Como hace pocos días en Salta, un condenado a prisión perpetua mató a su pareja en la cárcel de Villa María y luego se suicidó
Un preso ultimó durante la tarde de ayer a su concubina en el interior de la Unidad Penitenciaria Nº 5 de Villa María, en el segundo hecho de violencia de igual característica ocurrido en el país, toda vez que este mes se produjo un episodio similar en una cárcel de Salta, informaron fuentes de la Justicia.
El hecho
Fue a las 19.30 que los agentes penitenciarios tomaron conocimiento del hecho que se registró durante el horario de recepción de las visitas previstas para los días domingo.
En primer lugar fue hallado el cuerpo sin vida del detenido, identificado como Franco Benítez, alias Cheto, oriundo de Río Tercero.
Instantes después fue encontrada sin vida la mujer que lo fue a visitar, que resultó ser María Luján Aguilera, de unos 30 años, nacida en Buenos Aires, domiciliada en Oliva, pero con actual residencia en barrio Felipe Botta de Villa María.
Benítez se encontraba cumpliendo una condena de prisión perpetua precisamente por un femicidio que había perpetrado en otro tiempo y ocupaba el pabellón 2 de la cárcel local.
La mujer, por su parte, era madre de cinco hijos, aunque actualmente sólo uno estaba a su cargo, mientras que los cuatro restantes estaban a cargo de la Justicia de la Provincia de Córdoba.
De acuerdo a lo expresado por las fuentes consultadas por EL DIARIO, Benítez habría utilizado un objeto punzocortante para dar muerte a su pareja, elemento que fue secuestrado por los agentes penitenciarios.
En el lugar se hizo presente el fiscal Francisco Márquez, a la vez que el titular de la Penitenciaría local, alcaide mayor José Ernesto Herlan, se aprestaba a proporcionar a los medios un parte de prensa acerca de lo ocurrido.
Caso calcado
El sangriento episodio que se registró durante la tarde de ayer en el interior de la cárcel de Villa María repite, en sus formas, al sucedido hace pocos días en la penitenciaría de Villa Las Rosas de Salta, donde el condenado, quien ya había matado a su mujer en prisión, Gabriel Herrera, ultimó a su actual pareja de 20 años, Andrea Neri, dentro de una celda de visita.
La mujer, que era madre de un bebé de pocos meses, fue ahorcada y luego acuchillada de cinco puñaladas, hecho del que el niño fue testigo.