Muchos dicen que dormir con el perro es feo, sucio, malo. Cuestionan desde el sentido higiénico porque “el perro anda por ahí”, claro, como nosotros.
Quizás pensarán que sólo los hombres solitarios que duermen frente al mar, en las playas, comparten con su perro el sueño bajo las estrellas.
Están aquellos que viven bajo el puente –aunque no pase en Villa María, por suerte- y que se arropan con los canes callejeros, compartiendo el calor contra el frío de las noches.
En todo caso, se dirá también que aquellos que se van un día de campo y tienen una hamaca paraguaya, en medio de dos grandes árboles, suben a su perro a los piolines y descansan en una siesta reparadora.
Sin embargo, no todo tiene que ser motivo de excepción. Dormir con el perro, para muchos especialistas, es positivo, así sea en aquellos lugares distintos a los habituales de esta ciudad o en nuestra cama, compartiendo ronquidos.
Hay argumentos para sostener esa certeza.
Los perros pueden aliviar la ansiedad y el estrés en los seres humanos.
Las investigaciones demostraron que pueden ser una gran terapia para aquellos que sufren de estrés y ansiedad, haciendo que se sientan tranquilos y relajados. Acurrucarse con su perro en la cama le hará sentirse tranquilo y relajado, por lo que le ayudará a dormir mejor.
Además, siempre se siente seguro cuando su perro está con usted (que es una de las razones por la que muchos de nosotros tenemos un perro), para sentirse seguro. Usted sabe que su perro es leal, y se protegerá en cualquier situación. Durmiendo con su perro a su lado se sentirá seguro durante toda la noche y obtener una buena noche de sueño.
Mientras, su perro quiere estar cerca de usted en todo momento y permitirle dormir cerquita formará una fuerte unión permanente entre los dos. Se le hará sentir la calma y ser amado, y él mostrará esto de muchas maneras. Todos los perros necesitan ser amados y les encantará tener la oportunidad de dormir con usted.
Otra razón es que acurrucarse con su perro cada noche te mantendrá caliente y cómodo.
En noches crudas de invierno, como las que azotan por estos días, sentir el calor del “peludito” amado es hermoso, al tiempo que él disfruta también esa temperatura que necesita después de padecer las bajas temperaturas.
Especialistas también demostraron que los perros pueden reducir los síntomas de la depresión en las personas.
Muchas personas sienten que no pueden encontrar el amor incondicional que un perro puede llevar a otra parte y que les hace sentirse mejor con su perro al lado de ellos en la noche. Tener a su perro en la cama para abrazar y acurrucarse es una gran manera de aliviar su estrés.
Dormir con él, parece, es muy bueno.