Oscar Mengarelli, dirigente del Centro Nacional de Jubilados de ATE, cuestionó duramente la medida del PAMI por la cual se reduce la cantidad de beneficiarios de subsidios para medicamentos y pide que devuelvan la obra social a los “verdaderos dueños”
Con el título “La mentira tiene patas cortas”, Oscar “Cacho” Mengarelli remitió a EL DIARIO un comunicado del Centro Nacional de Jubilados y Pensionados de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE).
En la misiva, repudian la reducción de subsidios por la cual muchos jubilados dejarán de percibirlos para tener un 100% de cobertura en medicamentos.
La medida alcanza no sólo a los que tengan embarcaciones o vehículos de lujo, sino también a los que ganen más de 8.500 pesos o cuenten con un auto de menos de 10 años de antigüedad.
“Una vez más, el director ejecutivo del PAMI, Carlos Regazzoni, bajo falsas argumentaciones y de carácter mediático, vuelve a mentirle a la sociedad, como lo viene haciendo el presidente (Mauricio) Macri, justificando la profundización del ajuste hacia los sectores más vulnerables”, indicaron.
Para el sector que nuclea a los trabajadores pasivos y pensionados de esa organización gremial, “ahora Regazzoni, sobre la supuesta verdad de haberse detectado el acceso a beneficios dados por la obra social a 53 personas que tenían aviones, a casi 2.500 personas que tenían embarcaciones y a otras que tenían autos de lujo o vivían en countries y casos en que el subsidio estaba siendo utilizado para comprar medicamentos para las mascotas, ha decidido dejar de entregar medicamentos gratis a quienes cuenten con una prepaga, posean un auto de menos de 10 años o más de un inmueble o cobren más de 1,5 haber previsional mínimo”.
Los jubilados salieron al cruce de Regazzoni indicando que “sobre la falsa argumentación de pretender obrar con un sentido equitativo y de justicia se esconde otro asalto a nuestros aportes de décadas para gozar de una ancianidad que merezca ser vivida. Sería oportuno que el director del PAMI nos convocara a los legítimos dueños representantes de la obra social que sostenemos con nuestros aportes, para transparentar la información sobre los datos que denuncia y sobre lo cual ha dispuesto generar recortes que afectarán a usuarios que son legítimos beneficiarios de las prestaciones”.
Punto por punto
En primer término, los jubilados de ATE aclaran que “no es cierto que el funcionario sea quien decide que los jubilados que cuenten con prepaga no pueden acceder al PAMI”, dado que, argumentan, no hay ninguna ley que lo prohíba.
El segundo punto del comunicado se basa en una pregunta: “¿Por qué razón van a dejar de percibir medicamentos aquellos beneficiarios que pudieran a lo largo de décadas de trabajo, de ahorros que pudieran haber reunido con sacrificio, tener un auto de menos de 10 años de antigüedad o haber heredado una propiedad?”.
En tercer lugar, los dirigentes de los jubilados de ATE también preguntan: “¿Por qué razón dejarán de percibir medicamentos gratis quienes cobren una jubilación sobre la media de 8.491,7 pesos mensuales, cuando debiera saber el funcionario que ese monto está por debajo de las necesidades mínimas de subsistencia y cuando el salario básico apenas supera los ocho mil pesos?”.
Los jubilados de ATE también salieron al cruce de las declaraciones de Regazzoni cuando se refirió a que no pueden dar un subsidio a los que veranean en Punta del Este. “Es vergonzante el sentido de la equidad social que sostiene el director del PAMI, y que además sentenció con total insensibilidad que la vida de disfrute turístico de los jubilados y pensionados con cobertura asistencial en nuestro país debe ser sin trascender los límites fronterizos de la Argentina, dictaminando con ello que llegar a la tercera edad es sinónimo de ciudadanos de segunda”.
Finalmente, desde la entidad repudiaron “la nueva maniobra de decidir por sobre nuestra participación en el directorio, junto a la representación de los trabajadores activos, como lo establecen los estatutos del PAMI y nuestra Constitución Nacional, en cuanto al manejo de nuestros recursos, el destino de los mismos y la calidad prestacional deprimente que se viene dando y sin atender nuestros legítimos reclamos, a lo que se comprometiera, sin cumplirlo, la actual gestión”.
