Será bendecido el próximo miércoles y esperan poder seguir interviniendo las paredes de las plazas que contienen estos complejos habitacionales del barrio Los Olmos. Planean hacer un museo a cielo abierto de murales. Además, están censando a vecinos para mejorar las condiciones del lugar
“Si no hay un contacto real con cada comunidad, es mas que seguro que el mural a la larga termina muerto”, expresó Lucas Quinto, reconocido muralista de nuestro país que visitó Villa María para realizar una obra junto a niños y niñas del barrio Los Olmos.
En la jornada de ayer estuvieron presentes la legisladora provincial Nora Bedano, el subsecretario de Descentralización Territorial, Lucas Pagliero; la subsecretaria de Inclusión Social y Familia, Claudia Arias; el jefe de Gabinete, Héctor Muñoz, y el director del MuniCerca del barrio Los Olmos, Mauro Almirón.
Los trabajos de Quinto se difundieron a partir de su tarea en la Secretaría de Desarrollo y el área de Cultura de La Matanza (Buenos Aires) y por expresar gran preocupación por los problemas sociales.
“Este es un homenaje al padre Mujica y la idea de todo el mural es representar la figura de él acompañado por todo el pueblo y el sol de nuestra Bandera que lleva una pancarta con una frase suya”, comentó el artista.
El estilo marcado de Lucas Quinto se inscribe dentro de la tradición del muralismo latinoamericano y en ese sentido se reconoce como discípulo de Ricardo Carpani.
“La idea es que ellos (los vecinos) se lo apropien. Yo termino y me voy, pero el mural queda acá y es de ellos y la mejor manera de que se preserve es que ellos se sientan parte”, manifestó el experto en artes visuales, que tiene descendencia mapuche.
En el lugar se trabajó a lo largo de dos días, viernes y sábado, donde el artista trazó las líneas sobre la pared (en apenas 30 minutos), hizo partícipe a los niños que se llegaron al lugar y concluyó con los detalles de la obra en el día de ayer.
“Entiendo al mural como un medio de comunicación directo y se puede intervenir con la gente”, opinó el dibujante, y al ser consultado sobre el rol del arte en la sociedad actual, dijo: “Como decía Walsh (Rodolfo), ‘las paredes son la imprenta del pueblo’; es el lugar donde uno puede decir y llegar directamente con el mensaje”.
A raíz de su visita a la ciudad, se generaron distintas propuestas para seguir trabajando, así sea en el mismo barrio Los Olmos o en otros puntos de Villa María.
Se habló de poder continuar interviniendo distintas paredes y en un futuro convertir las plazas de los monoblocks en un museo a cielo abierto de murales.
Un censo para los monoblocks
El director del MuniCerca de barrio Los Olmos, Mauro Almirón, adelantó a EL DIARIO que se está llevando a cabo un censo sobre la totalidad de la población de estos tradicionales complejos habitacionales.
“Buscamos obtener datos referidos a la salud, educación, población y si son propietarios, alquilan o están usurpando los departamentos que habitan”, expresó el funcionario.
Almirón anunció también que desde el municipio están avanzando sobre la conformación legal de un consorcio integrado por vecinos y dijo que “ya existen referentes que facilitan la comunicación entre los ciudadanos y el Estado”.
Del total de 203 departamentos, ya fueron encuestados los habitantes de 115 de ellos por parte de practicantes de la carrera de Terapia Ocupacional de la Universidad Nacional de Villa María (UNVM).