El titular de Apymel estuvo en Villa María. En diálogo con EL DIARIO Rural, habló de la realidad del sector, la situación de SanCor y la relación de las Pymes lácteas con Atilra
Se llevaron a cabo en Villa María una serie de reuniones con empresarios pymes del sector lácteo, de las que participó el presidente de Apymel, Pablo Villano.
El miércoles último, se entrevistó con los asociados a la institución y el jueves, con la funcionaria del Ministerio de Agricultura de la Provincia Liliana Allassia, para ultimar detalles de un encuentro para jóvenes del sector lácteo y la implementación de un sofware colectivo para los empresarios Pymes.
También dialogó con EL DIARIO Rural indicando que “el año 2016 fue muy delicado, con una crisis internacional que hacía rato no se veía. Como agravante, los países que necesitan estos productos para alimentar a su pueblo, no tienen plata para comprar. Eso perjudicó a los países productores como el nuestro”, indicó.
Sumado a eso, el clima y el “desaliento de tamberos por el precio de comienzo de 2016”, provocó que de 11 mil millones de litros que se produjeron en 2015 “se bajara a 9 mil millones”, apuntó Villano.
“Con los mismos costos fijos y menor producción, las pymes atraviesan una situación difícil en este año”, planteó.
Agrega que otro problema en Argentina es que “es el único país de Latinoamérica donde hay pequeñas y medianas empresas que tienen que convivir con las mismas reglas que las grandes”, indicó.
De todas maneras, valoró la organización de Apymel que abre el paraguas antes de tocar fondo. “Nosotros organizamos un grupo exportador donde hay 25 empresas. Hoy está complicado vender al mundo, pero estamos preparados y seguimos trabajando con Brasil”.
También valoró que “en lugar de seguir la pelea por la cadena de valor con el sector comercial, decidimos hacer desde hace dos años la Semana del queso y la marca ‘paraguas’ de Apymel para que las industrias pudieran vender de manera directa. Hoy, son 70 los pequeños industriales que venden calidad y a buenos precios en sus comunidades gracias a este programa”.
De todas maneras, remarcó que la complejidad del sector lácteo “obliga a que nos juntemos, que esté presente el Estado nacional y a buscar soluciones prácticas”.
SanCor
La crisis de SanCor “nos preocupa mucho, y desde ya, nos ponemos a disposición para lo que haga falta porque, más allá de las diferencias, es grave lo que generará si cae una empresa grande como eso, en lo que hace a fuentes de trabajo y a vida de muchos pueblos”.
Entiende que el problema no es el comercio con Venezuela. “Son múltiples factores, pero venderle a Venezuela a precios plenos cuando el resto cobrábamos menos, no hizo otra cosa que prolongar la agonía”, sentenció.
Relación con Atilra
El tema con el que más énfasis habló Villano, fue el de la relación de las Pymes lácteas con el gremio.
“Fuimos a la Justicia no por el aumento a los trabajadores, sino por el aporte que nos hace hacer el gremio que representa el 18% de un salario. Hoy, son 3.600 pesos por mes y por empleado que hay que darle a Atilra como aporte extraordinario, además de los otros establecidos por ley. Nos parece desmedido e injustificado”, dijo. Reconoció que la mayoría de las Pymes no están pagando ese aporte “pero generamos deuda, si un día vienen a exigirlo, directamente les tenemos que dar las llaves de nuestras fábricas”, planteó.
En lo que hace al aumento salarial del último año, que alcanzó el 40%, Villano señaló que “el segundo tramo aún no está homologado por el Ministerio de Trabajo y por lo tanto, no es exigible”.