo haría sólo en carácter de turista, para visitar amigos y nuevamente degustar el sabor del dulce de leche y de un buen asado, manifestó en la entrevista publicada por el sitio institucional.
Por su parte, Mako, que además integra el equipo de básquet femenino del club Sparta, expresó: “La gente habla mucho, son muy divertidos y alegres”.
En su país está cursando el secundario con orientación en Composición Musical e Historia, no obstante, su experiencia en Trinitarios ha sido muy importante, ya que aspira en un futuro a profundizar en conocimientos sobre Administración de Empresas.
En cuanto a los planes de estudio, Mako considera que “en Japón tenemos que estudiar mucho más”. Asiste a clases de 7.30 a 16.30 y luego continúa con otras actividades vinculadas a lo académico.
En junio ambas estudiantes volverán a sus países y Villa María pasará a ser un cálido recuerdo y una experiencia de vida.
