Escribe Diego Pellegrini
Fotos Osvaldo Carballo
Con el regreso de Martín Conti a la dirección técnica, 9 de Julio de Pasco consiguió sus primeros tres puntos del año al vencer como visitante 2-1 a Atlético Ticino. Leandro Zalazar cumplió con “la ley del ex” y anotó los dos goles del triunfo
No era un partido más para 9 de Julio. Empezaba una nueva etapa desde la dirección técnica con la llegada de Martín Conti y debía cambiar. Y la suerte del Patriota cambió. Fue con una gran victoria en condición de visitante, por 2 a 1 ante Atlético Ticino, logrando así el primer grito de triunfo en lo que va del Torneo Apertura.
Con Leandro Zalazar como gran figura de la tarde (convirtió los dos goles), el conjunto de Pasco supo reaccionar al primer golpe de su rival (gol de Ulises Bonaveri), para construir un partido muy sólido desde lo defensivo, con mucha gente en la mitad de cancha, más la certeza del goleador, para no perdonar.
De esa manera, los locales no pudieron destrabar el cerrojo que propuso el Patriota para defender la ventaja conseguida. Con pocas ideas, chocando constantemente contra su rival, al equipo de Carlos Bonaveri se lo vio poco lúcido en los metros finales, pensando en la posibilidad de remontar el marcador.
No obstante, Atlético Ticino comenzó de la mejor manera la tarde de Pascuas en su reducto. Gambeta con buena definición a los 11’ de la primera etapa, para que Ulises Bonaveri se llene la boca de gol, decretando el 1 a 0 local con un lindo remate.
Poco pudo disfrutar el Albirrojo la diferencia tempranera, ya que a los 15’ llegaría la rápida reacción de 9 de Julio. Pase largo del defensor central Fernando Rodríguez para que Leandro Zalazar le gane la espalda a Elías Acosta, controle y defina al gol. 1 a 1 y el clásico empezaba de nuevo.
El local intentó nuevamente tomar el comando del encuentro. Con la gambeta y la movilidad de Ayrton Páez, más el juego de Bonaveri, Atlético parecía estar mejor dentro de la cancha. Remate de Páez, que tapa Alberto Altamirano, más otra del capitán número diez, que Facundo Bolatti nunca pudo llegar a definir.
Por el lado del visitante, a Emanuel Coria le costaba el juego, Ismael Rodríguez insistía con su potencia y era justamente Zalazar quien mejor estaba. Pero eso no alcanzaba y sólo un desborde de Currun Rodríguez por la izquierda, que Coria no pudo empujar, fue lo único de 9 de Julio en el primer tiempo.
Claro que el complemento tendría otro libreto y favorecería a la visita. Porque cuando amanecía la etapa, tras un tiro de esquina, la “peinó” Manu Coria en el primer palo y por el segundo la empujó Zalazar para concretar el 2 a 1 de Pasco.
Ventaja para el equipo de Martín Conti y a defender el “poroto” conseguido por el goleador cordobés que, por su pasado en Ticino, no festejó ninguno de los dos goles convertidos.
La última media hora larga que restó del clásico fue la que desnudó la cara más pálida del equipo local. Porque obligado por el marcador Atlético tuvo que salir a buscar el gol y fue justamente cuando falló.
9 de Julio se armó bien tácticamente, con la zona de volantes poblada (gran trabajo de Alan Westveer y Claudio Coria), más la línea defensiva que no mostró complicaciones, con Fernando Rodríguez a la cabeza. Claro que la falta de un centro delantero en el local le solucionó la situación al visitante.
Entonces, en su afán por empatar, Atlético Ticino rebotó constantemente, cerrando el partido sin poder rematar al arco de Altamirano tras el 1–2 de Zalazar. Una clara foto de lo que sufrió el juego del local, llamativamente.
El final de la historia lo tuvo a 9 de Julio cerrando el partido sin inconvenientes, mostrando una nueva cara, esa que ilusiona a su gente, con la llegada de un nuevo DT. Fue un domingo de resurrección Patriota.
La figura – Leandro Zalazar
Tuvo un partido soñado ante su exequipo. El delantero de 9 de Julio convirtió los dos goles y mostró un despliegue notable jugando como volante por la izquierda. Como premio al esfuerzo, el nueve tuvo dos y no perdonó, una en cada tiempo.
El árbitro – Federico Cejas
Tuvo un partido discreto, con algunos altibajos que no modificaron el trámite del encuentro. Al colegiado le faltaron algunas amarillas (amonestó tarde a Claudio Coria) y debió expulsar a Ezequiel Marrelli por una fuerte “plancha” contra Gustavo Bergese.