El rector, Luis Negretti, confirmó además la conexión definitiva del sistema cloacal interno del Campus a la red troncal de la ciudad. “Lo más importante es que dejamos de contaminar y afectar al medio ambiente”, dijo
El rector de la Universidad Nacional de Villa María, Luis Negretti, destacó el avance de la obra denominada “Institutos II” y que, una vez concluida, incorporará más de 2.500 metros cuadrados de infraestructura para actividades académicas, administrativas y de investigación.
Esto fue luego que la máxima autoridad de la alta casa de estudios recorriera el frente de obra, oportunidad que aprovechó para anunciar la conexión definitiva de la Ciudad Universitaria a la red troncal cloacal.
Negretti, que estuvo acompañado por el secretario de Planificación Técnica, Servicios y Mantenimiento, arquitecto Carlos Azócar, resaltó la importancia del proyecto que se materializa de manera contigua al sector de los Institutos I, inaugurado en 2007. “La posibilidad de contar con esta construcción en el mediano plazo nos permitirá solucionar problemas crónicos como la falta de disponibilidad de aulas en determinados horarios, la carencia de espacios específicos para algunas carreras como Medicina y la ausencia de oficinas propias para el Instituto de Ciencias Básicas y Aplicadas”, afirmó Negretti.
A su vez, precisó que las obras avanzan de acuerdo a lo proyectado, aunque admitió que no ocurre lo mismo con los trabajos que se llevan adelante en Villa del Rosario, donde está adjudicada la primera etapa del futuro Campus: «Los informes indican que no van al ritmo esperado, pero avanzan». Cabe destacar que ambos proyectos fueron aprobados en 2015 por el entonces Ministerio de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios, con una inversión de 65 millones de pesos.
Al fin, las cloacas
El Rector confirmó, además, la conexión definitiva del sistema cloacal interno del Campus a la red troncal de la ciudad. La obra financiada con recursos propios de la casa de altos estudios garantiza la cobertura sanitaria en el 95% de la Ciudad Universitaria, ya que conecta los edificios que albergan al comedor, la biblioteca, el auditorio, los módulos áulicos, las residencias estudiantiles y los Institutos Académicos Pedagógicos.
“Las infraestructuras de este tipo suelen pasar desapercibidas porque no se ven, pero son igualmente necesarias y esenciales para toda comunidad. Hasta hace poco, las aguas servidas generadas por la UNVM se descargaban en pozos negros y requerían de la contratación diaria de camiones atmosféricos para su vaciado, hoy dejamos de erogar partidas presupuestarias para tal fin, pero lo más importante es que dejamos de contaminar y afectar al medio ambiente, porque los efluentes son saneados en las plantas de tratamiento de residuos cloacales y no penetran en las napas”, explicó.
En materia ambiental, también adelantó que la Universidad proyecta una auditoría como punto de partida para avanzar hacia la definición de un plan integral de gestión sustentable, basado en el diseño y posterior implementación de políticas institucionales que promuevan el uso racional y responsable de la electricidad, la incorporación de energías renovables, el reciclado y la disposición final de los residuos orgánicos, inorgánicos, patológicos y peligrosos que se generan en distintas áreas.