“No somos golpistas, peleamos por un salario digno”, dijo el titular de la CGT Rodríguez Peña, Mauricio Saillén, ante miles de trabajadores que marcharon por el centro cordobés en reclamo de un cambio en las políticas económicas implementadas por el Gobierno nacional
Miles de trabajadores se movilizaron ayer por las calles de la ciudad de Córdoba para manifestarse en contra de las políticas económicas implementadas por el Gobierno nacional que encabeza el presidente Mauricio Macri.
La CGT Rodríguez Peña se concentró desde las 10 en la tradicional esquina de las avenidas Colón y General Paz y, desde allí, marcharon hasta la explaza Vélez Sarsfield, ubicada frente al shopping Patio Olmos.
El secretario general de la central obrera y titular del gremio de recolectores de basura, Mauricio Saillén, fue concluyente en sus declaraciones: “No somos golpistas, peleamos por un salario digno. Este es un marco que nos motiva, porque veníamos diciendo lo que se gestaba. Mucha gente se dejó engañar y hay que ser coherentes. Hoy día tenemos una flexibilización laboral, hay precarización, hubo 300 mil despidos y ahora tenemos 215 mil nuevos pobres en Córdoba”.
A la manifestación en el centro de la ciudad se sumaron trabajadores de ATE y de ADIUC, el gremio de los docentes universitarios de Córdoba.
La de ayer fue la segunda marcha del paro nacional en la capital provincial. Cabe recordar que el miércoles por la noche se había movilizado la CGT Regional Córdoba, encabezada por José Pihen, que también marchó por las calles céntricas.
Poca actividad
La ciudad se mostró con poca actividad. La ausencia de colectivos se hizo notar considerablemente y desde la Cámara de Comercio se informó que, aunque la entidad no compartía la medida de fuerza, la ausencia de transporte llevó a que la mayoría de los negocios del centro no abrieran sus puertas.
El Sindicato de Conductores de Taxis también resolvió adherir a la medida.
La administración pública se hizo eco del paro, lo mismo que el servicio de recolección de residuos. No hubo clases en los establecimientos educativos de la capital, tampoco trabajaron los empleados del Poder Judicial en reparticiones municipales o provinciales y no hubo actividad bancaria ni movimiento de camiones.
En cambio, sí trabajaron las estaciones de servicio, los empleados de los peajes y algunos locales comerciales.
Aerolíneas Argentinas canceló vuelos nacionales e internacionales desde Ezeiza y Aeroparque debido al paro ante la adhesión de la Asociación del Personal Técnico Aeronáutico (APTA) y la Asociación del Personal Aeronáutico (APA).
En Córdoba, en tanto, el Aeropuerto Internacional Ingeniero Ambrosio Taravella canceló los vuelos programados para la jornada de ayer.
“Fue contundente”
El secretario general de la Unión de Educadores de la Provincia (UEPC), Juan Monserrat, calificó de “contundente” el paro nacional de la víspera y habló de “concentraciones importantes” en las ciudades más grandes del país.
“El paro es muy necesario, muy trabajado, solicitado y muy debatido por el conjunto de los trabajadores y de la sociedad. Venimos trabajando desde el año pasado para manifestar en contra del plan de ajuste, con muchas concentraciones importantes en Buenos Aires y Capital Federal hemos logrado avanzar en una medida de fuerza contundente para decirle basta al plan de ajuste”, recalcó el gremialista.
En relación al acatamiento que tuvieron los docentes, sostuvo que “el apoyo de todos era hacia la medida de fuerza”, aunque los descuentos recibidos por los días de paro hicieron que ayer los maestros pensaran en el bolsillo.
“De acuerdo a las presiones, si uno le pregunta a los compañeros, sin dudas que se lleva la idea de que no hay acatamiento, muchos no pueden sumarse debido a la situación económica”, señaló el dirigente gremial.
Finalmente, Monserrat se mostró optimista sobre la continuidad de la negociación paritaria del sector, aunque sostuvo que “el Gobierno provincial está en un laberinto del que no puede salir”.
